La cohesión es la propiedad del texto por la que cada enunciado se relaciona con los demás de forma lógica y coherente, mediante procedimientos sintácticos, morfológicos y léxico-semánticos. Es una de las tres propiedades textuales fundamentales (las otras dos son la adecuación y la coherencia). En este estudio, la analizaremos en el artículo de opinión Pan y cine, publicado por el escritor Juan José Millás en el diario El País.
Mecanismos Gramaticales de Cohesión
Dentro de los mecanismos lingüísticos que contribuyen a reforzar la cohesión y, por ende, la coherencia del texto en el nivel gramatical, destacan la deixis, por una parte, y la elipsis, por otra.
Deixis: Referencia en el Discurso
La deixis es la función representada por ciertos elementos lingüísticos que consiste, precisamente, en señalar o designar algo presente entre los hablantes (deixis extratextual) o en el propio enunciado (deixis textual).
Podemos observar que en el texto hay una deixis extratextual de tipo social, que hace referencia a los elementos de la comunicación, en este caso, a sus participantes. Por ejemplo:
- En oraciones como «¿En qué nos afectaría a usted y a mí?», el autor se hace presente a través de un pronombre en primera persona del singular («mí») y, al mismo tiempo, apela directamente a sus lectores utilizando el pronombre de segunda persona en la forma de cortesía («usted»).
- Lo más habitual a lo largo de todo el texto es el uso del pronombre de primera persona del plural, de carácter inclusivo, con el que Millás consigue acercarse a sus lectores e involucrarlos en su razonamiento: «[Nosotros] Somos tan hijos de la carne…»; «Estamos hechos de pan y de novelas».
Como es habitual, encontramos también en el texto elementos que señalan a otros presentes en el propio discurso (deixis textual). Funcionan como elementos anafóricos:
- Algunos pronombres personales de tercera persona: «Se refieren a ella» [a la huelga]; «sin que seamos conscientes de ello» [de que al escribir sus historias están contando también nuestra vida].
- Numerosos pronombres relativos: «la huelga de guionistas que comenzó el lunes pasado», «mientras unos amasan el pan que comemos por la mañana», «ese señor tan raro que se acuesta», etc.
Elipsis: La Omisión Significativa
La elipsis es otro mecanismo de cohesión muy destacado en el texto. Encontramos varios casos:
- Sujeto elíptico: «[Nosotros] Estamos hechos de pan y de novelas»; «[Ustedes] Imaginen un mundo sin cine…».
- Omisión de verbo y otros elementos: La elipsis es más llamativa en otras frases en las que se omiten también el verbo y otros elementos: «¿Y sin fábulas [se puede vivir]?», «Quizá tampoco [se pueda vivir sin fábulas]»; «Definitivamente, no [es imaginable un mundo sin ficción]», etc.
- Elisión verbal en enumeraciones: Otra elisión verbal importante es la que se produce en la tercera oración del segundo párrafo, en la que el verbo y el atributo («Somos hijos») no se vuelven a repetir a lo largo de toda la enumeración porque se sobreentienden.
Cohesión Sintáctica: La Repetición de Estructuras
En cuanto a la repetición de estructuras sintácticas, podríamos señalar que la construcción preposición «sin» + sustantivo sirve para dar cohesión al texto, pues aparece en diversas ocasiones:
- En la primera línea del primer párrafo: «sin comida», «sin fábulas».
- En la primera línea del segundo párrafo: «sin ficción».
- En las últimas líneas del texto: «sin cine, sin novelas, sin cómics, sin series de televisión, sin culebrones».
También la repetición de una interrogación retórica similar al comienzo de ambos párrafos podría considerarse un mecanismo que da unidad y continuidad al contenido del texto:
- «¿Y [se puede vivir] sin fábulas?»
- «¿Es imaginable un mundo sin ficción?»
La respuesta que ofrece el autor en ambos casos es negativa, aunque es más rotunda en la segunda ocasión: «Quizá tampoco» / «Definitivamente, no».
Cohesión Léxico-Semántica: La Red de Significados
Recurrencia Léxica y Semántica
En el nivel léxico-semántico, la cohesión se garantiza a través de la repetición, tanto léxica como semántica.
Como ejemplo de recurrencia léxica, cabe citar la repetición a lo largo del texto de ciertas palabras que se relacionan directamente con el tema del mismo (por ejemplo, «fábulas» aparece en la línea 1 y en la 23; «guionistas» en la 2, en la 8 y en la 24; «ficción», en la 12 y en la 21, etc.), así como la repetición de ciertos lexemas en palabras de la misma familia («imaginable» e «imaginen», por ejemplo).
En cuanto a la recurrencia semántica, encontramos en el texto varios casos de sinonimia:
- «historias», «fábulas» y «argumentos»
- «urdir» e «inventar»
- «esconder» y «disimular»
- «cifra» y «números»
- «comemos» y «devoramos»
También hay casos de sinonimia referencial: por ejemplo, «los guionistas» son el referente al que aluden sintagmas nominales como «esa panda de locos», «esta gente» o «ese señor tan raro». Millás utiliza esas expresiones con cierta ironía, haciendo hincapié en el hecho de que a las personas «normales» nos puede parecer que los guionistas llevan una vida muy desordenada o que están un poco locos.
Antónimos e Hipónimos: Contrastes y Jerarquías
También encontramos a lo largo del texto varios pares de antónimos:
- «se acuesta» frente a «se levanta»
- «unos» frente a «otros»
- «mañana» frente a «noche»
- «realidad» frente a «ficción» (este último, el más relevante)
Asimismo, se observan numerosos ejemplos de hiponimia: por ejemplo, el hiperónimo «ficción» se sustituye a lo largo del texto por numerosos hipónimos (novelas, cine, series de televisión, culebrones, cómics…), y, a su vez, algunos de esos términos se convierten en hiperónimos de otras expresiones (por ejemplo, «madames bovarys» podría considerarse un hipónimo de novela, mientras que «doctores houses» lo sería de serie de televisión).
Campos Semánticos y Asociativos
En cuanto a los campos semánticos que predominan en el texto, es evidente la abundancia de palabras relacionadas con la ficción:
- Sustantivos que se refieren a distintos productos de ficción (novelas, series, cine…).
- Sustantivos que aluden a los artífices de dichos productos (guionistas).
- Verbos que describen las acciones que realizan dichos artífices (urdir, escribir, inventar), etc.
También pertenecen al mismo campo semántico todos los sustantivos que hacen referencia a personajes de ficción, y que Millás escribe en plural y con minúscula, subrayando así el hecho de que los propone como ejemplos de los cientos de personajes de ficción que nos acompañan a lo largo de nuestra vida: las Caperucitas Rojas, las Anas Ozores, los Fraziers.
Un campo asociativo relevante es el que tiene que ver con la alimentación, el otro «producto esencial» para el ser humano: pan, comida, amasan, comemos, devoramos… En este último caso, podríamos considerar que, en virtud de su sentido figurado, «devoramos» pertenece a los dos campos señalados, pues su objeto directo puede ser tanto un alimento como una historia de ficción.
Asimismo, hay en el texto una serie de palabras con una connotación bastante negativa, que tienen como fin enfatizar las nefastas consecuencias que puede tener en la sociedad una huelga de guionistas: «auténtica alarma», «falta de un producto esencial», «pánico moral», «disfunciones en el cuerpo social», «desplome brusco de la ficción» o «realidad a palo seco».
Marcadores Discursivos: Conectando Ideas
Por último, son fundamentales para la cohesión los marcadores discursivos. En este texto, podríamos distinguir los marcadores de función pragmática y los marcadores textuales.
- Marcadores de función pragmática: Cabe destacar la presencia de una interjección cuya única finalidad es establecer la comunicación con los lectores dando por cierto o evidente la primera oración del texto de un modo bastante coloquial («No se puede vivir sin comida, claro») y de un adverbio modalizador que nos informa sobre la actitud del autor acerca de la pregunta que acaba de formular («Definitivamente, no»).
- Marcadores textuales: Podemos señalar:
- Las conjunciones coordinantes «y» (línea 1) y «pero» (línea 6), que funcionan como nexos supraoracionales, la primera con sentido de adición, y la segunda, de adversidad.
- La conjunción subordinante «pues» (línea 19) y la locución conjuntiva «así que» (línea 24), que expresan consecuencia.
De hecho, podría afirmarse que estos marcadores sirven, en cierta medida, para introducir distintas formulaciones de la tesis principal del texto: la importancia de la ficción en nuestra sociedad.
Conclusión: La Cohesión como Pilar de la Coherencia
Por todo ello, podemos afirmar que nos encontramos ante un texto coherente, y que a reforzar esa coherencia contribuyen variados y numerosos mecanismos lingüísticos de cohesión en todos los niveles de la lengua: en el gramatical, en el léxico-semántico y, también, en el nivel textual o pragmático.