Teatro español de la segunda mitad del Siglo XX. Antonio buero vallejo

EL TEATRO ANTERIOR A LA Guerra Civil 

En el teatro de esta época van a pesar condicionamientos comerciales
Podemos destacar dos tipos de teatro:
Teatro que triunfa: Con elementos modernistas aunque su orientación ideológicas tradicional  (Las hijas del Cid, Eduardo Marquina)
Teatro elitista: de escasa fortuna comercial, aunque innovador. Tiene nuevos enfoques tanto ideológicos como formales (Miguel de Unamuno, Valle-Inclán…)

1. Galdós y Dicienta: dos intentos de renovación
Éstos autores pretendieron romper con el convencionalismo teatral
Galdós significó una renovación de la temática teatral (Realidad). Buscaba reflejar el drama interior de una persona enfrentada con el medio social

Dicienta abríó el camino para el drama social (Juan José). Refleja los enfrentamientos de clases 

2. El teatro que triunfa: Jacinto Benavente. El teatro poético. El teatro popular
2.1. Jacinto Benavente
Inicio de la comedia de salón, aplaudida por el sector tradicional
La comedia de salón respetó a los principios de la burguésía, aseguraban su éxito (este autor escribíó todo aquello que la gente quería escuchar y ver representado)
Su obra se fundamenta en una actitud crítica de la sociedad burguesa y aristocrática (El nido ajeno) 

Su obra más conocida es, Los intereses creados.
Esta obra une la tradición de la comedia del arte y del teatro clásico español, escapa a la inmediatez y habla sobre cuestiones de carácter universal. Tiene un poso amargo y pesimista (los humanos somos corruptibles hipócritas)

No se ve influido por movimientos españoles, ignoró la estética vanguardista e ignoró los nuevos movimientos europeos
Sin embargo otros autores, siguieron sus preceptos estéticos y temáticos (La garra, Manuel Linares) (La tonta del bote, Pilar Millán) 

2.2. El teatro poético
Antes de terminar la primera década del Siglo XX surgíó un teatro poético en verso, antirrealista, que incluya elementos modernistas
Este tipo de teatro se opone a las propuestas estéticas y temáticas de los miembros de la generación del 98, por lo que resulta anticrítico y apologético
Las flores de Aragón, Eduardo Marquina 

2.3. El teatro popular 
Géneros como la zarzuela, la revista, el vodevil o el sainete
De carácter superficial, para el entretenimiento y en los que la música va a tener vital importancia

Carlos Arniches va modificar el sainete, alargándolo y dándole mayor unidad de carga emotiva = tragedia grotesca (donde se une lo cómico y lo serio) (Es mi hombre)
Éste autor creó todo un lenguaje teatral. Lo caracterizaba la imitación de lo popular, las creaciones léxicas y la dislocación expresiva

Los hermanos Álvarez Quintero, Serafín y Joaquín entendieron el teatro como consumo y procuraron que el público se identificara con sus propuestas dramáticas
Su teatro se plaga de sentimentalismo y falta de postura crítica
No es un teatro socialmente comprometido sino que es pintoresco y optimista
Los diálogos son fluidos y graciosos y hay una extraordinaria maestría técnica 

3. El teatro innovador Podemos destacar cuatro autores: Unamuno, Azorín, Valle-Inclán y Lorca

3.1. Unamuno y Azorín
Apostaron por un teatro antirrealista que desvela el mundo interior y donde lo subconsciente y lo maravilloso tuvieran cabida

Unamuno tomó la muerte y la angustia, así como el problema de personalidad y el de la soledad como temas principales (El otro) 
En su dramaturgia prima la palabra sobre la acción y su concepción escénica es espartana, desnuda y minimalista

Azorín su teatro abre la expresión de los subconsciente, lidiando con el Surrealismo (Angelita)
Era un teatro preocupado por los problemas del hombre, el ensueño, el misterio, la muerte y el más allá eran temas principales en sus obras


EL TEATRO ESPAÑOL DESDE LA Guerra Civil.

Durante la Guerra Civil y su posguerra se cultivó teatro de los dramas de carácter testimonial. 
A finales de la década de los 40, en oposición del teatro de evasión, surgieron dramaturgos.

1.1 Situación de la escena española en la posguerra.
El panorama teatral es desolador: los autores que apostaban por una renovación teatral ya han muerto (García Lorca) o están en el exilio (Rafael Alberti).
 Solo se busca el éxito económico, lo cual va a impedir todo intento renovador. 

1.2. El teatro  del exilio.
Es en el exilio donde se va a seguir cultivando un drama sobre el aquí y el ahora en España. También se escriben dramas intemporales. 

Max Aub propuso con su dramaturgia un análisis de la situación política, social e ideológica, en la que se encontraba sumergido el hombre contemporáneo.

Rafael Alberti somete desde el exilio toda su creación literaria a un proceso de autocrítica del que surgían sus mejores obras dramáticas. (Noche de guerra en el Museo del Prado).

Alejandro Casona, preocupado por la dialéctica entre realidad y fantasía, trató problemas atemporales y generales.
Al final de sus piezas, los personajes deben abandonar el mundo ficticio y asumir la verdad. 

1.2.1. Destacan 2 grandes maestros: Enrique Jardiel Poncela en los años 40, y Miguel.Mihura en los 50

Enrique Jardiel Poncela.
El teatro de Jardiel Poncela trata de transformar las raíces y motivaciones del humor español. Para Jardiel Poncela, lo inverosímil, tal y como afirma en Cuatro corazones con freno y marcha atrás es la meta de su arte. Este autor tuvo capacidad para aproximarse al Vanguardismo.
Las descripciones que en sus obras hace de los escenarios son minuciosas, detalladas y de enorme interés técnico.

Miguel Mihura.
Miguel Mihura escribíó meros pasatiempos así como obras en las que late la idea, el choque entre el individuo y la sociedad, lo que provoca la infelicidad del ser humano. Ninette y un señor de Murcia.

Además de su labor dramatúrgica, Mihura dirigíó dos conocidas revistas humorísticas (La Ametralladora y La Codorniz), siendo elegido miembro de la RAE en 1976.
Centrándonos en su labor en el mundo del teatro, Miguel Mihura comenzó su producción antes de la Guerra Civil, su popularidad lo liga a la década de los 50.

Tres sombreros de copa, su obra más representativa, estrenada veinte años después de ser escrita. Trata de la automarginación.
Dionisio, su protagonista, responsable y serio, se enamora de Paula, que representa el mundo libre. Al final Dionisio renuncia al amor, a la libertad, y por ello, se reintegra en el orden social establecido.

La amabilidad y el tono ligero de la dramaturgia de Mihura lo alejan de las posturas existenciales, haciendo de su labor un vehículo comercial.


1.3. El teatro comprometido.
El nacimiento de Arte Nuevo, en 1945, grupo dramático al que pertenecen autores como Alfonso Sastre va a revolucionar la escena española: El estreno de Historia de una escalera, de Antonio Buero Vallejo. Esta obra refleja la realidad de la sociedad española con un marcado sentido crítico. 
El paso del tiempo es esencial en esta historia acerca de la frustración de quienes no pueden ni quieren escapar de la escalera, símbolo de inmovilidad social.
La dramaturgia de Buero Vallejo posee una intención trágica para el autor, la tragedia trata un hombre que vive de espaldas a la verdad, ciego, falsamente feliz en su desconocimiento, y que padece y sufre cuando abre sus ojos o arroja luz sobre la ansiada verdad (Tragaluz).
El teatro de Buero Vallejo manifiesta el conflicto entre necesidad y realidad, siendo permanente la oposición entre soñador y hombre de acción.
Para expresar su mensaje, el autor acude a signos varios que van desde el diálogo hasta la mímica y el movimiento corporal, efectos auditivos y visuales.
R.Doménech acuña el término “inmersión” para designar la técnica por la que Buero Vallejo capta al espectador y lo introduce en la acción.
Para entender mejor la dramaturgia de este autor, vamos a prestar ahora especial atención a una de sus más populares creaciones, El tragaluz.

EL NUEVO TEATRO ESPAÑOL.
En los años sesenta surge un movimiento de renovación teatral caracterizado por un acercamiento al teatro extranjero y una valoración del teatro independiente. 
Alberto Miralles destaca en el año 67 por el redescubrimiento del escritor francés Antonin Artaud y gestión del Mayo francés.

Los nuevos autores llevan a cabo ciertos experimentos metateatrales:
Destrucción interna del personaje.
El lenguaje y la acción son parabólicos, significando siempre desde más allá de sí mismos. La función del espectador no es sólo ver sino interpretar la obra.
El espacio escénico se convierte en un objeto significativo en sí mismo.

TEATRO ESPAÑOL DESDE 1975 HASTA NUESTROS DÍAS.
La actuación política consiguió fundar el Centro Dramático Nacional.
Se creó el Centro Nacional de Nuevas Tendencias Escénicas.
También la Compañía Nacional de Teatro Clásico.
Las comunidades autónomas concedieron subvenciones a espectáculos.
Se aprecia en esta etapa una desaparición del autor como figura principal y el espectáculo se enfrenta a la competencia del cine y de la televisión.

A partir de 1975 hay tres grupos:
Autores consagrados como Buero Vallejo, Alfonso Sastre o Antonio Gala con un teatro de corte tradicional.
Dramaturgos que se dan a conocer en la transición a la democracia, como Francisco Nieva.
Autores cuyas obras ya aparecen en plena democracia (Paloma Pedrero).

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