Tendencias Poéticas de la Generación del 27: Estilos, Autores y Obras

La Poesía de la Generación del 27: Tendencias, Autores y Obras Destacadas

A la vista de la evolución cronológica de la Generación del 27, varias tendencias se suceden en los primeros años de la andadura poética de los miembros de este grupo: vanguardismo, purismo, neopopularismo y clasicismo.

Poesía Vanguardista

Tras unos comienzos titubeantes en los que intentan desligarse de los ropajes modernistas, estos jóvenes poetas se sienten atraídos por los movimientos de vanguardia (especialmente por el Ultraísmo y el Creacionismo). Llegan a colaborar en revistas como Grecia (1918) y Ultra (1921), y en sus poemas muestran un gran interés por las metáforas insólitas, el verso libre, la técnica del caligrama y las asociaciones irracionales. Respecto a la temática, optan por el culto a las grandes urbes y el entusiasmo por los inventos del mundo moderno (máquina de escribir, el teléfono, el automóvil o la bombilla eléctrica).

En esta tendencia podemos encuadrar los siguientes libros y autores:

  • Imagen (1922), Limbo y Manual de espumas (1924) de Gerardo Diego.
  • Cal y canto (1929) de Rafael Alberti.
  • Seguro azar (1929) de Pedro Salinas.

Poesía Pura

A partir de 1926 disminuye su entusiasmo por las vanguardias y encaminan su quehacer literario hacia la poesía pura, hermética, desprovista de toda anécdota y desvinculada de lo sentimental y humano. Sus poemas, influidos por Juan Ramón Jiménez, tienen un tono intelectual con abundantes paradojas y metáforas, aparentemente sencillos, pero fruto de una exigente labor selectiva. Respecto a la temática, optan por poemas donde los sentimientos se subordinen a la inteligencia.

En esta tendencia podemos encuadrar los siguientes libros y autores:

  • Cántico (1928) de Jorge Guillén.
  • Presagios (1923) de Pedro Salinas.

Poesía Neopopular

Posteriormente inician un incipiente proceso de rehumanización y se desvían hacia una variante de la poesía pura anterior, pues se asimila la vertiente culta de la lírica popular y de autores como Lope de Vega. Componen poemas breves, marcados por el tono coloquial, las repeticiones y los estribillos. Respecto a la temática, optan por temas humanos como el amor y la muerte, a través de formas métricas tradicionales (romances, coplas y sonetos).

En esta tendencia podemos encuadrar los siguientes libros y autores:

  • Marinero en tierra (1924) de Rafael Alberti.
  • Poemas puros, poemillas de la ciudad (1921) de Dámaso Alonso.
  • Canciones (1927), Poema del cante jondo (1931) y Romancero gitano (1928) de Federico García Lorca.

Federico García Lorca y la Poesía Neopopular

Federico García Lorca es una figura clave en esta tendencia. Sus obras más representativas en este estilo son:

  • Canciones (1927)
  • Poema del cante jondo (1931)
  • Romancero gitano (1928)
Detalle de Obras de Lorca
Canciones (1927)

Destacan las canciones infantiles y el tono trágico de los temas y símbolos lorquianos; además, se incorporan cancioncillas del folclore popular.

Poema del cante jondo (1931)

Cantes flamencos como la soleá, la seguiriya o la petenera expresan temas de amor y muerte ambientados en una Andalucía trágica y mítica.

Romancero gitano (1928)

Es la obra poética más conocida de Lorca. Lejos de todo folclorismo, elige el romance como vehículo lírico, narrativo e incluso dramático, pero también metáforas vanguardistas y figuras clásicas; todo ello para llegar a su objetivo: el mundo de los gitanos andaluces marcados por un destino trágico. Lorca hacía protagonistas a grupos marginales como gitanos.

Características de la Poesía de Lorca
Admiración por la poesía popular:
  • Predilección métrica por los romances (versos octosílabos con rima asonante en los pares y sueltos los impares).
  • Comienzo in media res.
  • Los saltos temporales.
  • La alternancia de la narración con el diálogo sin verbos dicendi.
  • Empleo de estribillos.
  • Poemas breves.
  • Repeticiones.
Combinación de la tradición popular y culta:
  • Imitando la poesía de Góngora mediante comparaciones y metáforas.
  • Metáforas muy atrevidas a semejanza de las vanguardias.
  • Utilización de símbolos impulsados por el Modernismo.
  • Sonetos, versos endecasílabos, alejandrinos…
Referencias al contenido:
  • Preferencia por personajes oprimidos: gitanos, etc.
  • El destino trágico y la muerte.
Símbolos lorquianos:
  • El arma blanca, cuchillo, navaja o puñal: se relaciona con el instrumento de sacrificio en las religiones arcaicas; aquí remite a muerte, venganza, cólera.
  • El agua: si fluye simboliza fecundidad y vida, como el resto de los elementos naturales según la mitología universal (tierra, fuego, luz, aire); si está estancada o en un pozo, se relaciona con la esterilidad y la muerte.
  • El caballo: es símbolo de vida, fuerza, virilidad, erotismo; a veces conlleva malos presagios y se relaciona con la muerte o con el fuego como elemento destructor.
  • La luna, el lirio, el nardo: se identifican con la muerte. La luna tiene un carácter maléfico y fatídico, es el símbolo de una mujer dadora de vida y de muerte, y se relaciona, además, con sus fases. En ocasiones, la luna simboliza también esterilidad o fecundidad.
  • La sangre: además de la connotación de vida y de su plasticidad como imagen, implica sufrimiento y muerte.
  • La tierra: es símbolo de fecundidad.
  • La sed, el calor: se identifican con el deseo.
  • El color blanco: se asocia con la pureza.
  • El bastón: representa el despotismo y la intransigencia.

Poesía Clasicista (Neobarroca o Neogongorina)

De forma paralela, estas dos últimas tendencias (poesía pura y neopopularismo) se ven impregnadas de un clasicismo formal perceptible en el esmero con que algunos integrantes de esta generación imitan las formas métricas consagradas por nuestra tradición literaria de los Siglos de Oro (Garcilaso de la Vega, San Juan de la Cruz, Lope de Vega y, por supuesto, la exuberancia y brillantez del lenguaje de Luis de Góngora). Este estilo lo podemos percibir en algunos poemas neopopularistas de obras de Rafael Alberti y Federico García Lorca, donde irrumpen con frecuencia metáforas de raíz gongorina junto a audaces imágenes vanguardistas.

En esta tendencia podemos encuadrar varios poemas de los siguientes libros y autores que ya mencionamos en las corrientes anteriores:

  • Marinero en tierra (1924) de Rafael Alberti.
  • Canciones (1927), Poema del cante jondo (1931), Romancero gitano (1928) de Federico García Lorca.

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