La Literatura Catalana en la Edad Media
La Poesía Trovadoresca
Los principales géneros de la poesía trovadoresca son:
- La canción, en que se hace una alabanza e idealización de la dama.
- El alba, que narra la separación de los amantes al amanecer.
- La pastorela, que es un diálogo entre un caballero y una pastora.
- La danza, que es una canción para ser bailada.
- La tenzón, que es la discusión poética entre dos trovadores.
- El lamento, que consiste en un lamento por la muerte de un ser estimado.
- El sirventés, que es un ataque personal o propaganda de ideas.
Los poetas catalanes escribían en occitano porque había similitud entre la lengua occitana y catalana.
Los principales trovadores catalanes fueron Guillem de Berguedà, Ramon Vidal de Besalú, Guillem de Cabestany y Cerverí de Girona.
Orígenes y Ramon Llull
Los primeros textos en catalán datan del siglo XII.
La figura más relevante de la época fue Ramon Llull (1232-1315), que escribió muchos libros, y se han conservado casi 250. Ramon Llull escribió en latín, catalán, occitano y árabe.
Siglos XIII y XIV: Humanismo
En los siglos XIII y XIV, la literatura catalana asimiló las corrientes humanísticas que provienen de Italia.
El humanismo situó la figura humana como eje central del pensamiento, en contraposición a la visión medieval, cuyo centro era Dios.
En el campo del arte, esta corriente intentó recuperar los temas y el estilo de la antigüedad clásica.
La figura principal fue Bernat Metge (1340-1413); su obra más importante es Lo somni.
Finales del Siglo XIV y el Siglo de Oro
A finales del siglo XIV, en la literatura catalana aparecieron los primeros síntomas del Renacimiento.
Este período coincide con una cierta recuperación económica y con la expansión de la Corona catalano-aragonesa por tierras de Italia.
La literatura catalana alcanzó el momento más brillante en el siglo XV.
Este siglo de oro tuvo el centro en Valencia y se nutrió de autores de extracción burguesa o de la pequeña nobleza.
La Poesía del Siglo XV: Ausiàs March
Durante el siglo XV, la poesía llegó al punto más elevado gracias a las obras de Jordi de Sant Jordi, Joan Roís de Corella y Ausiàs March.
Ahora bien, la obra que alcanzó mayor originalidad y relevancia fue, sin duda, la poesía de Ausiàs March.
Ausiàs March fue el primer poeta que escribió en una lengua genuinamente catalana.
Rompió de manera definitiva con la tradición anterior, la poesía trovadoresca, tanto en cuanto a la lengua como en cuanto al convencionalismo del amor cortés.
Su poesía representa el primer paso hacia la poesía moderna.
La poesía de March gira alrededor de los temas del bien y el mal, el buen y el mal amor, el pecado y la virtud, el dolor y la muerte, y la lucha consigo mismo.
El tema amoroso es el que ocupa más espacio en su extensa obra.
En Ausiàs March, el amor aparece siempre intelectualizado e idealizado.
El poeta distingue tres tipos de amor: el honesto, que corresponde al alma humana; el deleitable, que corresponde al cuerpo; y el que se compone de estos dos.
La poesía de March se agrupa en ciclos clasificados por tema o por la ‘señal’.
En función de estas ‘señales’, su poesía amorosa se agrupa en cinco grandes ciclos:
- Plena de seny
- Lliri entre cards
- Mon barrer bien
- Amor, amor
- Oh loco amor
Plena de seny recoge un amor temprano. El poeta amaba a la dama, y ella lo quería poco; por eso los versos están llenos de añoranza y amargura.
Lliri entre cards es el ciclo amoroso más amplio de Ausiàs March; se dirige a una sola dama, Teresa, casada y con hijos. El poeta está muy enamorado pero ella no llega a amarlo de verdad.
Los otros tres ciclos completan los llamados Cantos de Amor.
La Narrativa Medieval
La narrativa que se escribió durante la Edad Media se inspiraba en narraciones de hechos caballerescos y también en la épica tradicional y en leyendas sobre la antigüedad grecorromana.
Los hechos caballerescos originaron dos tipos de obras: los libros de caballerías y las novelas caballerescas.
Libros de Caballerías vs. Novelas Caballerescas
Los libros de caballerías nacieron en el siglo XIII. Este tipo de obras se caracterizan por:
- La presencia de elementos maravillosos, fantásticos e inverosímiles, como gigantes, dragones, etc.
- La exageradísima fuerza física de los caballeros y sus cualidades sobrehumanas.
- Las aventuras imposibles que se narran.
- La acción está situada en tierras lejanas y exóticas.
Sus personajes son el modelo del ideal caballeresco.
Las novelas caballerescas no tienen elementos maravillosos; sus protagonistas son muy fuertes y muy valientes, pero en una proporción humana; y las acciones que se narran tienen lugar en tierras conocidas y perfectamente localizables, en un tiempo cercano y en un ambiente inmediato. Como por ejemplo Tirant lo Blanc.
Tirant lo Blanc
Tirant lo Blanc representa una caballería posible y necesaria en la sociedad de la época; creíble y verosímil, que obedece tanto al cambio de gustos estéticos, cada vez más próximos a la realidad, como a las necesidades del mundo de la caballería del siglo XV.
La novela presenta un modelo de caballero, ejemplar y humano a la vez, que resulta posible y creíble, y que se adapta a su momento para regir los destinos de los hombres coetáneos.
Tirant lo Blanc es una de las novelas más relevantes de la literatura europea; la escribió Joanot Martorell en la segunda mitad del siglo XV, y la imprimió por primera vez en 1490.
La han definido como una novela total: de caballería, fantástica, histórica…
La obra, dividida en 487 capítulos, narra la historia de un joven caballero, Tirant lo Blanc, desde sus inicios en la corte de Inglaterra hasta su muerte en Grecia.
En Tirant lo Blanc destacan dos elementos: los caballerescos y los sentimentales.
Literatura y Estratos Sociales
Literatura religiosa: clero; Literatura caballeresca: nobleza; Literatura popular: pueblo.
La Prosa de Ramon Llull
Ramon Llull es el creador de la prosa literaria catalana.
Llull no es solo una gran figura de la literatura catalana, sino que también es una figura caudal en la literatura y en la ciencia universal: con su obra llevó a cabo una empresa idiomática extraordinariamente decisiva en la historia de nuestra lengua y de todas las románicas.
Despegó la prosa catalana desde la mediocridad anterior a él hasta la perfección y la modernidad de sus escritos.
Es equiparable a Alfonso X el Sabio en la castellana o a Dante en la italiana.
Para entender esto hay que tener en cuenta que R. Llull:
- Fue el primer filósofo europeo en utilizar una lengua vulgar para hablar de alta ciencia. En su época, los tratados físicos y filosóficos se hacían en latín en todo el continente; la literatura, en cambio, ya se iba haciendo en lenguas vulgares.
- Elaboró una prosa segura, flexible y matizada apta para expresar todas las sutilezas de la inteligencia y del sentimiento.
- Aumentó el caudal léxico, incorporando palabras nuevas.
- Ayudó a fijar el patrón lingüístico que después mantendría la cancillería real.
«Si no nos entendemos con palabras, entendámonos por amor.»
Las Crónicas Medievales
Las crónicas medievales son relatos en forma de libro que hablan de la época más gloriosa de la dinastía catalana. Hay cuatro:
- La de Jaume I (el Llibre dels fets).
- La crónica de Pedro III el Ceremonioso.
- La de Bernat Desclot.
- La de Ramon Muntaner.
En los dos primeros casos, son dictadas por el rey mismo; en los otros dos casos, son escritas por estos autores, que participaron de manera directa en las empresas militares de la corona.
Las Crónicas en Detalle
Llibre dels fets: Jaume I dicta las hazañas y las vivencias de su reinado como modelo para sus descendientes. Jaume I se presenta sensible, cruel, valiente y contundente. Se trata de ofrecer una imagen original y de transmitir proximidad pero a la vez autoridad.
Crónica de Bernat Desclot: es la más «cinematográfica» de todas. El protagonista es Pedro II el Grande, hijo de Jaume I. Desclot muestra solo lo que interesa, es decir, no dice ninguna mentira pero tampoco toda la verdad.
Crónica de Ramon Muntaner: es el más apasionado de todos. Escribió la obra por encargo divino y participa directamente de lo que relata.
El Siglo de Oro Catalán
Nos encontramos en el siglo XV. El otoño de la Edad Media inicia su final y empiezan a soplar aires de renacimiento.
La Corona de Aragón ha vivido durante la Edad Media tres siglos de máximo esplendor y ha construido un imperio mediterráneo que llega hasta Valencia.