España: Contexto Histórico y Cultural (1939-1970)
Aspectos Políticos
En la inmediata posguerra se produjo una feroz represión por parte de los vencedores. España sufrió el aislamiento internacional, que finalizó en los años 50. Durante los años 60, hasta 1975, el turismo y la emigración supusieron cambios de costumbres y una cierta permisividad. Con la muerte de Franco (1975), se inició la transición a la democracia, la legalización de los partidos políticos, la aprobación de la Constitución (1978) y los primeros estatutos de autonomía.
Aspectos Económicos
Los primeros años de posguerra fueron de racionamiento, hambre y enfermedad. Aunque en los años 50 se produjo una recuperación económica que culminó en el desarrollismo de los años 60. Sin embargo, en 1973 se produjo una crisis económica a nivel mundial que generó altos índices de desempleo, inflación y déficit exterior, y cuyas consecuencias se pudieron estabilizar gracias a los Pactos de la Moncloa.
Ideología y Cultura Oficial
La ideología imperante fue el nacionalcatolicismo: exaltación del pasado heroico, la fe católica y la unidad de la patria. Estos principios fueron vigilados por la censura y divulgados por la propaganda oficial, la prensa y un documental cinematográfico, el NO-DO. Las manifestaciones artísticas en la arquitectura, pintura y la escultura se ceñían al tradicionalismo, sin ninguna veleidad vanguardista. En cuanto a la cultura popular, destacaron la novela rosa, la revista musical, los toros y el fútbol.
Evolución Cultural y Artística
El nivel cultural subió en los años 50, gracias al desarrollo de la universidad, de modo que se introdujeron nuevas tendencias en las artes y aparecieron nuevas editoriales que aportaron traducciones de obras hasta entonces inéditas. Con la muerte de Franco se produjo una recuperación plena de la libertad de expresión.
La Poesía Española del Siglo XX: Un Recorrido Cronológico
Poesía en los Años 30
Poesía centrada en los problemas humanos. Destaca Miguel Hernández, que pasa de una etapa gongorina y difícil a una poesía comprometida durante la Guerra Civil. Su última etapa está compuesta por los poemas escritos en la cárcel, donde murió en 1942. Sus temas principales son el amor, la muerte, la ausencia y el sufrimiento.
Poesía Durante la Guerra Civil
Poesía de combate en ambos bandos.
Tras la guerra, muchos poetas se exiliaron y prosiguieron en sus nuevos destinos su tarea poética, cada uno de forma diferente pero con el tema de España y la angustia como nota común. Algunos de estos poetas, no pertenecientes a la Generación del 27, fueron Emilio Prados, Manuel Altolaguirre y León Felipe.
Poesía en los Años 40: Garcilasismo y Existencialismo
Por una parte, el garcilasismo: una poesía evasiva, tradicional en la forma (soneto) y la religión, como tema privilegiado. Esta poesía se elabora en torno a dos revistas, Escorial y Garcilaso, y destacan poetas fundamentales como Luis Rosales, Leopoldo Panero, Luis Felipe Vivanco y Dionisio Ridruejo. Por otro lado, el existencialismo: el dolor y la angustia del ser humano ante el silencio y abandono de Dios. En esta tendencia hay que recordar un libro fundamental: Hijos de la ira, de Dámaso Alonso, quien, junto a Vicente Aleixandre, representaba la continuidad de la gran poesía del 27 en la dictadura. Entre ambas tendencias hay un vanguardismo minoritario representado por el grupo Cántico (García Baena), el postismo (Carlos Edmundo de Ory, Gloria Fuertes) y el surrealismo (Cirlot).
Poesía en los Años 50: La Poesía Social
Poesía social, crítica con la realidad, denuncia con sencillez expresiva, tono narrativo y lenguaje cotidiano, las injusticias opresivas en la que se vive. Poetas señalados de esta etapa son Gabriel Celaya, que se inició en la poesía existencial y escribe su mejor poesía en los años cincuenta, sintiéndose integrado en la realidad social que le rodea y a la que presta su voz crítica (Las cartas boca arriba, Cantos íberos); Blas de Otero, que pasa de un existencialismo individual (Ángel fieramente humano) a interesarse por las preocupaciones sociales y colectivas (Pido la paz y la palabra); y José Hierro, cuyo modo de hacer poesía se divide en reportajes (lenguaje narrativo, cotidianidad, lenguaje coloquial: Quinta del 42) y alucinaciones (subjetivismo e irracionalismo: Libro de las alucinaciones).
Poesía en los Años 60: La Generación del 68 o Novísimos
Continúa el realismo, pero ahora la vivencia del individuo sirve como motivo de crítica. Mejora la expresión lingüística y retórica, con un lenguaje poético más elaborado. Las características de esta etapa son:
- La importancia de la experiencia y la memoria individual, donde aparecen la infancia y juventud.
- El paso del tiempo y el amor (erotismo) y la amistad.
- La metapoesía (poesía que reflexiona sobre la poesía) aparejada a la intertextualidad.
- La religión entendida como experiencia.
Los poetas de esta etapa son: José Ángel Valente, cuya obra parte de la experiencia personal para llegar a una poesía de fuerte sabor místico; Ángel González, que une la ironía y el humor al desengaño y al paso del tiempo; Jaime Gil de Biedma, cuya obra se contiene en Las personas del verbo, reflexiona sobre el paso del tiempo, la historia reciente de España y la nostalgia. Otros poetas: Francisco Brines y Goytisolo.