El Lenguaje Simbólico en la Poesía de Federico García Lorca
En la obra poética de Federico García Lorca, el carácter figurado de su lenguaje es fundamental, cimentado en la riqueza de la metáfora y el símbolo. La mayoría de los romances de su célebre colección, el Romancero Gitano, narran anécdotas que revelan la esencia de lo que podríamos denominar la vida, pasión y muerte del gitano. El simbolismo lorquiano es una constante a lo largo de toda su producción, donde cada imagen y expresión está cargada de un intenso valor significativo.
Los Colores y su Profundo Significado
Aunque en la escala cromática del Romancero Gitano pueda parecer que hay una aparente pobreza de matices, los adjetivos de color utilizados desempeñan una función primordial en la recreación poética del libro. La escasez se ve compensada por la emotividad que Lorca supo extraer de cada tonalidad.
- El Verde: Sin duda, el color más destacado de la cromática lorquiana. Se relaciona con la luna, lo carnal, las espinas, la frustración y la muerte. También se asocia con un amor amargo y sin fruto. En la obra de Lorca, está ligado a elementos sexuales y contiene connotaciones dolorosas y de frustración erótica.
- El Negro: Simbólicamente negativo, asociado directamente a la muerte.
- El Amarillo: Tradicionalmente vinculado a la vejez y el desengaño, en García Lorca adquiere acepciones muy distintas, transformándose en un símbolo de creación personal, con connotaciones que van desde lo erótico hasta el trágico presagio.
- El Rojo: Ligado en principio a la pasión, Lorca va más allá, asignándole un nuevo matiz significativo alusivo a la sangre, lo que también lo conecta con la muerte.
- El Azul: Conserva su acepción significativa tradicional de inocencia.
- El Blanco: Color de la pureza. Sin embargo, Lorca le asigna nuevos significados. En el “Romance de la Luna, Luna”, su uso aparece asociado a la luna y, por lo tanto, a la muerte. En cambio, en “El Martirio de Santa Olalla”, la presencia constante de este color simboliza la vida eterna.
Elementos de la Fauna: Reflejos de Pasión y Destino
- El Caballo: Posee un arraigo hondamente vital, íntimamente ligado a la vida de los gitanos. Es símbolo de pasión, deseo, fuerza, juventud y vigor sexual. Asociado a la luna, crea una imagen fúnebre. Otras veces, es un presagio funesto o anuncia la muerte.
- El Pez: Imagen vinculada a la atracción puramente sensual y a la pasión amorosa, así como al cambio de luz propio del amanecer.
- El Toro: Potencia indomable por sí mismo. Es el emblema de la ceremonia y la fiesta de la muerte, asociado a la sangre y al valor.
- El Grillo: Representa el ardor encendido del amante y la mujer infiel.
- El Gallo: Símbolo asociado a la aurora.
Elementos de la Naturaleza: Paisajes del Alma Lorquiana
- La Luna: Portadora de dolor, tragedia y muerte. A veces personifica a una mujer encantadora que oculta malos presagios. En el “Romance Sonámbulo”, la luna anuncia el destino nefasto de la gitana. El paisaje de este romance es lunar, lleno de imágenes de frío, donde se respira un presagio de muerte.
- El Viento: Desde las mitologías más primitivas, es un símbolo erótico evidente. En Lorca, siempre está cargado de sensualismo.
- El Agua: Fuente de vida y medio de purificación, pero también puede ser símbolo de abismo y de muerte.
- El Mar: Al igual que el caballo, es un símbolo sexual y de fecundidad, pero también significa frustración erótica y muerte.
- La Tierra: Representa la fuerza y la fertilidad. Simboliza el elemento femenino, capaz de engendrar, dar forma y vida.
Los Metales: Frialdad y Destino Fatal
El metal y la muerte están íntimamente relacionados en la obra lorquiana. El metal, sólido y frío, se extiende a todo lo que participa de las cualidades de dureza y helado. Así, por ejemplo, en el “Romance de la Luna, Luna”, los senos son de duro estaño.
Los Espejos: Reflejos del Alma y el Cosmos
Lorca utiliza este elemento como símbolo de unión mágica entre el alma del poeta y el alma de las cosas y del cosmos. La atracción que Lorca siente por los espejos proviene del ambiente granadino. En un principio, los concibe como una realidad objetiva. Pero también encontramos un espejo menos objetivo, más metaforizado, como el agua, espejo natural por excelencia. Esta sirve de espejo y, a través de ella, los astros se acercan a la tierra, la fecundan y la humanizan. Los ojos, por su parte, reflejan no solamente el amor, sino muchos otros sentimientos. Los ojos son el reflejo del alma. El poeta mira a través de ellos, traspasa la “puerta” y sirven de espejo para reflejar sentimientos y estados.
El Cuerpo Humano: Simbolismo Erótico y Vital
El cuerpo es una fuente de símbolos eróticos y vitales en la poesía de Lorca:
- Muslos: En “La Casada Infiel”, los compara con peces resbaladizos que escapan en el agua y son difíciles de coger.
- Cintura: La parte del cuerpo femenino que desata pasiones.
- Los Pechos: Símbolo de maternidad y de fertilidad. La mutilación de los pechos es un sacrilegio de la fecundidad.
Elementos de la Flora: Belleza, Pasión y Tragedia
- El Lirio: Ligado a la pureza de la Anunciación.
- El Laurel: Consagrado a Apolo y a la victoria. Aparece en “Preciosa y el Aire”.
- El Limón: Símbolo ácido y amargo que representa el momento de marchar a Sevilla.
- El Mimbre: Simboliza la nobleza, la protección y también el poder.
- La Rosa: Símbolo del amor, de la pasión y de la regeneración. Las rosas morenas son rosas manchadas de sangre, imagen del dolor y de la muerte.
El Gitano: Alma de Andalucía y Tragedia
El gitano es símbolo del hombre primitivo, de la fuerza elemental de la naturaleza, de lo antisocial. Expresa el alma de Andalucía y, también, la tragedia y el dolor. Evoca el mundo de la superstición y de la raza.
El Pozo: Abismo de Pasión Frustrada
El pozo es símbolo de la pasión frustrada y de la muerte.