La hija del capitán Valle-Inclán PDF

Miguel  DE Unamuno

 Nacíó en Bilbao en 1864.  Se trasladó a Madrid a estudiar letras dejando atrás el mundo  de la infancia que después tanto añoraría. Después de un viaje a Italia y

 Francia volvíó a Madrid a preparar las oposiciones. Consiguió la cátedra de griego en la

 Universidad de Salamanca, de la cual sería nombrado  rector años mas  tarde. Este nombramiento le hizo una figura pública de creciente importancia. Su apoyo a los aliados durante la Primera Guerra Mundial dividíó al público en pro y anti-Unamuno. Fue condenado  por insultar al rey, y aunque la sentencia no se llevó a cabo, aumentó su prestigio como líder intelectual de la oposición.

            Durante la dictadura de Primo de Rivera fue exiliado a Fuerteventura y se marchó a Francia en exilio voluntario. Desde allí se convirtió en el símbolo de la oposición al régimen. Su regreso a España fue un triunfo personal. Se uníó a los que pedían la abdicación de Alfonso XIII y la instauración de la República. Ocupó  diversos cargos públicos y al cabo de unos años volvíó desilusionado a su trabajo en Salamanca. Allí murió en 1936.

 Toda  su obra gira entorno a la búsqueda de la verdad en el interior del ser humano.

El ensayo

 En 1895   publica En torno al casticismo, una de las claves de su obra donde profundiza en el carácter nacional. En esta obra introduce su concepto de intrahistoria, la historia de una nacíón en la que los protagonistas son los seres anónimos que realizan su tarea cada día. Para conocer esta tradición que no varía hay que introducirse en el pueblo y el paisaje y conocer el espíritu de las gentes.

 Tras la muerte de uno de sus hijos pequeños sufre una intensa experiencia espiritual que le lleva a despertar de su agnosticismo y buscar la inmortalidad. A partir de entonces se enfrentará a lo largo de toda su vida al problema de querer creer y no poder. Esa angustia le inspiró Vida de don  Quijote y Sancho (1905) y Del sentimiento trágico de la vida.

 En la Vida de Don Quijote y Sancho, Unamuno  presenta a Don Quijote como símbolo vivo de lo superior del alma castellana y prototipo de todos los que buscan la inmortalidad desafiando a la razón.

En Del sentimiento trágico de la vida el autor trata la conciencia de la propia existencia y el miedo a la no-existencia que impulsa al ser humano a continuar existiendo eternamente mediante la fe, los hijos y las obras de un escritor.

Como  consecuencia de su destierro cae en otra crisis. Fruto de ella surgen La agonía del cristianismo publicado en Francia y en francés, y Cómo  se hace una novela, en la que explica como  es hace un novelista, es decir, un hombre.

Novelas. “Nivolas”

Paz en la guerra es su primera novela, de género histórico, y la única que no sigue el esquema de nivola de Unamuno.

Amor  y pedagogía es la obra de transición a una nueva manera de novelar, en la cual Unamuno  prescinde de un argumento. Este nuevo estilo el propio autor lo llamo

 nivola y lo describe en el capítulo diecisiete de Niebla. Presenta al novelista como  un pequeño Dios. Se caracteriza por:

                  •  Renuncia a un planteamiento previo

                  •  Elimina las descripciones

                  •  El personaje central es un agonista, es decir, que lucha por su existencia

                  •  Eleva al diálogo a un puesto de máxima importancia en la narración

            En La tía Tula simboliza es ansia de inmortalidad, de pervivir en los descendientes, mediante el ansia de maternidad de la protagonista. Abel Sánchez es una meditación sobre el odio y la violencia. Don Sandalio, jugador de ajedrez es su obra más enigmática, cuyo tema es la diversidad que subyace en la aparente unidad del individuo. San Manuel Bueno, mártir es la historia de un cura que ha perdido la fe pero continúa ejerciendo su ministerio. Se considera el testamento espiritual de Unamuno.

Poesía y teatro

La poesía de Unamuno es de pensamiento. En El Cristo de  Velázquez, escrito en endecasílabos, medita sobre el cuadro del Prado. Sus obras poéticas son Poesías y

 Cancionero.Unamuno  escribíó un teatro muy personal. Sus obras son Fedra y El otro.


VALLE -INCLÁN

Nacíó en 1866 en Galicia. De joven se traslada a Madrid, donde vive hasta 1892, año en que  viaja a México (donde se alista en el ejército). Regresa a España en 1893 y se convierte en el típico artista bohemio.
Las heridas recibidas en un altercado nocturno le cuestan la amputación de un brazo. En 1929 es encarcelado por su activa oposición al régimen dictatorial de Primo de Rivera (al mismo tiempo Unamuno es desterrado a Fuerteventura por la misma causa). Desde 1931 desempeñó altos cargos culturales y diplomáticos para el gobierno de la II República Española en Roma. Muere en Galicia en 1936, poco antes de estallar la Guerra Civil.

De la biografía de este escritor se destaca de inmediato su fuerte personalidad y su carácter excéntrico (comenzando por su aspecto físico, su vestimenta, etc.) y la rebeldía constante contra la mediocridad carácterística de la España de la época.

Su evolución ideológica es bastante diferente a la del resto de escritores de la «Generación del 98» (grupo en el que se le suele incluir). Valle-Inclán evoluciona desde una primera etapa de atracción por el Carlismo ultra-reaccionario (hacia los primeros años del s. XX) hasta una progresiva radicalización de tintes anarquistas, la defensa de los «aliados» en la I Guerra Mundial y el compromiso activo con la II República en sus últimos años, pasando por un pensamiento típicamente noventayochista (oposición al sistema de la «Restauración» borbónica, Regeneracionismo,  etc.) en sus años intermedios (hacia 1910).

Se trata, en definitiva, de un trayecto parecido únicamente al de Antonio Machado (sólo que en Valle-Inclán dicha evolución ediológica es mucho más radical y crispada que en el moderado Machado).

Aunque escribíó poesía (en la línea modernista de los primeros años) y narrativa (durante toda su trayectoria literaria), Valle-Inclán es, antes que nada, un autor teatral.
Como tal, su obra dramática supuso una auténtica revolución en el panorama escénico español. Algunas de las nuevas vías dramáticas iniciadas por Valle-Inclán continúan, de hecho, todavía vigentes en la actualidad.

Comienza su producción dramática en 1899 y acaba en 1927. La constante a lo largo de estos casi 30 años es la voluntad de ruptura formal temática respecto a la dramaturgia realista
8que era en aquellos años, no lo olvidemos, la que triunfaba).

El conjunto de las obras teatrales de Valle-Inclán se desarrolla a través de varios ciclos, no sucesivos, sino paralelos.
Este escritor practicó a lo largo de su trayectoria escénica tres formas teatrales innovadoras.
Esas tres direcciones paralelas son: la mítica, la farsa y la «esperpéntica».

Si bien las dos primeras son de naturaleza mitificadora, la tercera lo es desmitificadora.
Pero, en realidad, todas ellas responden al espíritu iconoclasta e inconformista, subversivo, del autor frente a las convenciones sociales y literarias de la época. Son la expresión múltiple de un profundo individualismo que lleva al autor a investigar y experimentar en varias direcciones a la vez..

El ciclo mítico

Este conjunto de obras gira en torno al espacio de su Galicia natal. Pero, tanto Galicia como los personajes que allí aparecen, están vistos de forma idealizada. Espacio y personajes se convierten, así, en mitos.

Se nos da en todas ellas la imagen social de una Galicia anclada en el pasado. No se trata de una visión costumbrista, sino de un espacio en donde lo primordial, lo elemental y lo misterioso amenazan continuamente al hombre.

El ser humano, a su vez, está descrito como un ser guiado por impulsos primarios e instintos elementales: un hombre animalizado, sin psicología alguna, sometido a las fuerzas superiores del mal, lo irracional, el sexo, la muerte, la violencia, la brutalidad, etc.

Las Comedias bárbaras, El embrujado (obra incluida finalmente en el Retablo de la avaricia…
en 1920 por el autor) y Divinas palabras son las principales obras de este ciclo.

El ciclo de la farsa

Se trata de un conjunto de obras muy heterogéneas, en las que incorporan elementos procedentes del teatro de marionetas, la «Commedia dell’Arte» italiana y los entremeses del s. XVII español.

En estas obras se recrean los ambientes cortesanos de la España de los ss. XVIII y XIX (la corte de Isabel II) desde una perspectiva deformante. Se trata de sátiras muy críticas contra la mediocridad de la España de los Borbones. Ese mundo es un puro espectáculo grotesco para Valle-Inclán.

Obras como La farsa infantil de la cabeza del dragón, La marquesa Rosalinda, la Farsa italiana de la enamorada del rey o Farsa y licencia de la reina castiza entran dentro de este ciclo.

El ciclo del «esperpento»

La denominación de «esperpento» es obra del propio Valle-Inclán, que la usó para denominar determinadas obras (no sólo teatrales, sino también narrativas) escritas desde 1920 (recuérdese que, por ejemplo, Unamuno llamó «nivolas» a sus novelas para remarcar su carácter renovador frente a la concepción clásica de dicho género literario). Este tipo de obras son lo más famoso de su producción teatral. Se caracterizan por los siguientes rasgos.

La obra teatral se concibe como un espectáculo visual y auditico a la vez (el grito, por ejemplo, suele ser un elemento expresivo constante).

La diversidad escénica. Todos los esperpentos están construidos con múltiples segmentos. Su estructura se parece, en este sentido, al «collage».

Sólo una visión panorámica, de conjunto, unifica y da sentido, finalmente, esa variedad de segmentos escénicos dentro de una misma obra.

La figura humana de los personajes está vista desde una perspectiva plástica y grotesca (sobre todo en las acotaciones del texto dramático, pero también en la acción misma de cada personaje). Para describir a los personajes se usan, entonces, técnicas cubistas, primeros planos, cosificaciones y animalizaciones, teatralización, etc. Todo ello pone al esperpento en estrecha relación con el Expresionismo.

Tendencia muy marcada a la desmitificación de todo aquello que se presenta sobre escena. En este sentido, Valle-Inclán se siente heredero y continuador de otros artistas como Quevedo o Goya.

Relación con el cine: uso de la técnica del primer plano.

El autor focaliza la realidad como un demiurgo totalmente distanciado de aquello que nos muestra en escena. Por ello no se identifica nunca con nadie, superando el dolor, la compasión, la risa, etc.

La acción dramática y los protagonistas suelen tener un trasfondo trágico. Son como proyecciones de héroes clásicos vistos de una forma totalmente deformada y grotesca: se ve de forma cómica aquello que en realidad es trágico.

Hay un compromiso crítico muy marcado por parte del autor hacia la realidad. De él surge la visión que tiene Valle-Inclán de España como una deformación grotesca de Occidente. A partir de ahí, lo que es visto como deforme (España) queda de nuevo deformada sobre la escena: el Realismo como principio estético queda de tal modo totalmente superado. Por último se proyecta una visión subversiva y desacralizada de la realidad española.

Las carácterísticas del esperpento son:

  • Deformación de las situaciones y de la realidad.
  • Distorsión del lenguaje, a veces vulgar y de argot, pero siempre rico y elaborado.
  • Degradación de los personajes, vistos como animalizados, cosificados, como muñecos grotescos y peleles.
  • Presencia simultánea de aspectos trágicos y paródicos.
  • Situaciones absurdas.
  • Hipérboles.

En definitiva, el «esperpento» no es sólo una forma literaria creada y desarrollada por Valle-Inclán o la culminación de su producción teatral. Se trata, más bien, de una verdadera cosmovisión o visión del mundo y la realidad.

Junto a la novela Tirano Banderas, la trilogía Martes de Carnaval y Luces de bohemia son los mejores ejemplos de lo que el propio autor llamó «esperpentos».

Con Federico García Lorca, Valle-Inclán fue el dramaturgo que de forma más brillante, radical e innovadora rompíó con los moldes del Realismo burgués.

La visión global de la obra literaria de Valle-Inclán aparece recogida en el siguiente esquema:

Etapa modernista, ciclo mítico, tema carlista, farsas

ETAPA DEL «ESPERPENTO» (desde 1920, aproximadamente)


POESÍA

Aromas de leyenda


        La pipa de Kif (1919)

N AR R AT IV A

Femeninas (1895)

Sonatas (1902-1905)

Flor de santidad (1904)

    Trilogía La guerra carlista
:

     –
Los cruzados de la causa
(1908)

     –
El resplandor de la hoguera
(1909)

     –
Gerifaltes de antaño
(1909)

            Tirano Banderas (1926)

          Trilogía El ruedo ibérico
:

                    –
La corte de los milagros
(1927)

                    –
Viva mi dueño
(1928)

                    –
Baza de espadas
(inacabada)

T E AT R O

  Cenizas (1899)

 Divinas palabras (1920)

 Trilogía Comedias bárbaras
:

     –
Ágüila de blasón
(1907)

     –
Romance de lobos
(1907)

     – – – – – – – – –
Cara de plata
(1922)

 Farsas:

    –
La cabeza del dragón
(1909)

    –
La marquesa Rosalinda
(1909)

    – – – – – – – –
La enamorada del rey
(1920)

    Farsa y licencia de la reina castiza (1920)

Trilogía Martes de carnaval
:

                   –
Los cuernos de Don Friolera
(1921)

                   –
Las galas del difunto
(1926)

                   –
La hija del capitán
(1927)

                    Luces de bohemia (1924)

 Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte (1924-1927):

  (5 obras)    –

La rosa de papel

                     –

Ligazón

                     –

Sacrilegio

                     –

La cabeza del Bautista

 –

El embrujado

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