Federico García Lorca: Trayectoria Teatral y Claves de Simbología
El Teatro Renovador de Preguerra
La producción teatral de Lorca se enmarca dentro del teatro renovador de preguerra. El panorama teatral del primer tercio del siglo XX en España puede resumirse en varias tendencias: el teatro poético, el teatro cómico, la comedia tradicional y, finalmente, el teatro renovador, cultivado por Ramón del Valle-Inclán y Federico García Lorca.
Vida y Contexto de Federico García Lorca
Lorca nace en Fuentevaqueros en 1898. Se trasladó a Madrid y vivió varios años en la Residencia de Estudiantes, donde comenzó con la poesía y la música. Más tarde viajó a Nueva York, donde pudo observar la pobreza, lo que influyó notablemente en sus obras. Cuando volvió a España, fundó la compañía teatral universitaria La Barraca. En 1936, tras estallar la Guerra Civil, se trasladó a Granada, donde fue fusilado.
Como autor teatral, Lorca escribió teatro desde muy joven, aunque se dedicó a él de forma más intensa en sus últimos años. Podemos destacar varias etapas:
Etapas de la Producción Teatral Lorquiana
- Época juvenil: Escribe El maleficio de la mariposa, de espíritu simbolista, en la que se expresa la frustración amorosa, y Mariana Pineda, con la que revitaliza el drama en verso.
- Obras de carácter popular e infantil: Varias piezas breves de guiñol, como El retablillo de don Cristóbal.
- Obras de temática amorosa: En ellas trata la frustración amorosa, aunque aún no poseen rasgos trágicos como en sus piezas posteriores. Destacan La zapatera prodigiosa, Amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín y Doña Rosita la soltera o el lenguaje de las flores.
- Comedias imposibles: Obras que se relacionan con su crisis personal y su encuentro con el Surrealismo. Destacan El público (1930), en la que subyace la acusación hacia la hipocresía e insensibilidad social ante el amor imposible, y Así que pasen cinco años (1931), obra de lucha interior y frustración íntima.
La Trilogía Rural y la Culminación Trágica
Las obras de fuerte contenido trágico suponen la culminación de su producción teatral. En ellas se unen lo local y lo universal, planteando conflictos universales. Son:
- Bodas de sangre (1932): La novia que se escapa con su amante en el día de la boda. En ella se oponen con fuerza el amor y la muerte, la opresión y la libertad.
- Yerma (1934): La tragedia de la mujer que no puede tener hijos.
- La casa de Bernarda Alba: Obra central de este estudio.
La casa de Bernarda Alba presenta rasgos que la separan de las anteriores, pues en ella están ausentes los elementos míticos. No obstante, también comparte elementos esenciales con las otras dos obras, sobre todo en el protagonismo de la mujer y en el hecho de trascender los temas planteados, elevándose a un nivel superior y atemporal.
La Casa de Bernarda Alba: Temas y Simbología
Temas Centrales
- Destino trágico: Adela ha querido rebelarse contra el orden establecido y lo ha pagado con su vida.
- Opresión sobre la mujer y Moral conservadora: Obsesión por la virginidad, la religión y las falsas apariencias por miedo al «qué dirán».
- Clasismo: La sociedad está claramente jerarquizada, lo cual se muestra sobre todo en la relación que mantienen Poncia y Bernarda.
- Autoritarismo: El cruel e irracional despotismo de Bernarda. Su símbolo es el bastón.
- Deseo de libertad: Tema principal. Adela será el máximo exponente de esta manera de pensar. La primera que, mediante pequeñas «hazañas» (como romper el bastón), se convierte en la verdadera víctima de las circunstancias que envuelven a la casa.
- El cumplimiento de las leyes naturales: Las referencias a la naturaleza de índole simbólica están buscadas y medidas.
Simbología en la Obra
- El agua: La sed como referencia al deseo sexual. Se contrastan las referencias al agua estancada/envenenada de los pozos con el agua limpia e infinita del mar.
- Blanco y negro: El blanco representa lo positivo en general (la vida, la libertad, la sexualidad), aunque también las paredes blanquísimas de la casa que se van opacando a través de la historia. Lo negro se refiere a la muerte (Adela muere de noche) y al fanatismo religioso (luto).
- El color verde: Significa la rebeldía y la muerte en Lorca. Lo demuestra mediante el vestido verde que luce Adela y el abanico que usa.
- El calor: Intensifica la tensión dramática y moldea el carácter de los habitantes de las tierras secas frente al de los habitantes de las tierras húmedas.
- El caballo garañón: Es la correlación de Pepe el Romano en el mundo animal y, por lo tanto, un símbolo sexual muy acusado.
- El bastón: Símbolo del poder tiránico de Bernarda. Cuando Adela lo rompe, acaba la tiranía y muestra su rebeldía.
- Los nombres de los personajes: Bernarda (fuerza de oso), Martirio y Angustias son evidentes. Adela (nobleza, aunque también puede proceder del verbo «adelantarse»), Amelia (sin miel) y María Josefa (nombre que evoca la tradición y la locura).
