La Generación del 98: Características, Autores y Obras Fundamentales

La Generación del 98: Características, Autores y Obras

Crisis de Fin de Siglo

En las últimas décadas del siglo XIX, los avances científicos y técnicos, y los cambios sociales y políticos que acarrearon, acabaron por provocar una crisis social. En España, la pérdida de las colonias en 1898, tras una breve guerra con los EE. UU., será el símbolo de la decadencia y el atraso del país. La radicalización de las tradicionales posturas conservadora y progresista termina por desembocar en la Guerra Civil.

Del Modernismo a la Generación del 98

La revolución estética y literaria que supuso el Modernismo procedente de América, caracterizada por su espíritu innovador e iconoclasta y su búsqueda de la belleza y el refinamiento formal en mundos alejados de la vulgaridad contemporánea, pronto adquirió en España una conciencia crítica frente a las circunstancias políticas, sociales y culturales del momento. El Regeneracionismo (criticaba el parlamentarismo burgués como base del caciquismo, la corrupción y el inmovilismo anti-modernizador) y el desastre del 98 sacuden las conciencias de los autores conocidos como Generación del 98, que antepondrán las ideas sociales a las puramente estéticas.

Concepto, Componentes y Circunstancias Generacionales

El concepto de Generación del 98 fue propuesto por Azorín en unos artículos de 1913 para referirse a un grupo de escritores españoles con un común espíritu de protesta y un profundo amor al arte. Los principales componentes son:

  • José Martínez Ruiz, «Azorín»
  • Pío Baroja
  • Ramiro de Maeztu
  • Ramón Valle-Inclán
  • Miguel de Unamuno
  • Antonio Machado

Características importantes de esta generación:

  • Tienen una ideología progresista, al menos en la juventud.
  • Se preocupan por los problemas de España.
  • Se proponen renovar el lenguaje literario frente al prosaísmo de la literatura realista.
  • Tienen una visión subjetiva de la realidad.

Ideología y Temas del 98

La visión crítica predomina en los primeros tiempos, cuando se ataca el carácter grosero de las costumbres desde una perspectiva regeneracionista y europeísta. Surge la visión de una España eterna, en cuyo paisaje empobrecido y gentes humildes se puede reconocer lo castizo, una España imaginada que revive los ideales permanentes de nobleza, dignidad y austeridad que provienen de la Edad Media. Esta actitud se resume bien en la expresión de Antonio Machado: «Castilla miserable, ayer dominadora». El afán de conocer y exaltar lo castellano y español llevará a los autores del 98 a recorrer los pueblos y aldeas de Castilla y de España. La descripción paisajística es de carácter subjetivo, en la que la crítica del atraso y la pobreza deja paso a una visión sentimental de las tierras y las gentes.

Igualmente contradictoria es la actitud ante la modernidad y el progreso. En un principio se critica el atraso y la pobreza de España. La modernización será el resultado de la europeización, con la asimilación de nuevas formas de civilización y progreso. Pero estos afanes muy pronto se moderan y se combinan con la exaltación de la tradición española. Se instaurará una visión espiritualista que valora más el mundo de las creencias que el progreso material, porque este deshumaniza a la España castiza de siempre que arraiga en los pueblos.

La mirada de los autores del 98 se dirige hacia dentro: en los paisajes del alma se reflejan un desasosiego y una angustia vital. Su literatura es un examen de conciencia. Esta actitud de raíz romántica lleva a la reflexión intelectual sobre los grandes problemas del ser humano: el paso del tiempo, el sentido de la vida, el misterio de la muerte, el valor de las creencias religiosas o el sentimiento trágico de la fe.

El Lenguaje Literario

Los autores del 98 poseen una acusada personalidad que se traduce en un estilo literario personal. En sus inicios, todos se oponen al estilo anterior, representado por el prosaísmo realista, y tienen una expresión muy cuidada, que se basa en la selección y cuidado de los elementos lingüísticos con predominio de la descripción como reflejo del estado de ánimo del autor. Se trata de un estilo anti-retórico, caracterizado por la sobriedad y huida de los excesos, lenguaje muy cuidado, fruto de la selección en el uso de recursos retóricos; incorpora vocablos arcaicos de los clásicos españoles y de los pueblos, así como localismos.

La Narrativa del Siglo XX hasta 1939

Grupo del 98

Época dominada por una sensación de crisis y decadencia cultural. Se produce un rechazo del realismo y del racionalismo positivista. En la novela se introducen modificaciones con respecto a la narrativa anterior, la realista: articulación de la trama en torno a un único personaje, la acción se centra alrededor de la mentalidad del protagonista en lugar de alrededor de sucesos externos.

Miguel de Unamuno

Trata temas como la tradición, la intrahistoria y el concepto de España, la conciencia trágica de la existencia y la sed de eternidad. Temas plasmados en sus «nivolas». Obras destacadas:

  • Amor y pedagogía
  • Niebla
  • San Manuel Bueno, mártir

Ramón María del Valle-Inclán

El esperpento, subgénero dramático basado en la burla aparente, la crítica profunda y la animalización de los caracteres, se lleva también a la narrativa. Obras:

  1. Etapa de modernismo inicial: Sonatas
  2. Fase intermedia: Los cruzados de la causa
  3. Etapa del esperpento: Tirano Banderas, La corte de los milagros, Baza de espadas

Pío Baroja

Su narrativa es una mezcla de pesimismo y vitalismo; posee también ciertos tonos moralistas, radicales e individualistas. Obras destacadas:

  • La busca
  • El mayorazgo de Labraz
  • El árbol de la ciencia

José Martínez Ruiz, «Azorín»

Estilo narrativo impresionista, con fuertes dosis de lirismo; sintaxis nominal, una preferencia por la frase corta, el tiempo verbal suele ser el presente. Obras destacadas:

  • La voluntad
  • Doña Inés

La Narrativa del Novecentismo

Se caracteriza por el anti-realismo, anti-romanticismo y anti-noventaochismo. Los escritores son cosmopolitas y europeístas. Defienden la pureza formal y estilística de sus obras, que pretenden configurar un arte selectivo y minoritario.

Gabriel Miró

En sus novelas se observa la prioridad de la forma sobre el contenido. Obras destacadas:

  • Las cerezas del cementerio
  • El obispo leproso

Ramón Pérez de Ayala

Se caracteriza por su intelectualismo, lirismo, reflexión crítica, estilo retórico y academicista. Obras destacadas:

  • Tinieblas en las cumbres
  • Tigre Juan

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *