Gonzalo de Berceo: el conde Lucanor

Cuento I: Un hombre poderoso le da a entender a Lucanor que es muy amigo suyo y entonces le dice que quería dejarle sus tierras ya que él se quería ir y nunca más volver. Ej- Un rey tenía un favorito, y el resto envidiaba a este. Pensaron cómo hacer para sacarle al rey su favoritismo hacia él. Le dijeron al rey que el favorito estaba tramando su muerte para poder apoderarse del pequeño heredero. El rey se preocupó y cayó en duda y quería averiguar qué era lo que sucedía. En dos oportunidades le dijo que quería dejar el reino y luego le dijo que quería que el favorito se hiciese cargo del mismo. El favorito no quería aceptarlo y le dio razones para que no lo deje, pero luego terminó sintiéndose complacido por esto. El favorito tenía un consejero, y este le dijo que el rey hizo eso para probarlo. Le aconsejó al favorito ir al día siguiente con todas sus riquezas a verlo al rey y decirle que lo acompañaría. El rey entendíó así lo leal que su favorito era y le dijo que estuvo a punto de ser engañado.

Conclusión: Lucanor acepta y entiende el consejo de Patronio


Sentencia: Nada viene tan fácilmente de alguien no conocido, en cuyo caso, habría que dudar de lo que se propone


Cuento II: Lucanor le dice a Patronio que algo que quería hacer, si lo hacía, sería criticado, y si no lo hacía, también.Ej-Un hombre bueno tenía un hijo, y a cada cosa que el padre propónía, el hijo le decía que podía suceder lo contrario a esto. Esto era un gran estorbo para los negocios del padre, por el perjuicio y por el enojo que le producía todo lo que el hijo le decía. Ambos eran labradores y fueron a comprar cosas, acordaron llevar una bestia para traerlas. En un comienzo iban los dos a pie, a esto, la gente le dijo que era ilógico que ambos estén a pie, el padre le preguntó esto a su hijo, que estaba de acuerdo, entonces el hijo subíó a la bestia. Luego sucedíó lo mismo, pero ahora por lo que se decía, lo lógico era que el padre esté en la bestia. Le preguntó a su hijo qué le parecía y le dio la razón. El hijo bajó y el padre subíó, luego sucedíó lo mismo y subieron los dos. A esto, la gente dijo que la bestia no estaba lista para recibir el peso de los dos, el padre le preguntó al hijo qué pensaba, y estaba de acuerdo, y ambos bajaron. El padre dijo que lo hizo de ejemplo para que se dé cuenta que nunca va a poder hacer algo que todos aprueben.  Lucanor acepta y entiende el consejo de Patronio. Le dice que se aconseje con gente leal y que no tome decisiones apuradas. 

Sentencia: no hay que tener miedo al qué dirán, y hacer lo que uno cree conveniente

Cuento IV- Un día le dijo el Conde a Patronio que él estaba muy bien como esta ahora mismo y que le estaban aconsejando meterse en un negocio dudoso. Entonces patronio le contó una historia de lo que le dijo un genovés a su alma antes de morirse.
Había un genovés que tenia mucha riqueza y que cuando estaba a punto de morir de viejo le dijo a todos sus familiares que se reunieran con él. Cuando estaban con él empezó a hablar con su alma y empezó a decirle que tenia todo lo que pudiera que desear joyas, tapices, buenos amigos, mucha fama, y que no entendía por que se quería ir a un sitio al cual desconoce. Entonces le dijo Patronio que le estaba pasando algo parecido ya que esta bien como esta y no necesita meterse en ningún negocio para complicarse la vida. El que bien sentado esta que no se levante

Cuento V: Lucanor le dice a Patronio que un hombre lo alaba mucho, y lo honra, y le propuso un convenio que a primera vista, parece favorable. 
Ej- cuervo halló un pedazo de queso, se subíó a un árbol. Un zorro lo vio y pensó en como quitarle el queso. Lo halagó, de todas las maneras posibles, su pelaje, sus ojos, sus garras, y luego cuando el cuervo pensó que el zorro era su amigo, este último le pidió al cuervo que cantara. Cuando lo hizo, el cuervo soltó su queso, el zorro lo tomó y huyó.
Patronio le dice al Conde que si tanto lo alaba, es porque lo quiere engañar, y aquel hombre le hace creer que es más de lo que realmente es. 

Sentencia: Si alguien te alaba más de lo normal y quiere algo de vos, es probable que te esté engañando

Cuento VI: Lucanor le dice a Patronio que le propusieron un gran negocio pero para que éste se dé, se deberían dar demasiados hechos encadenados.
Ej: Una señora muy pobre iba con una olla de miel en su cabeza, se imaginó que luego la vendería, compraría huevos, nacerían gallinas, compraría ovejas y sería más rica que sus vecinas. Pensó que sus hijos se casarían y la admirarían por pasar de la pobreza a la riqueza. Hasta que la miel se cayó, y junto con la olla, se fueron todos sus sueños.

Patronio le dice a Lucanor que crea en cosas posibles y no en vanas esperanzas


Sentencia-Creer en cosas lógicas y no creer en algunas esperanzas prácticamente imposibles de concretar


Cuento X: Lucanor dice que Dios le dio más de lo que él merece y podría retribuirle, pero a veces se siente tan pobre que le da igual vivir o morir. Le pide consejos a Patronio.  Dos hombres que fueron muy ricos, sufrieron la pobreza, uno llegó a comer altramuces, que eran amargas y de mal sabor, y se sentía muy triste por esto, pero luego vio al otro hombre, que antes era más rico que él, que comía las cáscaras de las altramuces y luego el primero de estos dos, se dio cuenta que había gente en peores condiciones que él y se debía sentir menos desgraciado. Con ayuda de Dios encontró la forma para salir adelante y mejorar su estado. Patronio le dice a Lucanor que nadie puede tener absolutamente todo lo que desea, y si en alguna vez esta en algún problema, tiene que tener en cuenta que siempre hay gente en peores condiciones.
Sentencia: Por más pobreza que uno tenga, no debe sentirse desgraciado, ya que siempre hay gente que está peor que uno.

CuentoXI: Lucanor conocíó un hombre que dijo que si lo ayudaba, luego este haría por él todas las cosas que fuesen para la honra y el bien de Lucanor, sin embargo, cada vez que Lucanor le pedía algo, este siempre le ponía excusas. un deán quería saber el arte de la nigromancia (predecir el futuro), y fue a ver a don Yllán, que lo recibíó muy bien, el deán le dijo que si le enseñaba el arte, le prometía y aseguraba que haría todo lo que donYllán mandase. Mandó a una manceba y le dijo que preparara unas perdices. Luego llevo al deán a una cámara y le mostró todos sus ascensos, hasta llegar a ser Papa, y en cada uno, don Yllán le pedía algún favor y el deán siempre puso excusas. Luego don Yllán se fue a comer las perdices, ya que en realidad, nunca salieron de su casa, todo esto lo vio por el arte de la nigromancia. 

Patronio le dice a Lucanor que si este hombre le pide ayuda y no le agradece, no tiene por qué preocuparse por él


Sentencia: Si vos ayudas a alguien, y no te lo agradece, mientras mejor condición tenga esa persona, menos te agradecerá. 

Cuento XIX: Lucanor le dice a Patronio que tiene un enemigo, y un pariente de este enemigo se quería unir a él para poder hacerle más daño a su enemigo. los cuervos tenían una pelea con los búhos, y estos últimos los atacaban a los cuervos en la noche, causándoles mucho daño. Un cuervo pensó en que el resto de los cuervos le sacaran todas sus plumas y dejarlo indefenso e ir a hablar con los búhos, para “contarles” donde estaban todos los cuervos. Los búhos se alegraron creyendo todo lo que decía. Excepto por uno, que sospechó, pero no fue tenido en cuenta, y se alejó del resto. Una vez que el cuervo de recuperó, les dijo a los búhos que iría a ver donde estaban los cuervos para luego atacarlos. Cuando el cuervo se juntó con el resto del os cuervos, les dijo donde estaban los búhos y los fueron a atacar y matar, quedando como vencedores.Lucanor acepta y entiende el consejo de Patronio. Le dice que esta persona solo se acercó para hacer daño, pero si no corre peligro él, quizás lo que diga sea de verdad.

Sentencia- aquel que es tu enemigo, no le deberías creer ni confiar mucho


Cuento XX
Un día que estaba el conde Lucanor con Patronio y le dijo que un hombre fue a verle y le dijo que le podía proporcionar mucho poder y riquezas, pero que tenia que darle algo de dinero para empezar.  Entonces Patronio le contó lo que le sucedíó a un rey con un hombre que le dijo que sabia hacer oro. Había un pícaro que se entero que en un reino había un rey que no era muy listo estaba buscando en la alquimia el poder de hacer oro. Entonces redujo cien doblas a polvo y juntándolo con otras cosas hizo cien bolitas. Entonces se dirigíó a ese reinado y fue a un especiero y le pregunto para que servían esas bolas, y le contesto que servia entre otras cosas para hacer oro y al preguntarle que como se llamaba le dijo que se llamaba tabardíe.  El pícaro estuvo tiempo en la ciudad corriendo el rumor de que sabia hacer oro, hasta que un día el rey le llamó para que fuera a verle, el pícaro negó que pudiera hacerlo pero después de insistirle el rey dijo que si y le dijo que le trajeran lo que necesitaba para hacerlo entre esas cosas estaba el tabardie, sacando una dobla de oro. El rey vio que el hombre no le había engañado y cuando el hombre se fue se dispuso él a fabricarlo pero cuando se agotaron los tabardies ya no podía hacer el oro. Entonces hizo llamar al pícaro para que le dijera como conseguir los tabardies entonces el pícaro le pidió dinero para realizar el viaje en busca de los tabardies, cuando al pícaro le dio el dinero para ir a por él desaparecíó. La gente del pueblo hizo una lista de los más tontos, los más ricos, los más valientes y encabezaba la de los más tontos el rey. Este los hizo llamar y les dijo que por que lo había puesto en la lista de los tontos y a lo que estos le contestaron que haberle tanto dinero a quien no conocía.
Entonces Patronio le dijo que no le diera dinero a ese hombre para que no le pasase lo mismo al rey.

Cuento XXI: El otro día hablando el conde Lucanor con Patronio le dijo que tenia un pariente que se le murió y le dejo un hijo al cual él a criado y que le quiere como a un hijo y quería que llegase a buen camino y que nadie le confundiera a hacer lo contrario.  Entonces Patronio le contó la historia de lo que le paso a un rey mozo con un gran filosofo a quien su padre había encomendado.  Había un rey que tenia un hijo el cual lo estaba educando un filosofo, en quien confiaba mucho. Cuando el rey murió él filosofo adoctrino a su hijo hasta los quince años. Pero luego el chico entro en la mocedad y empezó a desdeñar los consejos del sabio y hacer caso a los consejos de otros chicos, que como no le quería no se preocupaban por su fama y salud.  Entonces todo el mundo lo criticaba por no cuidarse y por mal gastar los tesoros. Él filosofo al no poder controlarlo y conseguir que haga las cosas bien pensó un plan en el cual empezó a decir todo el mundo que entendía el lenguaje de las aves, hasta que llegaron los rumores al rey. El rey le dijo que fuera y le pregunto si esto era verdad. Al principio él filosofo no quería contárselo para hacerse mas desear, pero al final lo contó.
Y quedaron en que al día siguiente. A la mañana siguiente madrugaron y fueron a un valle y vieron una corneja que graznaba, entonces él filosofo hacia como que entendía el lenguaje de las aves. Al poco otra corneja empezó a “ hablar ” con la otra, y cuando acabo él filosofo empezó a llorar. El rey preocupado le pregunto que por que lloraba y este le respondíó que lloraba por que las dos cornejas habían acordado casar al hijo de una y a la hija de la otra y que como hacia tiempo que el casamiento estaba acordado, ya era hora de que se casasen.  La otra corneja le dijo que tenia razón, pero que como ella ahora era más rica, por que desde que reinaba el rey habían quedado abandonadas las casas y estaban llenas de culebras y demás víveres para ellas por lo que el casamiento ahora no era lo mismo que antes. Cuando la otra oyó esto se empezó a reír por que era una tontería aplazar por eso el casamiento por eso ya que si sigue viviendo el mismo rey seguirá pasando lo que esta pasando.
El rey al oír esto se dio cuenta de lo que estaba haciendo y enderezo su reino y salíó hacia delante.  Entonces Patronio le dijo que tuviera cuidado con su chico y no le riñera ya que le podía suceder como al filosofo.

Cuento XXIV: Lucanor le dice a Patronio que tiene muchos mozos, uno de elevada condición y otros no tanto, y que tienen extrañas maneras de ser, y le pide que le aconseje de qué manera podrá conocer qué mozo llegará a ser mejor hombre. Patronio le dice que es algo difícil de saber. un rey moro tenía tres hijos y quería saber cuál iba a ser el heredero del trono. Al hijo mayor y al del medio, a cada uno le dijo de ir un día distinto, ambos llegaron tarde, y en el momento de vestir a su padre, iban y venían por cada prenda que le ponían a este. Y lo mismo hicieron en el momento que tenían que ensillar el caballo. Cuando el rey les pidió que recorrieran el pueblo y que luego le dijeran que pensaban de este, le dijeron que estaba todo bien y le criticaron cosas irrelevantes, como que había mucho ruido. Todo lo contrario hizo el hijo menor. Madrugó antes que su padre, le pregunto una sola oportunidad cómo quería vestirse y cómo quería que ensillara a su caballo. Y en el momento que fue a recorrer el pueblo, cuando volvíó le dijo que aunque era buen rey, si por él no fuese, todo el mundo debía ser suyo. En el momento de elegir al rey, lo hizo por las señales que vio. Patronio le dice a Lucanor que si quiere saber cuál mozo es mejor, por las obras que estos hagan y las maneras de ser, podrá saber cuál es mejor

Sentencia: Por los actos y las obras que una persona haga, se puede determinar cuál de estos es mejor


Cuento XXIX: Lucanor le dice a Patronio que un pariente suyo tiene problemas y entiende que estos son muy graves. Y le pide a Patronio que lo aconseje para que no esté tan.Un zorro entró a un corral, mató a gallinas, y cuando quiso salir, se dio cuenta que era de día y había mucha gente y no había lugares para esconderse. Decidíó tenderse como si estuviera muerto en la calle. Al principio nadie le prestó atención, luego uno se dio cuenta que podía utilizar los pelos del zorro muerto, otro la uña del pulgar, otro los dientes, a todo esto el zorro permanecía inmóvil. Hasta que uno dijo que el corazón del zorro podía ser útil, en ese momento el zorro decidíó que era mejor salir corriendo, porque o morir acuchillado, o que lo capturaran, no había diferencia, pero si corría había alguna posibilidad de salvarse. Se aventuró y se salvó. Patronio le dice a Lucanor que le diga a su pariente que aguante cuanto pueda, hasta sufrir graves daños. Ya que es mejor la muerte defendiendo su honra que vivir sin esta.

Sentencia- Uno debe sufrir hasta un cierto punto, luego, debe alejar las cosas lo más que pueda

 Cuento XXX: Lucanor cuando ayuda a un hombre, este da a entender que se lo agradece, pero sin embargo, si no lo hace como este hombre quiere, se irrita y da a entender que no lo agradece y se olvida todo lo que Lucanor hizo por él. Rey Abenabet, casado con Ramayquia, esta era muy buena, pero tenía muchos antojos, como por ejemplo, cayó una nevada, y luego se puso triste porque no había siempre nieve, por lo tanto el rey, hizo plantar almendrales, para que apareciesen flores similares a la nieve. Luego vio a una mujer revolviendo lodo descalza. Ella quiso hacer lo mismo, entonces el rey mandó llenar de agua de rosas una albufera. Otro día lloró diciendo que el rey no hacía nada para complacerla, a lo que este le respondíó si no se acordaba lo que había hecho por ella el día del barro. Patronio le dice a Lucanor que no haga tanto por él, y que si en algún momento la situación fuera al revés, que agradezca lo hecho previamente

Sentencia- No busques hacerle tanto bien a aquel que no reconoce el bien que uno hace


Cuento XXXII: Un hombre le propone algo a Lucanor, que no se lo puede contar a NADIE, y de hacerlo, su vida corre peligro. tres farsantes le dijeron a un rey que podían hacer un paño que solo podía ser visto por aquel que era hijo del padre. Lo cual agradó al rey, ambicioso, ya que podría obtener las herencias de los hijos adoptivos. Estos se encerraron hasta tener el paño listo, le dijeron que podía ir a verlo, pero si iba sin compañía. Envió a un camarero, no se atrevíó a decir que no veía el paño, y le dijo que el paño era muy bueno. Y luego envió a muchos otros sirvientes que venían con la misma respuesta, por temor a ser hijos adoptivos. Luego el rey entró al lugar, y no vio nada, por temor a no ser hijo biológico se aprendíó la descripción y lo comenzó a alabar, contando maravillas de la calidad. Siguió mandando gente, y todos venían con la misma respuesta. Así siguió hasta el día que había una gran fiesta, a la cual llevó el paño. Los habitantes lo veían venir de ese modo y nadie dijo nada por temor a no ser hijos biológicos. Excepto un negro que no tenía nada que perder y le dijo que no veía nada, entonces la gente se animó a decir que no veía nada. Se dieron cuenta que era una gran mentira, pero cuando volvieron, los farsantes ya se habían ido. 

Lucanor acepta y entiende el consejo de Patronio. Le dice que lo querían engañar


Sentencia: quien quiere esconderte las cosas y no te permite compartirlas, te quiere engañar sin testigo alguno


Cuento XXXV: Lucanor le dice a Patronio que un criado suyo se iba a casar con una mujer más rica y noble que el criado, pero esta mujer es la más violenta y la de más mal carácter del mundo.un hombre tenía un muy buen hijo, este hombre, también tenía un amigo más honrado y rico, con una hija de muy mal carácter. El buen hijo deseaba casarse con la hija del amigo del padre, a lo que este último le dijo que si le daba la hija a su hijo, sería un mal amigo, pero si él lo deseaba, no tenía ningún problema. Su hijo rogaba el casamiento ese, por lo tanto se terminó concretando. Dejaron a los novios solos. Él llamó al perro y le dijo que le traiga agua, como no lo hizo, lo mató, lo mismo sucedíó con un gato, y con su único caballo. Luego le dijo a su mujer que haga esto, y por temor, no dudó y cumplíó lo que el novio le dijo. A la mañana siguiente no se escuchaban voces, y pensaron que el novio estaba o muerto o herido. Luego todos comprendieron lo que él había hecho, y su suegro quiso hacer lo mismo, pero la mujer le dijo que debíó haber comenzado antes porque ya se conocían.

Lucanor acepta y entiende el consejo de Patronio


Sentencia: si no demuestras quién sos en la primera impresión, después cambiar la imagen que tienen de uno es más difícil. 

Cuento XLIX: Hablando el conde Lucanor con Patronio, le dijo que como es tan rico y tan poderoso, y como lo que más le conviene es ser cada vez más rico y más poderoso, quería saber lo que pensaba Patronio de esto.  Entonces Patrono le contó lo que le sucedíó al que dejaron desnudo en una isla desierta.  Era un país que tenia la costumbre de cada año cambiar de rey y dejarlo desnudo en una isla desierta. Sucedíó que él ultimó que había sido rey era mas listo que ninguno y dijo que le hicieran una casa donde lo iban a dejar, y allí vivíó muy bien.  Entonces Patronio le dijo que él lo que tenia que hacer era hacer buenas obras para que en la vida siguiente tuviera una buena vida

Cuento LI: Estaba un día el conde Lucanor con su consejero Patronio, y le dijo que no sabia que era mejor sí la soberbia o la humildad. A esto Patronio le contesto que le iba a contar lo que le sucedíó a un rey cristiano muy soberbio. Era un rey que era tan soberbio que una vez oyendo el cántico de Nuestra señora oyó algo de la humildad y hizo que lo cambiaran por algo que no tuviera esa palabra. Entonces esto como a Dios no le gusto y como lo que tenia sin ninguna duda la Virgen es humildad.

Al rey soberbio le sucedíó que un día se fue a bañar fuera del Alcázar y dejo la ropa en otra habitación. Mientras se estaba duchando, Dios mando un ángel tomando la figura del rey y le quito la ropa y se fue con sus acompañantes dejando unos trapujos. De esto no se percató el rey y al salir de la ducha empezó a llamar a sus gentes pero al no estar no le oían. Entonces salíó de la ducha y al no encontrar sus ropas cogíó lo que dejó el ángel unos trapujos de mendigo. Entonces el rey se tomo por burlado y se los puso y se fue derecho al castillo para que no lo vieran. Entonces al llegar allí nadie le reconocía y todos le tomaron por loco.
Estuvo así tanto tiempo mendigando por las casas que creyó que estaba loco y entonces se dio cuenta de que todo esto había venido al cambiar las palabras de aquel cántico. Entonces Dios se dio cuenta de que se había arrepentido de sus actos y hizo que el falso rey lo llamara. Así paso y el ángel le dijo que el no estaba loco y que en verdad él había sido rey. Entonces le devolvíó la corona y le dijo que cambiaran otra vez las cosas de aquel cántico a como estaban y ya no volvíó a ser soberbio.
Entonces Patronio le dijo al conde que lo peor que puede hacer una persona es ser soberbia.

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