La Ilustración en España: Sociedad, Arte y Literatura del Siglo XVIII

Contexto Social y Cultural del Siglo XVIII

La Ilustración es el movimiento intelectual que caracteriza el pensamiento del siglo XVIII, también conocido como el Siglo de las Luces.

Era un movimiento que defendía el poder de la razón y el espíritu crítico, siendo estas las únicas vías de conocimiento.

  • Gran importancia de los estudios científicos.
  • Rechazo a los dogmas religiosos.
  • El progreso conduce a la felicidad del hombre.
  • El deísmo, que promulga un conocimiento de Dios a través de la naturaleza, sin cultos.

En España, las ideas se difunden gracias a las instituciones y al periodismo, aunque es un periodo que llega de forma tardía y lenta, debido a la oposición de la Inquisición.

Sociedad

Se organizaba en clases sociales:

  • Los reyes, que afirmaban su poder frente a la Iglesia.
  • La alta nobleza, que era la clase dominante; su núcleo central era la política.
  • El clero, que tenía gran número de tierras.
  • La burguesía, que experimenta un notable desarrollo.

El pueblo, que no disfruta del progreso debido a la pésima calidad de vida de la que gozaban.

El Arte y la Cultura

  • Las traducciones de libros y la difusión de enseñanzas teológicas, jurídicas, científicas y filosóficas.
  • La divulgación de la ciencia a través de la prensa.
  • La proliferación de museos y bibliotecas.
  • La aparición de instituciones públicas y privadas como la Real Academia Española (1713).
  • La creación de escuelas técnicas.
  • Las agrupaciones destinadas al fomento de la industria.

La estética de la Ilustración es el Neoclasicismo: imitaba las reglas dictadas por la razón, tenía una finalidad didáctica del arte y seguía los modelos grecolatinos.


La Literatura

El Neoclasicismo es la manifestación artística y literaria de la Ilustración, y asume los siguientes principios:

  • La literatura sirve para modificar la sociedad y educar.
  • El arte está guiado por el principio de la razón.
  • La creación está supeditada a las ideas.
  • Los autores se atienen a las normas «del buen gusto», frente a los excesos del Barroco.
  • Verosimilitud en las obras de arte del Neoclasicismo: deben de ser creíbles.
  • Se busca la imitación de los clásicos griegos y latinos.

Los Géneros Literarios

Los géneros siguen siendo los tradicionales, aunque se modifica un factor: todos buscan tener una finalidad didáctica (la lírica, la narrativa y el teatro). Y surge un nuevo género: el ensayo.

La Prosa

La prosa didáctica se impone a la narrativa. Los ilustrados conciben la prosa y la literatura como un medio de difusión de ideas capaz de intervenir en la vida pública. Destacan:

  • El género epistolar: composiciones literarias en prosa o en verso, con forma de carta.
  • Los libros de viaje.
  • La prensa.

Benito Jerónimo Feijoo (1676-1764)

Feijoo fue fraile, ensayista e ilustrado, y máximo intelectual de la primera mitad del siglo XVIII. Su prosa es de carácter divulgativo y crítico; su propósito era llegar al gran público, y su estilo era claro y coloquial. Sus obras a destacar:

  • Teatro crítico universal: primera muestra castellana del género ensayístico.
  • Cartas eruditas y curiosas: pertenece al género epistolar.

Ambas obras tenían intención enciclopédica y tratan temas variados.


José Cadalso (1741-1782)

Cadalso era gran conocedor de la cultura europea del momento.

  • Cartas marruecas: su obra más conocida, es un intercambio de epístolas en la cual se ofrecen tres puntos de vista de la realidad; en ella se realiza una crítica constructiva. Trata temas como: el ideal de un hombre moderno, la defensa del idioma, del patriotismo, las costumbres españolas y la condición humana.
  • Los eruditos a la violeta: es una sátira contra los que fingen erudición.
  • Noches lúgubres: es considerada precursora del Romanticismo.

Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811)

Gaspar Melchor de Jovellanos, cuyo espíritu era reformista e ilustrado, fue el fundador del Real Instituto Asturiano. Su lenguaje era cuidado y culto.

  • Obra política: Memorias en defensa de la Junta Central.
  • Obra económica: Informe en el expediente de Ley Agraria.
  • Obra educativa: Memorias sobre la educación pública.
  • Obra de literatura y cultural: Memorias para el arreglo de la policía de los espectáculos y diversiones públicas, en la cual rechazaba el teatro barroco y defendía un teatro educativo y que deleitara.

La Poesía

En la primera mitad predomina el posbarroquismo; en la segunda, hay varios modos de crear poesía:

  • Neoclásica: trata temas morales, filosóficos y exalta la ciencia.
  • Anacreóntica: destinada a la celebración de los placeres de la vida.
  • Didáctica: intención satírica.

Juan Meléndez Valdés (1754-1817)

Meléndez Valdés fue uno de los poetas más destacados del siglo XVIII. Su poesía era moral, filosófica y plasmaba las preocupaciones e ideales de la Ilustración. La mendiguez fue uno de sus poemas.


Los Fabulistas

Tomás Iriarte (1750-1791) y Félix María de Samaniego (1745-1801) son los autores de las dos colecciones de fábulas más destacadas del siglo.

  • Iriarte y sus fábulas literarias: «El burro flautista» o «La mona».
  • Samaniego y sus fábulas en versos castellanos: «La cigarra y la hormiga» o «La lechera».

El Teatro Neoclásico

Trataron de combatir el teatro popular, el que le gustaba al pueblo, ya que este no se ajustaba ni a su propósito estético ni político. Consideraban que este era el mejor medio para la educación y la propaganda política.

  • Respeto a las reglas clásicas: se propone un respeto riguroso de las unidades de lugar, tiempo y acción, y una tajante separación de géneros.
  • Verosimilitud: buscaban acciones creíbles.
  • Finalidad didáctica: pretende ser un modo de enseñanza de moralidad y decencia del cual obtener una útil lección.

La Comedia Neoclásica

Leandro Fernández de Moratín (1760-1828) fue el dramaturgo más representativo, cuyo mérito fue lograr adaptar la comedia a los ideales ilustrados y alcanzar el favor del público. Sus temas principales son: matrimonios concertados, educación de los jóvenes y defectos de la comedia.

  • La comedia nueva o El Café: crítica de las comedias posbarrocas.
  • El sí de las niñas: trata el tema de los matrimonios concertados y la educación de los jóvenes.

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