Introducción: La Perspectiva Autobiográfica de Amélie Nothomb
En la siguiente reflexión se analizarán las cuestiones contextuales de la obra literaria Estupor y temblores, escrita por Amélie Nothomb en 1999. Nothomb nació en Japón; su familia proviene de Bélgica, por ello decimos que es una escritora belga. Debido a la profesión de su padre, diplomático belga, vivió en China y Estados Unidos, entre otros países. A los 17 años descubre Europa y, más precisamente, Bruselas. Allí estudió filología románica. Por ello, Estupor y temblores es, de alguna manera, una obra autobiográfica, ya que, tras licenciarse, regresa a Tokio y comienza a trabajar en una gran empresa japonesa. En su obra, Nothomb narra la historia de una joven belga de 22 años que empieza a trabajar en Tokio en una de las mayores compañías mundiales, Yumimoto. Así, podemos concluir que es una obra con valor testimonial, donde se expresan relatos de sus propias experiencias y se narra la realidad de Japón, pero vista desde una perspectiva externa.
Contextos Clave en Estupor y temblores
Los contextos que se establecerán y analizarán de la obra son los siguientes:
- El comportamiento jerárquico en Japón.
- El rol de la mujer en la sociedad japonesa.
- La imposición social.
Comportamiento Jerárquico en la Sociedad Japonesa
Investigaciones indican que la sociedad japonesa, tanto actual como anterior, presenta un marcado comportamiento jerárquico, basado en clase, sexo y edad. Según J. González Vallés, el modelo de jerarquización se inició con el shogunato de Tokugawa a principios del siglo XVII. En este, se intentó crear un modelo de “mujer perfecta” basado en las normas morales del confucianismo. Esto implica una fidelidad escalonada o, en otras palabras, jerarquizada: la fidelidad de la mujer al marido, del marido al señor feudal y del señor feudal al shōgun. Asimismo, se observa que los japoneses aprenden los principios de jerarquía principalmente dentro de sus familias, para luego aplicarlos en la sociedad, la economía y la política, es decir, en su vida diaria. Además, no suele haber cuestionamiento por parte de los japoneses en su cultura hacia el superior, y es aquí donde se refleja la jerarquía. Cabe destacar que la sociedad japonesa, como ya se mencionó, favorece todo tipo de estructuras jerárquicas, no solo entre mujer y marido, sino también la prioridad por edad o generación en cualquier trato (términos como sensei o senpai hacen referencia a haber nacido antes). También existe una jerarquía entre el superior en cualquier empresa u otro tipo de grupo y los subordinados o empleados. Esta jerarquía, en ciertos momentos, refleja la desigualdad existente; por ejemplo, el padre de familia es el superior, a quien se le sirve primero. Otro ejemplo claro donde se refleja dicha jerarquización es que, si una pareja sale a caminar, la esposa va por detrás, lo que también demuestra la situación de desigualdad de género.
El Rol de la Mujer en la Sociedad Japonesa
Se percibe que Japón no está utilizando adecuadamente el potencial de la mujer, lo cual se refleja en la obra con Amélie, quien estudió para ser traductora y, sin embargo, terminó trabajando en el sector de limpieza de la empresa. La sociedad japonesa justifica la subutilización del potencial femenino argumentando que el trabajo requiere tiempo y que la mujer debe estar en casa criando a los hijos. Como se mencionó previamente, en Japón existió el llamado modelo de “mujer perfecta”, basado en las normas del confucianismo. Las pautas de dicha educación se establecieron bajo el código de conducta conocido como Onna Daigaku (女大学). Este fue un texto publicado en 1716, dirigido a las esposas, que dominó y marcó la vida de las mujeres hasta la Restauración Meiji en 1868. Se puede afirmar que muchas de las cargas que pesan sobre las japonesas hoy son consecuencia de dicho libro. Este establece tres obediencias fundamentales para las mujeres: obediencia ciega a su padre si es soltera, a su marido si está casada, o a su hijo varón si es viuda. Entonces, se puede concluir que si la sociedad no avanza, el rol de la mujer tampoco lo hace.
La Imposición Social en Japón
Por último, la tercera cuestión contextual que se analizará es la imposición social en Japón, reflejada en la obra. Primero, es importante definir la imposición social como una forma de vivir, pensar, hablar y actuar que es dictada o esperada por la sociedad. Dicha imposición social se ve claramente reflejada a lo largo de la obra a través de las descripciones del ideal de belleza para las japonesas, con frases como:
- “Si disfrutas comiendo, eres una cerda”.
- “Si sonríes, perderás tu distinción”.
- “Si dormir te produce placer, eres una vaca”.
A través de estos ejemplos, podemos observar cómo la sociedad japonesa impone dichas formas de actuar y vivir según las conductas esperadas.
Conclusión: Reflejos de la Cultura Japonesa en la Narrativa de Nothomb
Para concluir, Amélie Nothomb expone en su obra ciertos comportamientos establecidos en la cultura japonesa, logrando así presentar las cuestiones contextuales inherentes a Estupor y temblores.