El Bastón de Bernarda Alba: Símbolo de Autoridad y Represión
El bastón es un elemento central y muy significativo del personaje de Bernarda Alba, pues representa su autoridad inquebrantable y la represión que ejerce sobre sus hijas. El sonido de este bastón es el presagio que tienen las hijas de que su libertad se termina.
Momentos Clave de la Presencia del Bastón
1. El Regreso del Funeral (Acto I)
En el primer acto de la obra, cuando Bernarda Alba regresa del funeral de su segundo esposo, su llegada está marcada por el sonido del bastón golpeando el suelo. Este ruido crea un ambiente tenso y opresivo, indicando el dominio absoluto que Bernarda tiene sobre su familia. Su bastón es un símbolo de su poder y su deseo de mantener a su familia encerrada en la prisión de su autoridad. Es un recordatorio constante de que Bernarda es la figura dominante y que no permitirá ninguna desviación de las normas establecidas.
2. La Confrontación con Adela (Acto III)
En el último acto de la obra, el bastón vuelve a tener un papel importante. En este momento, Adela, la hija más joven, ha mantenido una relación prohibida con Pepe el Romano y finalmente decide rebelarse contra las restricciones impuestas por su madre y la sociedad. Cuando Adela se quita el luto y rompe las normas de vestimenta establecidas, Bernarda la confronta y amenaza con su bastón. Aunque el bastón simboliza la opresión y el control de Bernarda, en este instante también representa la lucha de Adela por la libertad y la autonomía. El bastón se convierte en un símbolo de resistencia y de la tensión entre el deseo de libertad y la opresión impuesta.
Significado Profundo de los Símbolos en la Obra
- Caballo
- Encarna el deseo erótico y la sexualidad. En la obra aparece haciendo referencia a Pepe el Romano, el hombre que revoluciona a dos de las hijas y que les despierta sus instintos más naturales e incontrolables.
- Oveja
- Es un animal que tiene una relación simbólica con Jesucristo y, por ello, en la obra aparece vinculada a Adela, uno de los personajes que termina sacrificándose.
- Perro
- Hace referencia a la sumisión que las mujeres tienen ante los hombres. De hecho, en la pieza teatral presenciamos cómo Pepe llama a Adela como si se tratara de un perro.
- Flores
- Las flores, utilizadas frecuentemente en la literatura, se vinculan con el universo femenino. En la obra de Lorca aparecen flores en la cabeza de María Josefa, una clara referencia al erotismo, la sensualidad y el amor que siente este personaje.
- Agua
- Se presenta como el deseo. En el acto III, Adela tiene una gran sed, pues está ardiendo de pasión por Pepe. Por consiguiente, el río repleto de agua es una referencia a la vida, y Adela muere ahogada por ese río que la arrastra hasta la muerte. En contraste, el pozo simboliza la muerte, ya que representa el agua estancada y putrefacta.
- Color Blanco
- En la obra nos encontramos con paredes blancas y una obsesión por la limpieza. Esto se debe a que el color blanco representa la pureza y la virginidad, elementos que deben preservarse en el interior de esta casa.
- Color Negro
- Contrapuesto al blanco, el negro representa la represión y la muerte. Todos los personajes van de luto, vestidas de negro porque están silenciadas y muertas en vida. Es uno de los símbolos más llamativos y visuales de La casa de Bernarda Alba.
- Luna
- Es el símbolo del erotismo y la pasión, pero también tiene ese toque de oscuridad y muerte que acecha a Adela en todo momento. La luna es uno de los símbolos más frecuentes en la literatura lorquiana.
- Sal
- Desde siempre se ha considerado que el derramamiento de sal es un presagio de la mala suerte. En esta obra, a Adela se le cae la sal, anticipando el desenlace.
- Anillo de Perlas
- Representa el augurio de un triste final.
Posturas Femeninas Opuestas ante la Tiranía de Bernarda
En La casa de Bernarda Alba de Federico García Lorca, se identifican dos posturas opuestas de las mujeres como reacción a la tiranía de Bernarda:
Sumisión y Conformismo
Algunas de las mujeres de la obra, como Martirio y Amelia, se resignan a vivir bajo la tiranía de Bernarda y aceptan su autoridad sin cuestionarla. Estas mujeres se adaptan a las reglas impuestas y obedecen sus órdenes sin protestar. Aunque pueden sentirse infelices o atrapadas, no se atreven a desafiar el poder establecido y se someten a la realidad impuesta por Bernarda.
Rebeldía y Desafío
Por otro lado, hay mujeres que se rebelan y desafían la tiranía de Bernarda. Estas mujeres se resisten activamente a las restricciones impuestas, expresan su frustración y luchan por su libertad individual. Representan una postura de resistencia ante la opresión y buscan romper con las normas sociales y las expectativas impuestas por Bernarda y la sociedad. Adela es el ejemplo más claro de esta postura, aunque su lucha la lleva a un final trágico.
La complejidad de los personajes y sus respuestas a la tiranía de Bernarda es una de las características más destacadas de la obra, convirtiéndola en una exploración profunda de la condición femenina en un entorno opresivo.
El Trágico Desenlace de La Casa de Bernarda Alba
El final de la obra es bastante trágico y sombrío. La historia se desarrolla en la casa de Bernarda Alba, una viuda autoritaria y dominante que mantiene un control estricto sobre sus cinco hijas. A lo largo de la obra, se exploran temas como la represión, la opresión y la lucha por la libertad. Las hijas, encerradas sin poder relacionarse con el mundo exterior, viven en un ambiente lleno de tensiones y rivalidades.
La figura central de la obra es Adela, la hija más joven y rebelde, quien lucha por escapar de las restricciones impuestas por su madre y busca vivir una vida más libre y apasionada. En el desenlace, se revela que Adela ha mantenido una relación amorosa secreta con Pepe el Romano, un hombre que también ha cortejado a sus hermanas.
La noticia desencadena una serie de eventos trágicos. Bernarda, al enterarse de la relación, prohíbe rotundamente a Adela tener contacto con Pepe y planea casar a su hija mayor, Angustias, con él. Adela, desesperada y desafiante, se enfrenta a su madre y defiende su amor.
La tensión alcanza su punto máximo cuando Adela, incapaz de soportar la opresión y el deseo no correspondido, se quita la vida. Su suicidio es descubierto por su familia. Bernarda, intentando ocultar el hecho y guardar las apariencias, exige silencio, afirmando que Adela murió virgen, tal como hizo al comienzo de la obra.
En general, el final de La Casa de Bernarda Alba es impactante y simboliza la lucha entre la represión y el deseo de libertad, con consecuencias trágicas para todos los personajes involucrados.
¿Quién ha Triunfado y Por Qué?
En La Casa de Bernarda Alba, no se puede decir que un personaje en particular haya triunfado, ya que la obra termina de manera trágica y desoladora para todos los personajes involucrados. La opresión y la represión ejercidas por Bernarda Alba sobre sus hijas han llevado a una serie de conflictos internos y situaciones desafortunadas que culminan en la muerte de Adela.
La obra retrata una sociedad en la que las mujeres están atrapadas en un sistema patriarcal y en el que la represión y la obediencia a las normas sociales son predominantes. Ninguno de los personajes logra liberarse de esta opresión y encontrar una verdadera felicidad, lo que subraya el triunfo de la tiranía social y la muerte sobre el deseo individual.