Panorama Literario del Siglo XVII: Prosa, Poesía y Teatro Barroco Español

El Panorama Literario del Siglo XVII: Prosa, Poesía y Teatro

El siglo XVII, enmarcado en el Barroco español, presenta una rica y compleja producción literaria que se diversifica en prosa, poesía y teatro, reflejando el pesimismo y el desengaño de la época.

La Prosa en el Siglo XVII

La prosa del siglo XVII se articula en torno a dos tendencias fundamentales:

  • La prosa didáctica: Su propósito central es la difusión de conocimientos y enseñanzas. El autor más sobresaliente en este ámbito es Baltasar Gracián, cuya obra cumbre es El Criticón.
  • La prosa de ficción: Esta vertiente se manifiesta a través de varios subgéneros importantes:

Subgéneros de la Prosa de Ficción

  • Novela corta o cortesana: Relatos centrados en el amor entre personajes de alta posición social. Ejemplos se encuentran en algunas de las Novelas ejemplares de Cervantes o en las novelas amorosas de María de Zayas.
  • Novela picaresca: Continúa el modelo iniciado por el Lazarillo. Destacan obras como El Guzmán de Alfarache, de Mateo Alemán, o El Buscón, de Francisco de Quevedo.

La Poesía Barroca: Temas y Estilo

La poesía del siglo XVII se caracteriza por expresar sentimientos de tristeza y sátira. Los temas recurrentes giran en torno al pesimismo y la muerte, haciendo uso frecuente de tópicos latinos como:

  • Tempus fugit (el tiempo huye).
  • Carpe diem (aprovecha el momento).
  • Memento homo (recuerda, hombre, que polvo eres y en polvo te convertirás).

Estilísticamente, la poesía tiende al efectismo, entendido como la acumulación de recursos literarios. En cuanto a la métrica, son habituales tanto las estrofas cultas como las tradicionales.

Tendencias Estilísticas en la Poesía

Con estas características comunes, se distinguen dos grandes tendencias estilísticas:

El Conceptismo

Predomina el virtuosismo temático, logrado mediante la elaboración de conceptos y asociaciones breves e ingeniosas de ideas que permiten percibir la realidad de manera novedosa. Se emplean recursos como comparaciones, metáforas, hipérboles y juegos de palabras. Su autor más destacado es Francisco de Quevedo.

El Culteranismo

Predomina el virtuosismo formal, buscando crear un lenguaje muy elaborado y musical. Se caracteriza por una sintaxis compleja, un léxico elevado (con preferencia por cultismos y arcaísmos) y numerosas alusiones mitológicas. Su máximo exponente es Luis de Góngora.

Autores Poéticos Relevantes

Obra de Francisco de Quevedo

La obra de Francisco de Quevedo resalta por el ingenio con el que aborda temas como el amor, la moral, la religión e incluso cuestiones metafísicas como la fugacidad de la vida. En su estilo sobresale la preferencia por el uso del soneto, la tendencia a la poesía satírica y el tono de advertencia en su poesía más profunda.

Obra de Luis de Góngora

La obra de Luis de Góngora destaca por su belleza y sensualidad, desplegando un uso virtuoso de los recursos literarios que busca la complicidad de un lector hábil e imaginativo. Su poesía se puede clasificar según su forma:

  • Poemas de arte menor: Influenciados por la lírica tradicional (con recurrencia de romances y letrillas satíricas).
  • Poemas de arte mayor: Influenciados por la poesía culta (con preferencia por el soneto), como Soledades y Fábula de Polifemo y Galatea.

El Teatro: Espectáculo y Transformación

En el siglo XVII, el teatro experimenta una profunda transformación que lo convierte en un espectáculo variado y entretenido para todo tipo de público, un cambio impulsado principalmente por las innovaciones de Lope de Vega.

Nacimiento de los Corrales de Comedias

En esta época surgen los corrales de comedias, escenarios estables instalados en los patios interiores de las viviendas, desplazando a las iglesias y plazas como espacios teatrales principales. El público se distribuía en el patio y las galerías laterales.

Características del Teatro del Siglo XVII

El teatro barroco se define por los siguientes aspectos:

  • Es un teatro concebido para el entretenimiento de todas las clases sociales.
  • Se produce una mezcla de elementos trágicos y cómicos.
  • Las obras se escriben en verso.
  • La forma de hablar de los personajes se adecúa a su condición social y a la situación dramática.
  • Se prescinde de las unidades dramáticas clásicas de acción, espacio y tiempo.
  • El tema central más frecuente es la honra, entendida como la necesidad de mantener una buena imagen social acorde con los valores del momento.
  • Los personajes representan prototipos claros: la dama, el galán, el gracioso, el rey (que restablece el orden y la justicia), el hidalgo o villano rico que defiende el honor familiar, y el noble poderoso que abusa de su poder.

Lope de Vega definió estos rasgos en su obra Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo. Esta fórmula teatral fue adoptada y adaptada a su estilo particular por otros autores como Calderón de la Barca o Tirso de Molina.

La Prolífica Obra de Lope de Vega

Lope de Vega destaca por su inmensa producción: se conservan unas 400 obras, aunque se estima que escribió alrededor de 1500. Su obra se puede clasificar temáticamente:

  • Obras de tono ligero: Comedias de enredo con desenlace feliz, cuyo tema principal es el amor. Ejemplos son La dama boba o El perro del hortelano.
  • Obras de tono más serio: Incluyen los dramas trágicos, como El caballero de Olmedo, y los dramas del honor campesino, como Fuenteovejuna, Peribáñez y el comendador de Ocaña (protagonizados por un campesino rico que se enfrenta a un noble que ha atentado contra su honor).

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