La Generación del 98: Movimiento Literario, Temas y Figuras Esenciales

La Generación del 98: Contexto y Renovación Literaria

El Modernismo y la Generación del 98 comparten el intento de renovar la literatura en todos los géneros. A principios del siglo XX, surge una reacción contra el realismo y el naturalismo. La Generación del 98 lidera esta renovación intelectual, ideológica y artística en España.

Crisis y Evolución Ideológica de la Generación del 98

Este movimiento surge en un contexto de profunda crisis y evolución ideológica, marcado por:

  • La crisis política, económica y moral de España. La conciencia de que el país ha tocado fondo provoca la necesidad de regenerar la cultura, la sociedad y la política.
  • El agotamiento de las formas narrativas del movimiento realista y naturalista. Los escritores del 98 tienen una firme voluntad de innovación.
  • El influjo de pensadores extranjeros. En autores extranjeros se percibe la protesta contra la mentalidad positivista y el realismo burgués.

Por ello, los escritores del 98 protestan contra las costumbres decadentes de la sociedad española y proponen una reforma total de las conductas sociales y morales de los españoles. Muchos autores se aproximan a un idealismo de carácter neorromántico. El idealismo, el tono crítico y una actitud individualista provocan una defensa del subjetivismo. Más tarde, se produjo un proceso de interiorización e intimismo que llevó a la búsqueda de la esencia de España y a la reflexión sobre el ser humano y su destino.

Temas Principales de la Generación del 98

Los dos grandes ejes temáticos son España y el tema existencial. Todos buscan una imagen de España diferente a la reflejada en los tópicos. Esta búsqueda se centra en el descubrimiento del alma de España, abordando:

  • El paisaje: Castilla es la región preferida. Descubren el espíritu austero y sobrio castellano, ofreciendo una visión subjetiva e idealista.
  • La historia: No les interesa la historia de acontecimientos políticos o bélicos, sino la de los pequeños hechos cotidianos. Unamuno la llamó intrahistoria.
  • La literatura: Buscan las características esenciales del ser español en autores medievales y clásicos olvidados.
  • El tema existencial: Abarca asuntos diversos como la preocupación por el sentido de la vida, el papel de la religión en la sociedad y en la vida individual, las dudas sobre la existencia del más allá y los conflictos psicológicos y morales del ser humano.

Técnica Narrativa de la Generación del 98

La innovación se extiende también a la forma, con características como:

  • El alejamiento de las técnicas del realismo para reflejar la realidad de modo objetivo y el interés por expresar las emociones.
  • El rechazo de la expresión retórica y grandilocuente. Predomina un estilo sencillo y claro.
  • La elección de las palabras justas. El léxico se impregna de valoraciones subjetivas.
  • La preferencia por la oración breve, el párrafo corto y la expresión natural.

La Novela Realista (Contexto y Contraste)

Para entender la innovación del 98, es útil recordar las características de la novela realista:

  • Tema esencial: La realidad externa.
  • Propósito: Análisis de la realidad para justificar una tesis.
  • Foco: La sociedad, la colectividad y no el individuo.
  • Narrador: Omnisciente, objetivo e imparcial.
  • Estilo: Excesivamente detallista y minucioso.
  • Descripción: Detallada y objetiva.
  • Léxico: Denotativo y desapasionado.
  • Estructura: Relatos amplios y densos.

Características de la Novela de la Generación del 98

En contraste, la novela del 98 presenta:

  • Tema principal: La visión de la realidad del autor. Se refleja lo cotidiano.
  • Foco: Se centra en un personaje que realiza toda la acción.
  • Narrador: Autor omnipresente (a menudo con intervención directa).
  • Estilo: Sobrio, sin apenas recursos retóricos.
  • Descripción: Subjetiva.
  • Léxico: Valorativo.
  • Estructura: Relatos cortos.

Autores Clave de la Generación del 98

Miguel de Unamuno (Bilbao, 1864-1936)

Sus novelas son una proyección de sus inquietudes personales, suprimiendo prácticamente cualquier referencia a la realidad exterior de los personajes. Existe una permanente ambigüedad entre literatura y filosofía, entre ficción y autobiografía. Unamuno no es sistemático; no nos ofrece soluciones, solo preguntas y dudas. Hay una constante revelación de su personalidad. Todos sus escritos giran en torno a sus preocupaciones íntimas y reflejan la angustia de su espíritu.

Sus dos grandes preocupaciones son los enigmas del hombre en relación con la existencia y los problemas de España. Solo recoge los temas que le preocupan y elimina todo lo que no es esencial en el relato. Es una novela densa, filosófica y esquemática, profundamente apasionada, a la que él mismo denominó nivola.

Obras destacadas de Unamuno:

  • Paz en la guerra
  • Amor y pedagogía
  • Niebla

También destacó como ensayista.

Pío Baroja (San Sebastián, 1872-1956)

Gran novelista de la Generación del 98. Comenzó publicando cuentos y artículos sueltos. Su actitud es pesimista sobre el hombre y el mundo: el mundo carece de sentido, la vida resulta absurda y no alberga ninguna confianza en el ser humano. Se interesó por la vida de los humildes y marginales, y admiraba a los caracteres vivos y enérgicos.

Para Baroja, la novela es el género que puede incluir todos los demás. Sus novelas incluyen reflexiones, descripciones, anécdotas y numerosos personajes. Para él, la vida es superior a la literatura.

Los personajes barojianos suelen ser asociales o rebeldes; aparecen los hombres de acción o los personajes desorientados y abúlicos (ambos acaban fracasando). Los ambientes son a menudo suburbiales.

El estilo barojiano es el antiestilo. Recoge la lengua viva y pone su escritura al servicio del contenido. Utiliza un lenguaje antirretórico, descuidado, con frase y párrafo breves, y un tono ágil y espontáneo. Su narración es rápida, con descripciones expresivas y un diálogo verosímil y vivo.

Trilogías destacadas de Baroja:

  • La lucha por la vida
  • Tierra vasca
  • La raza

Antonio Machado (Sevilla, 1875-Collioure, 1939)

(El texto original se interrumpe aquí, pero se mantiene sin cortes ni eliminaciones).

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