Características Fundamentales de la Novela Realista
- Es un movimiento literario de origen burgués, impregnado de un afán de renovación y progreso. Sus autores son ciudadanos comprometidos con la sociedad en la que viven, cuyos problemas aspiran a reflejar en sus novelas.
- El relato se centra en la realidad contemporánea, mostrando lo vulgar y cotidiano, lo popular, la vida y las costumbres de las personas: lo que sucede en la calle, lo que se habla en el mercado, etc. Los protagonistas de estas novelas no son héroes idealizados, sino gente sencilla extraída de la realidad.
- Predomina el narrador en tercera persona, generalmente omnisciente, que adopta un punto de vista externo sobre la realidad. Este narrador conoce todo sobre los personajes (pensamientos, sentimientos) y dosifica la información que ofrece al lector.
- Afán de objetividad: el novelista aspira a ser un cronista de la realidad, mostrándola tal como es, sin idealizaciones. Para ello, se documenta exhaustivamente sobre el entorno y los temas que trata.
- Preferencia por el detallismo y la descripción minuciosa, lo que se traduce en largos pasajes descriptivos de ambientes, personajes y costumbres.
- Se realiza un trabajo muy importante sobre el lenguaje, buscando la adecuación entre el estilo y el tema tratado, así como la verosimilitud en los diálogos, que reflejan el habla de los distintos grupos sociales.
- Es frecuente el uso de la novela como vehículo para la crítica social o para defender una tesis particular. De ahí surgen las novelas de tesis, en las que el autor se propone defender una idea preconcebida, a menudo descalificando la postura contraria.
El Naturalismo: Una Derivación del Realismo
Émile Zola: Padre del Naturalismo
El Naturalismo es el intento de llevar a sus últimas consecuencias los principios del Realismo. Su principal impulsor y teórico fue el escritor francés Émile Zola. Este movimiento intenta retratar la realidad aplicando un método científico, basándose en la observación rigurosa y la experimentación (trasladada al ámbito de la ficción).
La conclusión fundamental a la que llegan los naturalistas es que el ser humano es pura materia y carece de libertad de actuación, ya que su existencia está determinada por la herencia genética y por las circunstancias sociales en las que se desenvuelve (determinismo). Aunque el ser humano crea poseer voluntad y libre albedrío, su comportamiento estaría condicionado por estos factores. Por ello, las novelas naturalistas suelen estar pobladas de personajes marginales, tarados o víctimas de su entorno, como criminales, alcohólicos, prostitutas, etc., a través de los cuales se exploran las lacras sociales.
Exponentes y Obras Clave del Realismo y Naturalismo Español
Benito Pérez Galdós: El Cronista de la Realidad Española
Doña Perfecta
Pepe Rey, un joven ingeniero con ideas progresistas, viaja al pueblo de Orbajosa con la intención de casarse con su prima Rosario, un matrimonio concertado por su padre y la madre de Rosario, Doña Perfecta. Cuando Pepe llega al pueblo, percibe un ambiente opresivo y cerrado. Las personas del lugar se rigen por un pensamiento tradicionalista y fervorosamente religioso, en marcado contraste con las ideas modernas, abiertas y científicas de Pepe. Esto provoca inevitables choques y conflictos entre el ingeniero y los habitantes del pueblo, especialmente con la influyente Doña Perfecta.
Con el tiempo, la comunidad de Orbajosa empieza a ver a Pepe Rey como una amenaza debido a su forma de pensar. Rosario, quien inicialmente siente afecto por él, se ve presionada por su madre y el entorno social. La situación se tensa hasta tal punto que desemboca en tragedia: Pepe es asesinado cuando intenta escapar con Rosario para vivir su amor lejos de la opresión del pueblo.
Leopoldo Alas, Clarín (1852-1901): La Crítica Social en Vetusta
La Regenta
La Regenta narra la historia de Ana Ozores, una mujer joven, hermosa e inteligente, casada con Don Víctor Quintanar, un hombre mucho mayor que ella y antiguo regente de la Audiencia de Vetusta (ciudad ficticia que representa a Oviedo). Ana vive sumida en el aburrimiento, la frustración y la tristeza debido a la monotonía de su vida provinciana y a un matrimonio carente de amor y pasión.
En Vetusta, Ana conoce a Don Fermín de Pas, el Magistral de la catedral, un sacerdote ambicioso, influyente y su confesor. Él se vuelve una figura cercana a Ana, ejerciendo inicialmente como su guía espiritual, aunque sus sentimientos hacia ella se vuelven más complejos.
También entra en escena Don Álvaro Mesía, el donjuán local, un hombre apuesto y mujeriego que se propone seducir a Ana. Aunque ella se resiste al principio, la soledad y el anhelo de afecto la llevan finalmente a caer en sus brazos, buscando el amor y la pasión que le faltan.
Estructura de La Regenta
- La primera parte transcurre en solo tres días. Durante este breve lapso, se realiza una descripción exhaustiva de la ciudad de Vetusta y se presenta en profundidad a los personajes principales, especialmente a Ana Ozores y Fermín de Pas, explorando sus psicologías y circunstancias.
- La segunda parte abarca un período de tres años. La trama avanza con mayor celeridad, desarrollando los conflictos planteados. Finalmente, Ana cede a la seducción de Álvaro Mesía. Fermín de Pas, al descubrir la relación y ver frustradas sus propias aspiraciones (más ambiguas y posesivas que puramente espirituales) hacia Ana, se siente profundamente traicionado y contribuye al trágico desenlace.
Emilia Pardo Bazán (1851-1921): Introductora del Naturalismo en España
Los Pazos de Ulloa
La novela se centra en Don Julián Álvarez, un sacerdote joven e íntegro, que llega a los Pazos de Ulloa, una decadente y salvaje propiedad rural gallega. Su propósito es ejercer como capellán y administrador, con la intención de imponer orden y mejorar las condiciones de vida de sus embrutecidos habitantes.
En los Pazos reside Don Pedro Moscoso, el marqués de Ulloa, un hombre rudo, ignorante y déspota, que vive amancebado con Sabel, una de las sirvientas, con quien tiene un hijo bastardo, Perucho. Siguiendo el consejo de Don Julián, que busca regenerar la estirpe y el patrimonio, Don Pedro decide contraer matrimonio con una mujer de su clase. Elige a su prima Nucha, una joven delicada, piadosa y de carácter apacible, educada en la ciudad.
Inicialmente, la llegada de Nucha y la influencia de Don Julián parecen traer una leve mejora a los Pazos. Sin embargo, la situación se deteriora cuando Nucha da a luz a una niña, Manuela (y no al varón heredero que Don Pedro anhelaba). Decepcionado y resentido, el marqués retoma abiertamente su relación con Sabel, desprecia a su esposa y se muestra cada vez más violento. El ambiente de los Pazos se vuelve irrespirable, dominado por la brutalidad de Don Pedro y las intrigas del capataz, Primitivo (padre de Sabel).
El desenlace es trágico: Primitivo es asesinado en oscuras circunstancias; Nucha, consumida por la tristeza y el maltrato, fallece prematuramente; y Don Julián, fracasado en su misión regeneradora, abandona los Pazos, desolado. Años después, en una breve visita, constata con amargura que Perucho, el hijo bastardo de Sabel, es el protegido del marqués y futuro heredero de facto, mientras que Manolita, la hija legítima de Nucha, vive relegada y en condiciones precarias, simbolizando el triunfo de la barbarie y las leyes de la naturaleza sobre la civilización y la moral.