Renovación Poética Española: Modernismo, Generación del 27 y la Trayectoria de Miguel Hernández

La Poesía Española desde Principios del Siglo XX hasta Miguel Hernández

A finales del siglo XIX, la poesía lírica española se encontraba estancada entre el Romanticismo más tópico y el Realismo de la poesía de Campoamor. Solo el posromántico Bécquer aportaba modernidad y calidad. Mientras tanto, en Francia triunfaba una poesía novedosa.

1. Renovación de la poesía del XX: Modernismo, Juan R. Jiménez y Antonio Machado

El Modernismo y la Edad de Plata

El Modernismo llega a España en 1888 con la publicación de Azul… de Rubén Darío, iniciando la renovación de la lírica española. Esta renovación, caracterizada por el verso libre, el simbolismo y nuevos metros (eneasílabo y alejandrino), culminará con la Generación del 27, protagonista de la Edad de Plata o Segunda Edad de Oro.

El Modernismo en España comienza con poetas como los hermanos Machado, Juan Ramón Jiménez y, en prosa poética, Valle-Inclán con sus Sonatas. Sin embargo, la crisis del 98 determinará diferentes rumbos:

  • Juan Ramón Jiménez se decantará por la ‘poesía desnuda’.
  • Valle-Inclán evolucionará hacia el esperpento.
  • Antonio Machado se centrará en temas de la ‘Generación del 98’, como la España de “charanga y pandereta”.

Esta temática machadiana resonará en la poesía combativa de Miguel Hernández en obras como Viento del pueblo (1937). Hernández, por su parte, se iniciará en el modernismo en poemas como “Balada de la juventud”. El auténtico intimismo machadiano se percibe en Cancionero y romancero de ausencias (1938-1941).

Novecentismo, Vanguardias y Poesía Pura

De la “deshumanización del arte” promovida por el Novecentismo surgieron dos caminos que se unieron a partir de la segunda década del siglo XX:

  1. Las Vanguardias: Corrientes poéticas que rompen la estética anterior. En España estuvieron alentadas por Ramón Gómez de la Serna, creador de la greguería. Su influencia es evidente en Perito en lunas (1933) de Miguel Hernández.
  2. La ‘Poesía Pura’: Tiene en España un maestro, Juan Ramón Jiménez, quien marcará los primeros pasos de los poetas del 27. La aparición en 1916 de Diario de un poeta recién casado será un hito en la superación del Modernismo y el inicio de la ‘poesía pura’, entendida como un medio de conocimiento, de interpretación de la realidad y de creación personal. La poesía es un instinto interpretado por la inteligencia. Podemos ver ecos de la poesía pura en la “Elegía a la muerte de Ramón Sijé” y los seis sonetos desconcertantes de Miguel Hernández.

2. Generación del 27: características generales y principales autores

Fusión de Tradición y Vanguardia

El Grupo poético del 27 marca el inicio de la poesía contemporánea española y se caracteriza por la fusión entre tradición y vanguardia (poesía popular, Siglos de Oro, vanguardias y poesía pura).

Sin embargo, a partir de la crisis de 1929, los poetas evolucionarán hacia una “rehumanización del arte”, manifestándose en el Surrealismo y el rechazo de la ‘poesía pura’. En la década de los treinta comienza lo que Neruda llamará la ‘poesía impura’, manchada de sudor, lágrimas y humanidad. Con la llegada de la Guerra Civil, muchos de los poetas del 27 convierten su ‘poesía impura’ en ‘poesía comprometida’, un compromiso que llevará a muchos al exilio y a Miguel Hernández a la cárcel.

Miguel Hernández: El Hermano Menor del 27

Miguel Hernández (Orihuela, 1910-1942) pertenece formalmente a la ‘Generación del 36’, pero a causa de sus afinidades personales y poéticas con algunos autores del 27, fue considerado su hermano menor. Comenzó su formación con los clásicos, como Garcilaso o Virgilio, reflejado en su obra “Pastoril” (1930).

Durante su adolescencia, conoció a los poetas del 27, quienes influyeron decisivamente en su obra:

  • Jorge Guillén: Se refería a Hernández como “pastor extraordinario” y lo acercó a la poesía pura de Juan Ramón Jiménez con su obra Cántico. Guillén inspiró Perito en lunas (1933), cuyas octavas reales fueron definidas por Gerardo Diego como “acertijos poéticos”.
  • Vicente Aleixandre: Lo introdujo en el tema del amor, las imágenes surrealistas y el uso del verso libre con La destrucción o el amor.
  • Manuel Altolaguirre: Editó los hermosos sonetos de El rayo que no cesa (1936) en su imprenta, que se convirtió en punto de reunión de poetas y artistas.
  • Rafael Alberti: Iba a esta imprenta a leer poesía revolucionaria, que se reflejará en Viento del pueblo (1937), libro del que Emilio Prados hizo una reseña.
  • García Lorca: Animó a Hernández con su primera obra, aunque los modales rústicos y la vanidad del joven poeta terminaron por distanciarlos.

Conclusión

En conclusión, la trayectoria de Miguel Hernández representa la evolución poética de aquellos años. Comparte tendencias con los poetas del 27, se aleja del arte deshumanizado, contribuyó a una poesía social y abrió el camino de la poesía de posguerra.

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