El género dramático constituye uno de los principales géneros literarios. Presenta uno o varios conflictos a través de uno o varios personajes que desarrollan sobre la escena el argumento, gracias, fundamentalmente, al diálogo. Se presenta ante los posibles receptores mediante la actuación de los actores sobre un escenario delante del público. Las obras teatrales están concebidas para ser representadas, y cualquier lectura personal no es más que un ejercicio incompleto, ya que hemos de prescindir de elementos tales como la música, la iluminación, el movimiento de los actores, etc.
Características del Género Dramático
- Los autores dramáticos deben contar una historia en un lapso de tiempo bastante limitado.
- El hilo argumental debe captar la atención del público. El recurso fundamental para conseguirlo consiste en establecer, cada cierto tiempo, un momento culminante o clímax.
- El teatro es una mezcla de recursos lingüísticos y espectaculares, o lo que es lo mismo, el texto literario se suma, como un elemento más, a los elementos escénicos pertinentes para conseguir un espectáculo completo.
- Los personajes han sido concebidos por el autor para ser encarnados por actores.
- El autor queda oculto detrás del argumento y los personajes. Por lo demás, los sentimientos del autor, sus ideas y opiniones se encuentran diluidos en la amalgama de personajes y ambientes que forman una obra de teatro.
Elementos Clave de la Obra Teatral
Acción
Son todos los acontecimientos que suceden en escena; es el argumento que se desarrolla ante nuestros ojos. Este argumento suele estar dividido en actos o partes (también denominados jornadas). La antigua tragedia griega no se dividía en actos, sino en episodios. A partir del teatro romano se generalizó la división en cinco actos, hasta que Lope de Vega redujo la acción a tres. Si dentro de un acto se produce un cambio de espacio, entonces se ha producido un cambio de cuadro, con lo que dentro de un acto puede haber distintos cuadros. Por otra parte, cada vez que un personaje sale de la escena, o bien cuando se incorpora uno nuevo, se produce una nueva escena.
Personajes
Son quienes llevan a cabo la acción. Es difícil que podamos asistir a una caracterización psicológica profunda de todos los personajes, por lo que son analizados con detenimiento los protagonistas. Los personajes se suelen valer de la mímica o los gestos como complemento. Estos gestos suelen obedecer a las acotaciones del autor, aunque en algunas representaciones es el director de escenografía el que dicta los movimientos.
Tensión Dramática
Es la reacción que se produce en el espectador ante los acontecimientos que están ocurriendo en la obra. Los autores buscan el interés del público mediante la inclusión de momentos culminantes al final de cada acto, lo cual contribuye a que se mantenga la atención hasta el desenlace. La tensión dramática pone en juego recursos como el avance rápido de la acción, momentos que van retardando el desenlace, y el denominado anticlímax, cuando el conflicto que presenta la acción llega a un desenlace inesperado o no previsto.
Tiempo
No es fácil el tratamiento del tiempo. En él, se debe desarrollar una acción determinada, que puede durar lo mismo que la representación, o más, por lo que los personajes deberán hacer referencia al tiempo que transcurre, denominado tiempo aludido.
Diálogo
Las conversaciones que los personajes mantienen entre sí hacen que la acción avance. Estas conversaciones se pueden producir entre dos o más personajes. En algún momento, un personaje, apartándose del resto o desviando su mirada, puede hacer un comentario en voz alta, destinado al público, que no es oído por el resto de personajes. Este recurso se denomina aparte. Mediante los apartes los personajes realizan reflexiones en voz alta, hacen comentarios malintencionados o declaran un pensamiento. La finalidad de los apartes es la de informar al público. Por otro lado, uno de los recursos más característicos del teatro es el monólogo: discurso que un personaje, normalmente sobre el escenario, pronuncia a modo de pensamiento o reflexión. El monólogo más famoso de nuestra literatura es el que pronuncia Segismundo en La vida es sueño. Hoy en día el monólogo se ha puesto de moda gracias a las intervenciones de ciertos humoristas.
Acotaciones
Se tratan de aclaraciones que el autor de la obra teatral realiza sobre cómo debe ser el decorado, cómo se tienen que mover los personajes, qué gestos deben hacer, etc.
Elementos Caracterizadores
Para que el argumento de una obra sea creíble, los directores teatrales suelen recurrir a recursos auxiliares que contribuyen al espectáculo: un vestuario acorde con la época, música de fondo o de acompañamiento, iluminación… En el teatro medieval estos recursos eran casi inexistentes, con lo que los espectadores debían utilizar más su imaginación para la contemplación de una obra teatral. Hoy en día, la representación depende, en cuanto a su escenografía, del director de escena que puede concebir un escenario minimalista, es decir, con los mínimos recursos, o bien una representación clásica, esto es, realista.