La literatura se convierte en un instrumento para denunciar la realidad

El conflicto bélico civil que vive España entre 1936 y 1939 condiciona completamente la actividad cultural subsiguiente. La literatura se convierte en una vía de escape para unos, o en un instrumento de denuncia para otros. Durante los años cuarenta, abren nuestra literatura a una actitud de compromiso con la realidad, de Realismo. Los autores que les siguen repiten los mismos modelos narrativos, basados en el reflejo fiel de la sociedad española de los años cuarenta y cincuenta. La censura y la imposibilidad de publicar novelas extranjeras en nuestro país condicionan mucho el panorama literario,
Camilo José Cela comienza su producción con La familia de Pascual Duarte. Sus novelas no son propiamente de denuncia social, sino más bien documentales, es decir, el autor se limita a presentar situaciones más o menos duras, aunque el autor se mantiene al margen de la narración,

Miguel Delibes (1920)


A partir de la publicación de La sombra del ciprés es alargada (1948), ha continuado una trayectoria literaria bastante coherente y uniforme. El camino (1950) es la primera de sus novelas rurales. Y Las ratas (1962). En esta última novela
Delibes se muestra bastante más crítico que en las anteriores, Esta tendencia crítica y social de Delibes culmina en 1981 con la publicación de una de sus mejores novelas: Los santos inocentes. Trata sobre la difícil existencia de una familia que malvive durante la posguerra en un cortijo extremeño

La novela social de los años cincuenta

habían abierto una veta que daría mucho de sí. Siguiendo el modelo de todos estos precedentes, durante los años cincuenta surgen bastantes autores que comienzan a publicar novelas con una clara finalidad crítica y con voluntad social. Utilizan la técnica objetivista, se distinguen dos grupos:
Realismo objetivista y Realismo social.

Realismo objetivista

Los autores pertenecientes a esta tendencia reflejan la realidad cotidiana tal y como la perciben. Escriben sobre la pobreza, la miseria, la injusticia social o la soledad, exenta de partidismos políticos

Rafael Sánchez Ferlosio (1927)


Publica la obra más importante de esta tendencia caracterizada por la presentación objetiva de los hechos: El Jarama la historia de un grupo de jóvenes que van a pasar el día al río Jarama, Realismo social
El compromiso social de los autores que forman este grupo es bastante más profundo que ya que conciben la literatura como un instrumento de denuncia. Escriben del lado de los obreros y de los habitantes de los suburbios y critican a la clase burguesa, Estos autores, , están comprometidos políticamente y dejan a un lado la imaginación para centrarse en el objetivismo:

Juan Goytisolo (1931)


Escribe sus primeras novelas dentro del Realismo social realistaLa acción de estas novelas se desarrolla en los días de la Guerra Civil. Goytisolo emplea la técnica objetivista. Las siguientes novelas de este autor acusan un mayor compromiso político: La isla Poco a poco se va cansando de la novela social, evoluciona hacia el experimentalismo

La novela de los años sesenta: entre la preocupación social y el experimentalismo

Durante la década de los sesenta no se pierde la novela comprometida socialmente, se detecta un cierto agotamiento de esta tendencia y una clara evolución hacia la experimentación, los escritores españoles se dejan influir por los autores europeos de manera que las novelas pasan a ser más complejas y experimentalesLuis Martín Santos (1924-1964)


Marca un antes y un después en la novela española con la publicación en 1962 de Tiempo de silencio. Supone el final de la novela social y el inicio de la renovación intelectual de esta décadaToda la novela es un largo monólogo interior con influencia de Kafka o Joyce. El lenguaje es bastante culto y elaborado, lo cual dificulta la comprensión de la narración. Aparecen todas las clases sociales del Madrid de los años cuarenta.

Gonzalo Torrente Ballester (1910-1999)


Triunfa en 1972 con La saga/fuga de J. B. Anteriormente había publicado la trilogía Los gozos y las sombras, formada por El señor llega (1957), Donde da la vuelta el aire (1960) y La Pascua triste (1962), adaptada posteriormente a la televisión en una serie televisiva de gran éxito. Mientras que la trilogía Los gozos y las sombras es de tipo realista tradicional, La saga/fuga de J. B. pertenece a la experimentación más avanzada de cuantas novelas se habían publicado hasta ese momento: es irónica y mítica, mezcla de realidad y fantasía, situada en un pueblo gallego imaginario del cual el autor nos va dando datos a través de leyendas y anécdotas aparentemente desordenadas.

La novela desde los años setenta hasta hoy

A partir del advenimiento de la democracia en 1975 se abre el panorama de la novela en España de tal manera que es prácticamente imposible destacar algunas carácterísticas o tendencias generales por encima de otras. Cada autor emprende un camino personal con la pretensión de diferenciarse al máximo de sus contemporáneos. De todos modos, vamos a intentar destacar los rasgos más significativos de este periodo:
Imagenhay autores que siguen cultivando la novela experimental e intelectual ImagenLa mayoría de los autores de este periodo se muestran contrarios al régimen de Franco ImagenCon la llegada de la democracia, la novela se hace más fácil y accesible ImagenUna gran parte de los autores vuelven a la narración tradicional, al estilo de los autores realistas del XIX o de los escritores de la Generación del 98.ImagenComienzan a surgir nuevos subgéneros dentro de la novela con la finalidad de ampliar el panorama literario. Imagense comienza a publicar con la finalidad de vender una gran cantidad de obras.

Manuel Vázquez Montalbán (1939-2004)

Es uno de los autores más importantes de los últimos treinta años.. Es el creador del detective Pepe Carvalho, protagonista de Yo maté a Kennedy (

Eduardo Mendoza (1943)


Es uno de los principales novelistas de los últimos años. Comienza con La verdad sobre el caso Savolta,. Narra los abusos que los dueños de una fábrica de armas ejercen sobre sus empleados. Esta novela tiene una clara finalidad de denuncia social y de crítica hacia la burguésía acomodada de principios del Siglo XX.

Arturo Pérez Reverté (1951)


Ha ejercido como corresponsal de guerra de Televisión Española durante la mayor parte de su vida. Deja esta profesión para dedicarse exclusivamente a la literatura. Desde sus primeras novelas, cosecha un gran éxito, Publica novelas basadas principalmente en hechos históricos, El capitán Alatriste (1996), Colabora como articulista de opinión con diversas publicacionesJulio Llamazares (1955)


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