Lenguaje, Espacio y Estructura en la Obra de Lorca

Texto Dramático en La casa de Bernarda Alba

En La casa de Bernarda Alba aparecen todas las variedades del lenguaje teatral:

Las Acotaciones

Proporcionan una información esencial acerca de la puesta en escena y de la intención comunicativa del personaje. En el caso de Lorca son escuetas, pero vivas y expresivas. Son frecuentes las omisiones de palabras, la aparición de una sola forma verbal y las frases nominales: «Siempre con crueldad», «con odio», «fuerte», «con sarcasmo», etc.

Observamos una gran variedad de acotaciones y con una gran riqueza de matices:

  • Indicaciones espaciales y ambientales: lugar y decorados.
  • Indicaciones sobre el vestuario y los objetos caracterizadores de los personajes: vestidos negros.

Los Apartes

Son las palabras que dice un personaje, pero que no son percibidas por su interlocutor, aunque sí van dirigidas a que las escuche el público. En esta obra apenas se emplean. Lorca se sirve de ellos en dos ocasiones: en la visita de las mujeres al duelo, que insultan a Bernarda sin que esta se aperciba.

Los Monólogos

Son intervenciones en las que el personaje no se dirige a nadie específicamente. Aquí solamente hay uno, el de la criada al principio de la obra.

Tratamiento del Espacio y Técnica Dramática

Las características del escenario del primer acto están muy bien detalladas en la acotación. Destaca la blancura de la habitación interior como expresión de un mundo de apariencias.

«Sus muros gruesos» evitan que las cosas de dentro puedan salir al exterior.

El segundo acto presenta menos detalles que la acotación del primero. Tan solo se dice que se trata de otra habitación del interior, pero no blanquísima sino blanca.

El tercer acto se sitúa en el patio interior de la casa de Bernarda Alba. Apenas hay luz, tan solo un tenue fulgor.

Actitud del Autor

Es la postura que adopta el autor del texto sobre el tema que aborda (los hechos e ideas que expresa), el punto de vista con el que lo enfoca y cómo se lo plantea al lector. La actitud está relacionada con la intención con la que el autor concibe el texto.

Objetividad

La exposición de hechos se realiza de forma imparcial; solamente se presentan los datos o se dan a conocer los acontecimientos. Al autor le interesa mostrar, analizar o desarrollar esa realidad externa sin implicarse. Busca la imparcialidad, la reflexión mesurada, contemplar desde fuera.

Subjetividad

Manifestación de la opinión personal, del punto de vista, impresiones personales o sentimientos y emociones del emisor, esto es, el autor se implica afectivamente en lo que dice y está interesado en transmitir sus impresiones o en expresar sus opiniones.

Intencionalidad

¿Qué pretende el autor y con qué fin?

Siempre se escribe algo por algún motivo y con una finalidad. Este puede ser: informar, instruir, contar, explicar, convencer, persuadir, reflexionar, disuadir, influir, refutar, advertir, reclamar, emocionar, exhortar, pedir, rogar, manifestarse literariamente, entretener, mostrar su opinión.

Rasgos Lingüísticos de la Intencionalidad

  • Plano fónico: Entonación exhortativa o interrogativa.
  • Plano morfosintáctico:
    • Deícticos personales (uso de la 2ª persona y 1ª persona plural).
    • Vocativos.
    • Perífrasis modales.
  • Plano léxico-semántico:
    • Léxico connotativo.
    • Expresiones valorativas.
    • Cambio de registro lingüístico.
    • Figuras o recursos literarios: comparaciones, metáforas.

Estructura de la Obra

Estructura Externa

La obra presenta la estructura clásica en tres actos (en los que se observa una progresiva intensificación dramática) que se corresponden con el esquema tradicional de presentación, nudo y desenlace.

  • El primer acto corresponde al planteamiento: se presentan los personajes y su situación.
  • El segundo acto avanza en la tensión entre la represión y la libertad, que culmina con la confesión de Adela.
  • En el último acto se intensifican las pasiones de los personajes y se produce el dramático desenlace, que aporta a la obra una estructura circular, puesto que termina igual que empezó: con una muerte en la familia y el anuncio de un largo luto.

Estructura Interna

El rasgo más característico de la estructura es su carácter cíclico, su estructura repetitiva, con abundantes paralelismos semánticos y de situaciones. Dentro de cada acto, se suceden distintas escenas que alternan situaciones de calma y tensión que va intensificándose, de forma que la escena final de cada acto es de una gran violencia.

A su vez, la tensión final de cada acto se va intensificando, de forma que la escena final del segundo acto es más violenta que la del primero, y la escena final del tercero (el suicidio de Adela) es también la de mayor violencia de toda la obra.

Cada acto ofrece el mismo movimiento interno: (a) calma inicial, (b) sucesión de conflictos.

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