Características de la Novela Realista
- Interés por la realidad y lo cotidiano. Se centra en personajes actuales y ambientes cotidianos. El espacio es realista, verosímil, descrito con gran lujo de detalles. Predominan los espacios urbanos (donde habita la burguesía y el proletariado), aunque también aparecen espacios rurales como ejemplos de la oposición al progreso y la resistencia a las tradiciones que impiden el avance.
- Temas propios de su tiempo. Plantea conflictos sociales y políticos, problemas laborales, diferencias entre las formas de vida de las distintas clases sociales, las condiciones de vida de la clase obrera, el caciquismo, el mundo interior del individuo y sus procesos psicológicos, la falta de integración social, la enfermedad, la locura, los deseos y pasiones insatisfechos, entre otros.
- Verosimilitud. Se construye un mundo literario que es una fiel representación de la realidad. Los personajes y sus ambientes resultan creíbles.
- Presencia crítica del autor. El autor expresa sus opiniones a través del narrador, quien interviene activamente juzgando hechos y personajes.
- Empleo del narrador omnisciente. La caracterización suele ser tanto física como moral, lograda a través de los actos de los protagonistas, los diálogos y los monólogos. Mediante el narrador omnisciente se pueden analizar los pensamientos y las emociones de los personajes. De este modo, su análisis psicológico es más profundo y se consiguen construir personajes redondos y más complejos.
- Lenguaje objetivo, preciso y claro, alejado del estilo retórico del Romanticismo, con una cuidadosa recreación del habla de los personajes. El diálogo cobra una gran importancia: retrata el habla de los personajes con arreglo a su clase social de manera fiel a la realidad (utiliza un lenguaje coloquial en boca de los personajes, adecuando la dicción a sus características; pero, en general, se mantiene un registro culto, sobre todo en las descripciones y en la caracterización de los ambientes).
Benito Pérez Galdós
Galdós es el autor más importante del Realismo. Su obra se clasifica en cuatro grupos:
- “Episodios nacionales”. Conjunto de 46 novelas en las que se reconstruye la historia de la España del siglo XIX, desde la batalla de Trafalgar (1805) hasta el inicio de la Restauración (1875).
- Primeras novelas. Se plantea el conflicto entre las ideas progresistas y las ideas conservadoras, que impedían la modernización del país. Ejemplos: “La Fontana de Oro” (1870), “Doña Perfecta” (1876).
- Novelas españolas contemporáneas. Es el grupo más importante; en él sobresale “Fortunata y Jacinta” (1887), considerada su obra maestra. Recrean con detalle la sociedad de la época y sus personajes son mucho más complejos psicológicamente que los protagonistas de las “primeras novelas”. Otras obras de este período son “Tormento” (1884) o “Miau” (1888).
- Novelas idealistas. Compuestas a partir de 1889, tratan temas de naturaleza moral y espiritual y aparecen personajes que se colocan por encima de los convencionalismos sociales, impulsados por un espíritu generoso. Ejemplos: “Nazarín” (1895), “Misericordia” (1897).
Leopoldo Alas, «Clarín»
- Leopoldo Alas, «Clarín», es el autor de (publicada en dos tomos, 1884-85), una de las obras maestras del siglo XIX, en la que el autor emplea procedimientos narrativos innovadores.
- constituye a la vez un retrato psicológico de su protagonista, Ana Ozores, y una crítica social de la vida en una ciudad de provincias. Ambientada en Vetusta (nombre falso de Oviedo), narra el proceso de degeneración moral de su protagonista, Ana Ozores, casada con un hombre mayor que ella, pretendida por un seductor, don Álvaro Mesía, y objeto del amor de su confesor, don Fermín de Pas.
- El texto presenta numerosos elementos naturalistas, como la presión determinista del entorno o la importancia del físico de los personajes para explicar su conducta.
- En cuanto al estilo, Clarín emplea brillantemente técnicas narrativas como el monólogo interior, mediante el cual se reproducen los pensamientos de los personajes en primera persona; y el estilo indirecto libre, que permite insertar en tercera persona las palabras o los pensamientos del personaje sin un verbo de habla explícito.
Emilia Pardo Bazán
- Emilia Pardo Bazán fue la más destacada defensora en España del Naturalismo.
- Las ideas naturalistas están presentes en sus novelas (1886) y (1887), que se desarrollan en escenarios rurales de Galicia.
Vicente Blasco Ibáñez
- “La barraca” (1898) y “Cañas y barro” (1902), ambientadas en tierras valencianas, desarrollan tramas próximas al folletín (novelas de carácter melodramático y gusto popular), marcadas por la violencia y la fatalidad.
