Vanguardia, poesia tradicional y poesia culta

Tema 5:En la novela europea de esta época, la atención se va desplazando de la peripecia externa al interior del protagonista, muchas veces caótico y contradictorio, incluso del argumento interesante al estilo, del “qué” se cuenta al “cómo” se cuenta. En España, para los miembros de la Generación del 98, el género narrativo se convierte en instrumento idóneo para llevar a cabo la tarea de regeneración del país que figuraba entre sus principales objetivos. Además de Unamuno y Baroja destacan en esta generación:Azorín: destaca en la literatura española del siglo XX como gran renovador de la prosa descriptiva; escribió La voluntad, novela donde trata la falta de voluntad o de energía como una de las principales lacras de la sociedad española.La principal característica de su estilo es la utilización de una sintaxis sencilla pero de gran riqueza y precisión léxica, estilo apto para la descripción minuciosa de la realidad cotidiana. Ramón del Valle-Inclán: A la primera fase modernista corresponde el ciclo de las Sonatas, cuatro novelas que se presentan como las memorias del Marqués de Bradomín, un Don Juan “feo, católico y sentimental” representación de una aristocracia rural en trance de desaparición. La segunda etapa, “primitivista”,exalta un mundo tradicional, rural, violento y primario de pasiones desbordadas, leyendas, mitos y supersticiones. Se sitúa aquí la trilogía narrativa de La guerra carlista. A partir de 1920 llega la época del esperpento, deformación sistemática y grotesca de la realidad con intención crítica, cumbre de la creación literaria valleinclanesca, a la que pertenece Tirano Banderas, situada en una imaginaria república hispanoamericana gobernada por un tirano esperpéntico y la trilogía El ruedo ibérico, sarcástica visión de las postrimerías del reinado de Isabel II.Las vanguardias:dedica una especial atención al lenguaje, que se carga de metáforas, de juegos verbales y de intelectualismo.Es el caso de las obras de Gabriel Miró, Ramón Pérez de Ayala y Ramón Gómez de la Serna, creador de las greguerías, ingeniosas asociaciones semánticas, unas veces líricas, otras filosóficas, otras humorísticas.La novela de los años cuarenta: la guerra supuso una ruptura, que se manifestó con el exilio para muchos novelistas. Entre los que se quedaron predominan novelas de estilo tradicional, como Mariona Rebull, de Ignacio Agustí, historia sobre las vicisitudes de una familia de la alta burguesía catalana de las primeras décadas del siglo XX o El bosque animado, visión melancólica y escéptica de la vida en torno a una fraga gallega, de Wenceslao Fernández Flórez. Lo característico de esta época es la novela existencial:visiones pesimistas de unos personajes desorientados en un mundo que resulta amenazador o incomprensible.
Es lo que ocurre con Nada de Carmen Laforet, en la que, con un lenguaje sencillo,su joven protagonista, cuenta su llegada a Barcelona para estudiar y su desorientación ante la sordidez del ambiente familiar lleno de secretos antiguos y de frustraciones. O en La sombra del ciprés es alargada,de Miguel Delibes, en la que se plantea el conflicto entre las ilusiones de la infancia y la realidad amarga, en la que está siempre presente la muerte, junto con una crítica a los convencionalismos de la sociedad burguesa y un acercamiento a los humildes.De los años cuarenta son también las primeras obras de Camilo José Cela. En La familia de Pascual Duarte el protagonista narra su propia biografía: un cúmulo de crímenes y atrocidades condicionadas por un ambiente bárbaro e injusto de pobreza y privaciones, lo que convierte al protagonista en asesino y víctima.Miguel de Unamuno: Sus obras son la expresión de la lucha entre su ansia de eternidad, que puede dar un sentido a la vida.Aunque el medio natural de expresión de estas preocupaciones es el ensayo Unamuno las trasladó a la novela y a sus dramas.Los sucesos que narra son reflejo de sus inquietudes religiosas o existenciales. Al primer grupo pertenece San Manuel Bueno, mártir, novela breve cuyo protagonista es un cura de aldea que ha perdido la fe, pero que actúa como si la tuviera para evitar a sus feligreses la angustia de vivir sin esperanza. Y al segundo, Niebla, en la que Augusto Pérez enfrenta con el propio autor, que había previsto su muerte.Las novelas de Unamuno se construyen en torno al protagonista, que representa la idea que el autor quiere someter a debate a lo largo del relato.Así se presta mayor atención a los diálogos que a la ambientación y al marco temporal, presentados siempre de forma esquemática, cuando no simbólica. Lo importante es el conflicto íntimo, la interioridad de los personajes.Se reducen las descripciones, centrándose la acción en debates o monólogos de gran densidad,expresados con un lenguaje seco,directo y preciso en el que se trata de recuperar el sentido primitivo de las palabras, o la revitalización de palabras casi olvidadas.Busca la intensidad, la expresividad.Exige la participación del lector con prólogos, postprólogos, epílogos en los que se proponen interpretaciones contradictorias de las obras o se polemiza sobre distintos aspectos con lo que se hace evidente su gusto por la paradoja y la contradicción para buscar la verdad.De acuerdo con su carácter polemista y provocador, Unamuno inventó para sus relatos, a partir de Amor y pedagogía, el nombre de nivolas.
Pío Baroja:pesimista irascible que muestra su desconfianza ante el hombre y su futuro y ante la acción política, que le llevó a simpatizar con ideas anarquistas, pero que con los años se convirtió en un escepticismo absoluto y conservador.Es un individualista extremo.Para Baroja la novela debe basarse en una observación de ésta para contarla de una manera breve, directa y sencilla con la intención de entretener.Su narrativa de Baroja se caracteriza por:- Predominio de un personaje – activo y dominador o pasivo y sin voluntad- a través del que nos introducimos en los distintos ambientes. Este personaje suele ser un trasunto del autor con espíritu..- Descripciones impresionistas a base de pequeñas pinceladas o de unos pocos detalles físicos y psicológicos para describir a los personajes. Ydiálogos abundantes.- Presencia del autor en comentarios que expresan sus personales ideas filosóficas, literarias o políticas.- Búsqueda de la amenidad y un estilo natural y espontáneo lo que le da cierto desaliño expresivo. Su sencillez sintáctica, frases cortas y párrafos breves, lo emparenta con Azorín, y el antirretoricismo del 98.Su obra novelística es muy extensa. Los títulos principales pertenecen a su primera época.Camino de perfección, La busca, El árbol de la ciencia, Zalacaín el aventurero, Las inquietudes de Shanti Andía … Con cierta frecuencia, estos títulos se agrupan en trilogías, según el tema.
Una segunda época va desde 1914 hasta el comienzo de la guerra civil española. De esta época son las Memorias de un hombre de acción, veintidós novelas sobre el fondo de las Guerras Carlistas y la historia española en el siglo XIX, basadas en la vida de un antepasado suyo, Eugenio de Aviraneta.La tercera etapa, desde el fin de la guerra civil hasta su muerte, es ya de menor importancia.A ella pertenecen sus memorias personales con el título de Desde la última vuelta del camino.COMENTARIO:San Manuel Bueno, mártir(unamuno) es un diálogo pero no tiene que ver con el realismo, encontramos características del ensayo, como la técnica de pregunta-respuesta.el diálogo es denso, funciona como reflexión del autor.Hay desnudez narrativa,no existe una historia,son novelas intelectuales. Los personajes no tiene por que ser reales, por lo que no habitan en un lugar concreto. No se describe el ambiente ni la sociedad de la epoca.los personajes representan ideas, carecen de identidad individual.Importancia del dialogo. Respecto al tema, aparece los problemas de inmortalidad y fe. Unamuno sufrió una crisis personal a partir de la cual deja atrás el problema social y se centra en lo religioso y existencial. La alternativa ante una verdad trágica,difícil y una frialdad falsa es el gran problema que se plantea en el fragmento. El personaje pierde la fe y no puede decir la verdad,pues no lo soportarían. Los nombres que aparecen en dicho fragmento son simbólicos.

TEMA 6:El término generación del 27 se usa para denominar a un grupo de poetas que empezó a escribir en los años veinte, coincidiendo con el auge de las vanguardias.Se refiere al año en que casi todos ellos participaron en Sevilla en el homenaje a Góngora por el tercer aniversario de su muerte. Sus componentes más conocidos son Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Federico García Lorca, Dámaso Alonso, Vicente Aleixandre, Luis Cernuda y Rafael Alberti. Algunos incluyen a Miguel Hernández.Todos ellos mostraron inquietudes y gustos comunes, lo que permite considerarlos como generación poética:-Todos son de edades similares. Tienen una gran cultura literaria y curiosidad intelectual, y su origen familiar acomodado les permite su dedicación a la poesía. – Mantuvieron actitudes liberales en política y, salvo Gerardo Diego, durante la Guerra Civil apoyaron a la República.- En Madrid, ciudad en la que todos residieron o pasaron largas temporadas, tuvieron ocasión de conocerse y trabar amistad.Representaba una educación liberal frente a la tradicional enseñanza religiosa.- Participaron en acontecimientos culturales, como la celebración del tercer centenario de la muerte de Góngora, O colaboraron en las mismas revistas, tales como La revista de Occidente. – Crearon un lenguaje generacional, a pesar de las variantes personales. Así, todos conceden importancia fundamental al estilo, cultivan la metáfora y consideran la poesía como manifestación autosuficiente e intrascendente,- Síntesis de tradición y vanguardia.Característica esencial del grupo del 27 es saber compaginar influencias en principio opuestas.Valoran tanto la literatura popular del Cancionero y el Romancero, como la del culto Góngora, el maestro en el arte de la metáfora, o la de y Juan Ramón Jiménez, cuya “poesía pura” o “desnuda” se convierte en modelo. En la métrica, junto con estructuras métricas tradicionales incorporan el verso libre y el versículo, cuyo precedente había sido, una vez más, J. Ramón Jiménez. De las vanguardias se toma lo novedoso, lo original, el juego de ingenio, la total libertad creadora tanto en la métrica, como en la puntuación, los temas insólitos y el uso de imágenes ilógicas. Trayectoria:tres períodos:- Etapa inicial, hasta 1927. Tras las primeras obras en las que encontramos influencia de Bécquer y de los modernistas, se impone el ideal de «poesía pura» de Juan Ramón Jiménez y la influencia vanguardista. Poesía «deshumanizada» en el sentido de ser producto de la inteligencia y la depuración del lenguaje, sin anécdota sentimental. Esta poesía vanguardista coexiste con una poesía neopopular en Lorca ,Alberti o Gerardo Diego.
– De 1928 a la Guerra Civil. Con la influencia surrealista comienza la rehumanización de la lírica. El surrealismo marcó toda la poesía de Aleixandre, algunos libros de Lorca y de Alberti y gran parte de la lírica de Cernuda. Según iban acercándose los años de la guerra, surgieron en la poesía los temas sociales y políticos. En la revista “Caballo verde para la poesía”, fundada por Pablo Neruda aparece un «manifiesto por una poesía sin pureza» que exprese la angustia del ser humano, la rebeldía del poeta y los problemas de su entorno. Este tipo de poesía alcanzó su auge en los años de la Segunda República y durante la Guerra Civil. Sus representantes más destacados fueron Rafael Alberti y Miguel Hernández. – Etapa final, a partir de la Guerra Civil. Con el asesinato de Lorca y el exilio de la mayoría de sus componentes la generación se dispersa. Los desterrados tratan en numerosas ocasiones el tema del exilio, la nostalgia de la patria y la protesta por la situación política.En España quedaron Dámaso Alonso y Aleixandre, que se convertirán en referencia de la poesía de la posguerra, y Gerardo Diego, que evolucionó hacia una literatura religiosa y clasicista. A partir de 1951 se van produciendo las muertes de sus componentes,con lo que la Generación del 27 termina definitivamente.Federico García Lorca:En su personalidad se oponen: su vitalismo creativo y su simpatía natural; por otra, un hondo malestar, una insatisfacción profunda, una constante obsesión por la muerte, una “pena negra” como dice uno de sus romances.Durante sus primeros años escribió sobre su Andalucía natal.Es la época del Poema del cante jondo y del Romancero gitano,cuyos personajes están marcados por un destino trágico; su estilo resulta de una fusión entre lo popular y lo culto. Poeta en Nueva York, visión desgarrada de la gran urbe como símbolo de la sociedad moderna egoísta, deshumanizada e injusta. Y con ella, la defensa de los marginados. Si en su primera época habían sido los gitanos, en ésta lo son los negros .La técnica es surrealista .Entre sus poemas posteriores destaca el Llanto por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías, elegía en la que imágenes surrealistas se combinan, por ejemplo, con ecos de las coplas de Jorge Manrique. Además se volcó en el teatro como autor, actor, director y crítico con el grupo La Barroca.Su obra teatral se divide en tres etapas.La primera corresponde a las piezas de guiñol (Títeres de cachiporra) y las farsas (La zapatera prodigiosa). En ellas late la frustración a propósito de los matrimonios por conveniencia y, por tanto, infelices a causa de la diferencia de edad, la falta de libertad en la elección y, en definitiva, la falta de amor.
La segunda etapa coincide con el influjo del Surrealismo y con su estancia en Nueva York. Escribió entonces las que él mismo consideró“comedias imposibles” por la novedad de sus planteamientos. El tema sigue siendo la frustración íntima. Los sueños se revelan como la clave para entender una realidad que no siempre es posible racionalizar, pero que actúa sobre nosotros como fuerzas vitales primarias y poderosas.Destacan El público y Así que pasen cinco años.La tercera y definitiva etapa es la de sus grandes dramas rurales: Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba.En todos ellos, la mujer, símbolo de la marginación, es la protagonista. En sus obras dramáticas se repite un mismo tema: el enfrentamiento del individuo con su contexto, que tiene como consecuencia la tragedia. Lleva a escena pues el destino trágico.El lenguaje es siempre muy estilizado, cargado de metáforas y comparaciones.Combina lo realista y lo simbólico y comienza combinando el verso y la prosa, pero termina, en La casa de Bernarda Alba, utilizando sólo la prosa.COMENTARIO:Canción del Jinete(Lorca)poema representativo de la 1ºetapa de la generacion del 27,marcada por la linea de la poesia pura y siguiendo como modelo a JRJ.No es totalmente purista pero tiene rasgos caracteristicos de la poesia pura, como la anécdota.todos los escasos elementos se convierten en símbolos.Desde el punto de vista de la expresión ocurre algo igual,pues se mezcla la poesia tradicional con la innovadora y aparece un gusto por la poesía española y la extranjera. De acuerdo con la metrica, los versos son de arte mayor, lo que da lugar a pensar en una rima popular.La forma del poeta indica que el autor ha querido transmitir una poesia sencilla que en realidad es compleja.Otra caracteristica del poema es que se trata de un poema cerrado, ya que termina igual que empieza.Ademas aparecen muchos adjetivos empleados con un valor muy importante, el del símbolo, lo que da la apariencia de ser como lo romances antiguos al parecer que no se avanza.

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