Poesía

Tras la Guerra Civil, desaparecen o marchan al exilio muchos poetas.

Primera etapa: hasta 1950 aproximadamente

Poesía arraigada

En sus poemas hay un sentimiento optimista ante la vida, olvida los difíciles tiempos pasados y tiene como temas principales el amor, la familia, la religión, el paisaje… Autores como Luis Rosales y Leopoldo Panero.

Poesía desarraigada

Expresan, en versos menos preocupados por la perfección formal, el mundo deshecho, invadido por el sufrimiento y la angustia, la soledad.

En 1944 se publicaron dos libros clave: Sombra del paraíso de Vicente Aleixandre e Hijos de la ira de Dámaso Alonso.

Utiliza versos larguísimos y con palabras antipoéticas, llenos de rabia y angustia, en los que se mostraba el malestar existencial de la posguerra española. Los poetas se convierten, pues, en gritos de desesperación y de denuncia.

Segunda etapa: 1950-1960

Poesía social

La poesía debe servir para reflejar la realidad social y política, para denunciar las situaciones de injusticia y defender la paz y la libertad. Está escrita en un lenguaje claro y llano.

Temas:

• Denuncia de la deshumanización.
• Testimonio de la pobreza del ser humano.
• Ansia de paz y de superación del odio causado por la guerra.
• Invitación al compromiso político.

Formalmente, está caracterizada por la sencillez del lenguaje, cercano al registro coloquial o conversacional.

Poetas: Blas de Otero (Pido la paz y la palabra) y Gabriel Celaya (Cantos iberos).

Poesía humanizada

Son poemas realistas que se interesan por lo humano, pero sin compromiso político; muestran preocupación por el hombre.

Temas:

• El paso del tiempo.
• La vida cotidiana.
• El recuerdo de la infancia.
• La amistad.
• El amor.

Autores: Ángel González y Carlos Barral.

Tercera etapa: Los Novísimos

En 1970, el crítico José María Castellet publicó una antología titulada Nueve novísimos poetas españoles.

Temas:

La pintura, la música, el cine, los medios de comunicación…

Estilo:

Introduce elementos experimentales tomados de las vanguardias o del modernismo.

A partir de 1975 se observa una vuelta a la poesía de contenido humano y a las formas clásicas, aunque se sigue utilizando el verso libre.

Novela

La Guerra Civil supuso un cambio radical en la literatura y, en general, en la vida del país (1939-1975).

Años cuarenta

Durante los primeros años de la posguerra se produce un estancamiento en el género narrativo. Se publican novelas triunfalistas que relatan la guerra desde el punto de vista de los vencedores o novelas de evasión con asuntos sentimentales, alejados de la desolación y la miseria del momento.

Obras clave:

• La familia de Pascual Duarte (1942), de Camilo José Cela.
• Nada (1945), de Carmen Laforet.

Con La familia de Pascual Duarte se inicia la corriente denominada tremendismo, al profundizar el relato en los aspectos más crudos de la realidad: miseria, violencia, etc. En Nada, su protagonista, Andrea, viaja a Barcelona para estudiar en la universidad. A través de sus vivencias, el lector conoce un mundo lleno de miseria, tanto material como moral.

Años cincuenta

En 1951, Cela publicó La colmena, que se considera un precedente de la novela social. Por primera vez en la narrativa española posterior a la Guerra Civil, se refleja la sociedad de la posguerra con todas sus miserias físicas y morales.

La novela social

• Temas: Abarcan a todos los sectores sociales.
• Intención: Predomina una intención crítica y de denuncia. Los novelistas desean recoger en sus obras las injusticias y las desigualdades sociales.
• Forma: La novela social opta por el objetivismo o conductismo.
• Autores: Jesús Fernández Santos, Carmen Martín Gaite.

Años sesenta: La renovación narrativa

Dos causas explican el cambio de la novela en los sesenta: el cansancio provocado por la abundancia de novelas sociales y la transformación de la sociedad española en esos años.

En 1962 se publican Tiempo de silencio de Luis Martín-Santos y se da a conocer La ciudad y los perros del peruano Mario Vargas Llosa.

Características de la renovación:

• Cambio de perspectivas narrativas: En una misma novela, puede pasarse de la narración en tercera persona a la narración en primera persona.
• Monólogo interior: Consiste en reproducir los pensamientos de un personaje tal y como nacen en su conciencia.
• Parodia de géneros narrativos: Se introducen partes que imitan o se burlan de subgéneros novelísticos, como la novela policial o la novela rosa.
• Desorden temporal: La narración no sigue un orden cronológico lineal, sino que puede saltar hacia atrás o hacia delante en el tiempo.
• Personajes conflictivos: A menudo aparecen personajes desequilibrados con conflictos y trastornos psicológicos, que dudan de su propia identidad.

Autores: Camilo José Cela.

Desde 1975

La narración evoluciona hacia formas más tradicionales, en las que importa el argumento y la necesidad de atrapar al lector.

Teatro

Años cuarenta

La repercusión de la Guerra Civil sobre el teatro fue más importante que sobre la poesía y la narrativa. Las consecuencias fueron varias: la muerte o el exilio de autores, escenógrafos y actores; y el peso de los condicionamientos ideológicos llenaron los escenarios de espectáculos de evasión, como sainetes y revistas musicales.

También se representaron obras de contenido histórico o político para propagar la ideología de los vencedores de la guerra.

La única tendencia teatral anterior a la guerra que continúa representándose es la comedia burguesa, que acentúa la defensa de valores conservadores, a veces con leves críticas tolerables. Otra línea teatral es la del teatro cómico.

Años cincuenta

En 1949 se produce un estreno importante: Historia de una escalera de Antonio Buero Vallejo. Su éxito animó a la escritura y, en lo posible, a la representación de un teatro más crítico y cercano a las preocupaciones del momento.

En los cincuenta comienza a aparecer un teatro comprometido, en cuyos argumentos se reflejan las injusticias y desigualdades sociales.

Años sesenta

Continuando con los propósitos de denuncia y compromiso, aparecen nuevos autores que intentan una renovación del lenguaje y de las técnicas dramáticas. Pero estos autores se enfrentan con más obstáculos aún que los representantes del realismo, porque sus novedades no fueron comprendidas por el público y la crítica.

Características:

• La creación colectiva de las obras.
• La menor importancia del texto.
• La ruptura de las convenciones escénicas.

Desde 1975 hasta hoy

El panorama de estos últimos años es variado y cambiante. Predomina el teatro comercial e institucional, pero también surgen autores y grupos que realizan nuevas propuestas escénicas.

• El teatro de compañías institucionales: Como el Centro Dramático Nacional o la Compañía Nacional de Teatro Clásico, que realizan espectaculares montajes de obras consagradas.
• El éxito de autores con una trayectoria individual: Como Antonio Gala o Fernando Fernán Gómez, que escriben obras realistas y accesibles para el gran público.
• La abundancia de grupos teatrales independientes: Sobreviven en difíciles condiciones, representando en salas pequeñas las obras de autores desconocidos y marginados.