Rasgos Generales de la Literatura Medieval
La literatura medieval presenta una serie de características distintivas que reflejan el contexto histórico y cultural de la época:
Oralidad
Debido a las altas tasas de analfabetismo y a la dificultad de encontrar soportes escritos, gran parte de las manifestaciones literarias más primitivas fueron planeadas para ser difundidas oralmente.
Predominio del Verso
Se prefiere el verso a la prosa porque se consideraba que la poesía constituía un verdadero saber, pero, sobre todo, porque el verso permite una serie de recursos que potencian su difusión oral y su mayor capacidad de memorización.
Anonimia y Falta de Conciencia de Autor
La difusión oral y el hecho de que un mismo texto pase por varios refundidores determinan que buena parte de las obras hayan quedado como anónimas.
Didactismo
El marco teocéntrico exige que los autores justifiquen el propósito de sus obras, a menudo con una finalidad moral o religiosa.
Influencias Culturales y Fuentes Literarias
La ausencia del concepto de originalidad y de autor posibilita que los escritores medievales manejen diversas fuentes literarias que unifican la literatura europea del periodo.
Lírica Popular
Una prueba de unas tendencias comunes a toda Europa es el hecho de que esta poesía popular suele tener un yo poético femenino: siempre están en boca de una mujer que muestra sus penas de amor a un interlocutor o confidente. Este género paneuropeo se ha denominado “canción de mujer”. En todos ellos son comunes la presencia de símbolos y metáforas. Todos comparten una métrica irregular con predominio de rimas asonantes, como consecuencia de su oralidad primitiva.
En la lírica popular de la península se distinguen tres tradiciones, cada una de ellas vinculada a una zona geográfica y a una lengua distintas:
- Las jarchas mozárabes de la zona andalusí.
- Las cantigas de amigo gallego-portuguesas.
- Los villancicos castellanos.
Las Jarchas Mozárabes
Su origen se remonta al siglo XI y se prolongan hasta el siglo XII. La moaxaja se construía con el objeto de dar paso a la jarcha que la remataba, introduciéndola mediante algún verbo de lengua, lo cual demuestra la reelaboración culta y el estado latente. Las jarchas en sí eran muy breves, de tres o cuatro versos con una o dos rimas y una métrica irregular de versos de arte menor. Estaban en boca de una mujer y tenían un contenido erótico.
Las Cantigas de Amigo Gallego-Portuguesas
En una época posterior, hacia el siglo XII, y como reverso popular de la poesía culta trovadoresca llegada por el Camino de Santiago y codificada en las cantigas de amor, surgen en Galicia y Portugal las llamadas cantigas de amigo. La voz poética es femenina y expresa sus penas de amor por la ausencia del amado. Se ambientan en un entorno rural y marinero. Eso permite clasificarlas en subgéneros como la barcarola o canción marinera y la cantiga de romería. El interlocutor o confidente puede ser la madre o la hermana, pero también la propia naturaleza. Predomina un tono dulce y melancólico.
Los Villancicos
La poesía lírica de tipo popular adopta en general la forma de villancicos. Estos poemas solo se han conservado en fuentes escritas muy posteriores. Además, estas cancioncillas populares fueron reelaboradas por autores cultos, quienes añadieron una glosa y dejaron el poema popular como una especie de estribillo. La combinación entre poemilla popular y glosa suele asumir dos formas, el zéjel y el villancico, aunque la predominante en Castilla es el villancico.
- Zéjel: forma estrófica de origen árabe donde el poemilla popular es la cabeza.
- Villancico: variante del zéjel, donde el poemilla popular es la cabeza, la mudanza es una estrofa variable.
Comparten unos rasgos similares de carácter estilístico, temático y genérico. Predomina un lenguaje afectivo, con diálogos entre la mujer y sus confidentes, uso de deícticos de primera y segunda persona, desde la repetición literal o derivación (morena/morenica) hasta el paralelismo y la anáfora. Normalmente la voz poética es femenina.
El Amor Cortés
Surge en las cortes feudales de Occitania o Provenza a principios del siglo XII. Su novedad radica en la condición de un amor inalcanzable donde la dama es un ser superior, ya que en muchos casos era la señora del castillo.
Determinismo Amoroso
El poeta está predestinado a enamorarse de la dama y no puede hacer nada por escapar a ese destino. Además, la amada marca a fuego su nombre y su rostro en el corazón del poeta.
Resistencia de la Amada
Se trata de un amor difícilmente realizable, porque la amada desdeña y rechaza al poeta. Esto genera sufrimiento por el amor y muchas veces el poeta prefiere la muerte.
Autores Destacados
Marqués de Santillana
Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana y autor del famoso cosante del Cancionero de Palacio, es una figura que destaca del panorama poético durante el reinado de Juan II. En su persona, se funden armas y letras, lo que hace de él la encarnación del prototipo de noble letrado de su época. Describe la poesía como uno de los más altos dones humanos y una ciencia cuyo contenido debe verse embellecido por la forma. Además, traza también una clasificación de la poesía medieval y la divide en sublime, mediocre e ínfima. Hacia estas dos últimas muestra desdén, pero también las cultiva, como sus serranillas y sus villancicos.
De su obra destacamos tres géneros:
Composiciones Líricas
Destacan las canciones, los decires líricos y las serranillas, y se corresponden con sus primeros ensayos poéticos. De ellas se han conservado 19 canciones.
Decires Narrativos
Son poemas compuestos entre 1430-1437, donde predominan el contenido moralizante y el esfuerzo por construir una forma bella, que encuentra en la forma alegórica.
Poesía Moral y Política
Al margen de la producción literaria, encontramos los 42 sonetos en su obra Sonetos hechos al itálico modo, donde adapta la poesía castellana a los metros y las formas italianas.
Jorge Manrique
Perteneciente ya a la generación posterior (segunda mitad del siglo XV), fue caballero de la Orden de Santiago y, por lo tanto, representa al prototipo de hombre de armas y letras, como Santillana o Garcilaso. Un año destacable en su vida es el de 1476, cuando tiene lugar la muerte de su padre, que da origen a la fama literaria de este autor al componer Coplas a la muerte de su padre. Refleja fielmente el mundo que le toca vivir: por un lado, el mundo del guerrero medieval y, por otro, el mundo de la nobleza en la corte, donde repite tópicos habituales de esta casuística. El verso siempre es octosílabo o de pie quebrado (coplas reales de 8 y 10 versos) y la rima es pobre, con elevada frecuencia de adjetivos y verbos, como palabras rima. Escribe tres composiciones de burlas en las que ridiculiza a varias mujeres conocidas. No obstante, su obra capital es la ya nombrada Coplas a la muerte de su padre, una de las más estimadas de la literatura castellana.
Las Coplas a la muerte de su padre son una elegía en la que el poeta habla serenamente de temas como la inestabilidad de la fortuna y la fama, la evocación del ubi sunt? mientras elogia a su padre y afronta el destino de todos los hombres con una mezcla de resignación y esperanza. Destacaremos en él el uso de la primera persona del plural (nosotros) en expresiones como “nuestras vidas”. Es una composición escrita en octosílabos, con versos de pie quebrado, que contienen los tópicos doctrinales y retóricos de la Edad Media, lo que estrecha los lazos del escritor con la tradición y, realmente, lo distancia de la originalidad. En cuanto a la métrica, destaca su uso de la copla de pie quebrado (8a 8b 4c, 8a 8b 4c) con rima consonante.
Narrativa Medieval
Es comprensible que las primeras tentativas del género narrativo se compusieran en verso, ya que se permitía al divulgador (juglar o clérigo) una mejor memorización, a la vez que sus cualidades rítmicas resultaban más atractivas para el oyente profano. En la literatura castellana se suceden entre los siglos XII, XIII y XIV dos tendencias:
- El mester de juglaría.
- El mester de clerecía.
El Mester de Juglaría
La épica castellana se caracteriza frente a las demás por su realismo, historicidad y su tradicionalismo. Destaca la escasez de testimonios escritos, sobre todo si se compara con la abundancia de textos franceses. Disponemos del Cantar de Mio Cid casi completo. La escasez de testimonios ha convertido el Cantar de Mio Cid en el verdadero protagonista de la épica castellana, cuyas obras son llamadas cantares de gesta. Conservamos 3730 versos del Cantar, ya que se ha perdido la hoja inicial.
Estructura Externa
Menéndez Pidal entiende que el poema puede dividirse en tres partes, nombradas por él mismo:
- Cantar del destierro.
- Cantar de las bodas de las hijas del Cid.
- Cantar de la afrenta de Corpes.
El tema principal sería el restablecimiento de la honra perdida del héroe.
Estructura Interna
Presenta un progresivo ascenso del Cid, un movimiento en zigzag en el que los principales puntos de inflexión y las acciones que se plantean fallan su blanco y se produce un resultado opuesto al que se preveía. No es un poema muy largo. Son unos 4000 vv, sin pausas, pero sí tiene divisiones métricas. Los vv se dividen en tiradas o hemistiquios y presentan rima interna, casi siempre pareados. El rasgo más importante es el anisosilabismo.