Evolución del Teatro Contemporáneo: Movimientos Europeos y Escena Española de Posguerra

Renovación de la Escena Europea (Después de 1939)

En el siglo XX, proliferaron los movimientos de renovación en las artes y, particularmente, en el teatro. Nunca antes se habían producido tantos cambios: modificación de estilos, incorporación de nuevos elementos y la búsqueda de formas y técnicas innovadoras. En el teatro español, influyeron significativamente importantes autores y directores europeos y americanos.

Teatro Expresionista

El expresionismo fue uno de los movimientos de vanguardia más importantes, muy desarrollado en Alemania, con su etapa de esplendor entre 1910 y 1925. Se caracterizó por:

  • El culto a lo subjetivo y el descontento social.
  • La reclamación de una sociedad más solidaria.
  • Temas preferidos: crítica a la sociedad burguesa, la lucha generacional, la guerra, la esclavitud y la sombra.
  • Recuperación de elementos del teatro medieval, la farsa y el teatro de títeres.

Teatro Épico

Su iniciador fue Bertolt Brecht en los años 20. Es una corriente de teatro político y social, con un carácter didáctico que pretende instruir y entretener, fomentando un espíritu crítico. Sus características incluyen:

  • Los actores se distancian de su personaje.
  • Se evita producir una ilusión de la realidad.
  • La exposición se realiza en una serie de escenas narrativas.

Teatro de la Crueldad

Creado por Antonin Artaud, propone acabar con la supremacía del texto y recuperar un lenguaje integral, en el que se incorporan objetos, gestos, sonidos, luces y colores. En sus obras, se abordan la pobreza y la violencia de manera impactante.

Teatro del Absurdo

Influenciado por el teatro de Eugène Ionesco (como en La cantante calva) y por Samuel Beckett (con Esperando a Godot), esta corriente se basa en la filosofía existencialista. Intenta expresar la angustia y el absurdo de la existencia. Las obras carecen de una intriga tradicional y están diseñadas para la reflexión.

Teatro Experimental

Se caracteriza por la búsqueda de nuevas formas escénicas, concibiendo el teatro como un espectáculo total. Son importantes los elementos visuales y sonoros.

Panorama del Teatro Español de Posguerra

Al finalizar la Guerra Civil, el panorama intelectual español quedó arrasado. Se instauró un régimen autoritario, lo que propició la ausencia de tonos críticos. Se ejercía una estricta censura sobre los textos y obras dramáticas, lo que favoreció el auge de autores de teatro de evasión y conformista. Junto al teatro «visible», coexistía un teatro «soterrado» que apenas lograba mostrarse.

El Teatro de los Años 40 y 50

Durante esta etapa, se observan varias tendencias:

  • Persistencia de la alta comedia en el teatro comercial.
  • Teatro cómico con autores como Enrique Jardiel Poncela y Miguel Mihura.
  • Un teatro grave e inconformista, que comenzó a emerger.

Fechas clave para el teatro inconformista:

  • 1949: Estreno de Historia de una escalera de Antonio Buero Vallejo.
  • 1953: Estreno de Escuadra hacia la muerte de Alfonso Sastre.

A mediados de los años 50, emergió un teatro realista y social, comprometido y crítico, que denunciaba hasta donde la censura lo permitía. Era un teatro de testimonio, y sus autores recurrieron a máscaras formales para burlar la censura, aunque otras obras fueron directamente prohibidas.

Autores Destacados del Periodo

  • Jacinto Benavente: Autor aburguesado que creaba un teatro para la élite adinerada, caracterizado por su finura y refinamiento, que evitaba la reflexión crítica. Ejemplo: Los intereses creados.
  • José María Pemán: Autor de teatro de humor. Ejemplo: La coqueta y don Simón.
  • Joaquín Calvo Sotelo: Ejemplo: Micaela.
  • Juan Ignacio Luca de Tena: Ejemplo: ¿Dónde vas, Alfonso XII?
  • José López Rubio: Ejemplo: Celos del aire.
  • Enrique Jardiel Poncela: Se propuso renovar la comedia, rompiendo con la tradición. Reivindicó un teatro inverosímil, absurdo y fantástico, opuesto al realista y burgués, a menudo con un enfoque en el tema amoroso. Obras destacadas: Tú y yo somos tres, Los ladrones somos gente honrada.
  • Miguel Mihura: Cultivó el teatro del absurdo, caracterizado por la parodia y la caricatura. Obras representativas: Tres sombreros de copa, Ni pobre ni rico, sino todo lo contrario, Melocotón en almíbar.

El Teatro Realista: Buero Vallejo y Alfonso Sastre

Antonio Buero Vallejo y Alfonso Sastre se opusieron firmemente al «teatro de la apariencia», aquel que vivía de espaldas a los graves problemas de la sociedad española. En sus obras, expusieron esa realidad que nadie quería mencionar en público.

Antonio Buero Vallejo

Nacido en Guadalajara, Buero Vallejo, de ideas republicanas, fue detenido en 1939 y condenado a muerte, pena que fue conmutada por cadena perpetua. Finalmente, consiguió la libertad condicional. Recibió el Premio Lope de Vega y el Premio Cervantes, siendo considerado el dramaturgo de mayor interés del teatro de posguerra. Preocupado por temas humanos de tipo existencial y social, su género favorito es la tragedia. Su teatro se fundamenta en la búsqueda de la verdad, la libertad y la esperanza. Su extensa obra se divide en tres etapas:

  • Primera etapa (realista): Se centra en la realidad contemporánea, con tiempo real, lugares concretos y orden cronológico. Incorpora elementos innovadores. Obras: Historia de una escalera (1949), En la ardiente oscuridad, Hoy es fiesta.
  • Segunda etapa (reflexión histórica): Aborda temas históricos para reflexionar sobre el presente, logrando burlar la censura y conectar con el público. Es un «teatro de la posibilidad». Se caracteriza por la discontinuidad temporal y escenarios abstractos, a menudo explorando el destino del pueblo en una sociedad injusta. El tragaluz es considerada una obra de transición. Obras: Un soñador para un pueblo, Las meninas, El concierto de San Ovidio.
  • Tercera etapa (subjetiva): Utiliza el punto de vista subjetivo, a menudo a través de personajes que padecen una limitación física o psíquica. Aunque algunos críticos señalan un cierto desgaste temático, obras como La fundación son representativas.

Alfonso Sastre

Nacido en Madrid, estudió Filosofía y Letras y desarrolló una intensa actividad teatral. Su extensa producción teatral se divide en tres etapas:

  • Primera época (desde 1945): Se caracteriza por dramas de frustración y la imposibilidad humana. Los personajes a menudo existen al margen de la historia, y se exploran formas experimentales y vanguardistas. Obras: Cargamento de sueños, Uranio 235.
  • Segunda época (desde 1950): Se enfoca en la denuncia y el cambio social. Sus obras reflejan un humanismo socialista, presentando dramas duros y de «posibilidad» con una clara perspectiva social. Obras: Escuadra hacia la muerte, El pan de todos, Muerte en el barrio.
  • Tercera época (desde 1962): Abandona el realismo para adoptar un modo irónico y distanciador, introduciendo elementos narrativos. Obras: La sangre y la ceniza, El banquete.

Otros Autores Realistas y sus Características

Además de Buero Vallejo y Sastre, otros autores importantes del realismo teatral español incluyen:

  • José Martín Recuerda: Los salvajes en Puente San Gil.
  • Lauro Olmo: La camisa.
  • Carlos Muñiz: El tintero.
  • José María Rodríguez Méndez: Los incidentes de la Moncloa.

Las características generales de este teatro realista son:

  • Temas: Injusticia social, explotación del ser humano, lucha por las clases más desfavorecidas, intolerancia y violencia.
  • Lenguaje: Violento, directo, con un tono de amargura y desesperación.
  • Estilo: Uso frecuente de la farsa y el sainete.
  • Personajes: Protagonistas caracterizados como víctimas.
  • Postura: Rechazo del teatro de vanguardia y del absurdo.

El Teatro Experimental de los Años 60 y 70

(Este apartado está incompleto en el documento original.)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *