La Prosa Idealista del Siglo de Oro: Géneros y Características

La invención de la imprenta influyó decisivamente en el éxito de la narrativa en prosa en el siglo XVI, de marcado carácter idealista, como la mayoría de las manifestaciones artísticas del Renacimiento. Esta prosa presenta protagonistas de carácter noble y sentimientos elevados, que corren aventuras maravillosas y a veces inverosímiles, ambientadas en un tiempo remoto o legendario y en lugares ficticios o idealizados. Con todo ello se buscaba el docere delectando (enseñar deleitando) de los clásicos, de quienes rescatan muchos de sus géneros narrativos. Dentro de la prosa idealista podemos distinguir los siguientes géneros:

Novela de Caballerías

• Se narran hazañas de héroes medievales.
• Se caracterizan por la fantasía e, incluso, la presencia de elementos mágicos.
• Tuvieron gran éxito por el deseo de aventuras y el espíritu de conquista de la época.
• Fueron rechazadas por los humanistas, que criticaban el exceso de fantasía y la inverosimilitud de algunos episodios, y por los moralistas, que rechazaban las intensas pasiones de los caballeros por sus damas.

Ejemplo clave:

Amadís de Gaula (1508), de Garci Rodríguez de Montalvo.

Novela Pastoril

Relatos en los que se desarrollan las desventuras amorosas de unos pastores refinados en medio de una naturaleza idílica (locus amoenus).

Características principales:

• Cobra importancia el mundo interior del personaje y sus procesos anímicos.
• Tienen una clara influencia del neoplatonismo (exaltación de la belleza terrena e idealización del sentimiento amoroso) y de las églogas poéticas.

Obras destacadas:

• La Diana (1559), de Jorge de Montemayor.
• La Diana enamorada (1564), de Gil Polo.
• La Galatea (1585), de Miguel de Cervantes.
• La Arcadia (1599), de Lope de Vega.

Novela Bizantina

La historia se desarrolla a través de las peripecias descritas de un viaje.

Rasgos esenciales:

• Aparición de un conflicto amoroso que muestra la fidelidad de los personajes.
• Repetición del mismo esquema argumental: encuentro-separación-reencuentro de los protagonistas.
• Algunos de los principales rasgos del héroe son la astucia y la moralidad.

Obras destacadas:

• Los trabajos de Persiles y Sigismunda (1617), de Miguel de Cervantes.
• El peregrino en su patria (1604), de Lope de Vega (gestadas entre finales del siglo XVI y principios del XVII).

Novela Morisca

Relatos breves, frecuentemente intercalados en otras narraciones, en los que se desarrollan historias idealizadas entre cristianos y musulmanes en la Edad Media.

Características:

• Siempre presentan un final feliz.
• El morisco, aunque fuera políticamente el enemigo, se presenta con todos los valores del protagonista.

Obras destacadas:

• Historia del Abencerraje y la hermosa Jarifa (1561), anónima.
• Historia de Ozmín y Daraja, inserta en el Guzmán de Alfarache (1599), de Mateo Alemán.

La Novela Realista: El Género Picaresco

Las características de la picaresca son las siguientes:

• Autobiografía ficticia: Debido a su origen humilde, el pícaro no tiene quien narre su vida; por ello, el protagonista se erige en narrador de su propia historia.
• La figura del antihéroe: El pícaro procede de los bajos fondos, no es un caballero ni un pastor idealizado. No se mueve por el amor, la fama o la justicia, ni tiene grandes ideales. Es hijo de padres sin honra y su móvil es únicamente la supervivencia.
• Visión unilateral: Los hechos se cuentan siempre desde el mismo punto de vista: el del narrador protagonista, que ofrece su propia visión de la realidad. El lector ve los hechos con los ojos del narrador.
• Acción retrospectiva: El pícaro relata su vida desde el final de su trayectoria, cuando ya es adulto. Esto permite escuchar la voz del pícaro-niño y la del pícaro-adulto.
• Situación final de deshonor: El pícaro cuenta su vida con el fin de justificar el estado al que ha llegado. A pesar de sus esfuerzos, no logra escapar de su estado miserable.
• Relato itinerante y carácter episódico: La novela está construida por episodios independientes que transcurren en lugares diferentes y al servicio de distintos amos.
• Narración lineal: Comienza en la infancia del pícaro y se extiende hasta su etapa de madurez.
• Evolución psicológica: El protagonista no se mantiene estático a lo largo de la novela. Se observa cómo crece, cómo fragua su carácter y cómo evoluciona para sobrevivir: empieza siendo un niño indefenso, pasa por la pérdida de la inocencia y el aprendizaje hasta llegar a la astucia y la picardía.
• Sátira social: Su condición de criado, al servicio siempre de algún amo, permite al pícaro entrar en contacto con personajes de distinto estamento (Iglesia, justicia, medicina, etc.) que reflejan el degradado ambiente social y moral de la época.