Perífrasis Verbales
Concepto
Llamamos perífrasis verbal a la unión de un verbo auxiliar más un infinitivo, un gerundio o un participio.
- El verbo auxiliar, que ha perdido autonomía, es el que aporta las desinencias verbales.
- El derivado verbal (infinitivo, gerundio o participio) es el que aporta la carga semántica y es el responsable de la combinatoria sintáctica.
En un ejemplo como “el jardinero suele podar frutales”, el auxiliar es “suele” (carece de independencia: *“el jardinero suele”). El infinitivo “podar” selecciona el tipo de complemento directo (no decimos *podar la hierba, *podar un hierro…).
Identificación
Puede haber combinaciones de verbo y derivado que son perífrasis (suele podar los frutales) y combinaciones de verbo y derivado que no lo son (Quiere podar los frutales). ¿Cómo diferenciar con criterios formales las unas de las otras?
Hay un dato importante que determina las posibles diferencias: el verbo y el derivado de una perífrasis forman una unidad funcional, es decir, no son independientes sintácticamente, y por ello el derivado:
- no es conmutable por otros segmentos (*suele que pode los frutales)
- no acepta la sustitución por un pronombre (*lo suele)
- no puede tener un sujeto cuya referencia no coincida con el de la forma personal (*yo solía Armando hablar de ti).
Tipos de Perífrasis
Las perífrasis pueden clasificarse según el derivado en tres grandes grupos: perífrasis de infinitivo, perífrasis de gerundio y perífrasis de participio. Lo más habitual, no obstante, es clasificarlas por su contenido.
- Perífrasis perfectivas (indican el término de una acción): dejar de + infinitivo, llegar a + infinitivo (dejo de cantar)
- Perífrasis incoativas (indican el principio de una acción): ir a + infinitivo, empezar a + infinitivo, comenzar a + infinitivo, echarse a + infinitivo, ponerse a + infinitivo (echarse a andar, ponerse a pintar)
- Perífrasis iterativas (indican una acción repetida): soler + infinitivo, volver a + infinitivo (suele gritar)
- Perífrasis durativas (indican la acción en su transcurso): andar + gerundio, ir + gerundio, llevar + gerundio, estar + gerundio (va diciendo mentiras)
- Perífrasis obligativas (indican obligación): tener que + infinitivo, haber de + infinitivo, deber de + infinitivo, haber que + infinitivo (debe estudiar un poco más)
- Perífrasis que indican posibilidad o probabilidad: poder + infinitivo, deber de + infinitivo (deben de ser las 6)
- Perífrasis aproximativas: venir a + infinitivo, venir + gerundio (viene a medir lo mismo que tú)
La Coordinación y los Conectores
Concepto de Coordinación
La coordinación es una relación sintáctica que se establece entre dos o más términos capacitados cada uno de ellos para desempeñar la función que realizan de forma conjunta.
Los segmentos coordinados:
- han de pertenecer a la misma categoría funcional
- han de realizar la misma función sintáctica.
Conjunciones y Conectores Semánticos
Las conjunciones de coordinación son conectores formales, nexos que funcionan como índices de coordinación. Su número es bastante limitado. Se clasifican de acuerdo con su significado (copulativas, disyuntivas, adversativas…).
La lengua tiene otro tipo de conectores (además, sin embargo, no obstante, por consiguiente, así pues…) que no son conjunciones o nexos formales, pero que especifican los valores y matices de contenido que intervienen en la relación de coordinación (era muy poco puntual, sin embargo, ese día llegó a tiempo; hemos llenado demasiado la caja, así pues, necesitaremos a alguien que nos ayude). Los denominamos conectores semánticos o conectores de discurso. Veamos algunos de sus rasgos:
Conjunciones o conectores formales:
- unen segmentos homogéneos
- van interpuestos (es rico y generoso)
- carecen de movilidad
- son simples en la forma y suelen ser átonos (y, o, pero, sino)
- no son compatibles con otro conector
- no llevan complementos
- no aparecen entre pausas.
Conectores semánticos o de discurso:
- unen segmentos homogéneos
- no van necesariamente interpuestos (es rico y generoso, sin embargo)
- gozan de cierta movilidad
- son tónicos y, a veces, complejos (sin embargo, no obstante, por lo tanto)
- pueden coexistir con las conjunciones
- algunos pueden llevar complementos
- aparecen entre pausas.
Coordinación Yuxtapuesta
La coordinación sin nexo se denomina yuxtapuesta o parataxis. Desde un punto de vista formal es una coordinación abierta:
- cualquiera de los segmentos que la forman está capacitado para realizar la función que desempeñan de forma conjunta
- cuando hacemos depender de un verbo dos oraciones yuxtapuestas cada uno de los segmentos asume la conjunción “que” (veo que mamá lee, que papá corta el césped)
Tipos de Coordinación
Coordinaciones Copulativas
Constituyen la manifestación más frecuente de las estructuras coordinadas. Sus nexos más representativos son: y, ni.
- Y (se sustituye por “e” ante palabra que comience por el fonema /i/). Es un conector afirmativo, con un valor semántico muy genérico que se aproxima a la adición o suma. Cuando el primer segmento es positivo puede ir seguido de negación: ha sido papá y no yo. Aparece a veces repetido para marcar valores estilísticos (insistencia, énfasis): y se lo dije, y se lo repetí y no me hizo caso.
- Ni es nexo copulativo que presupone negación en el primer segmento y aparece ante todos los demás: no lo saben Ramón, ni mi novio, ni su hermana. Esto implica que la negación afecta a todos los términos coordinados: no conoce a sus tíos ni a sus primos. Antepuesto al verbo enfatiza el significado: ni Ramón ni mi novio ni su hermana lo saben.
Coordinaciones Copulativas Bimembres
Existen estructuras copulativas compuestas solo por dos términos coordinados. Cada uno de ellos viene introducido por uno de los términos de una correlación conjuntiva.
Los casos más conocidos y frecuentes son aquellos que están relacionados formalmente con las comparativas de igualdad (tanto… como, igual… que, lo mismo… que):
- asistieron tanto los jóvenes como los mayores
- revisaron igual el libro que el CD
- por este hotel pasan lo mismo cazadores que turistas.
Coordinaciones Disyuntivas
Utilizan la conjunción o (ante palabras que comienzan por el morfema /o/ se sustituye por u). Son coordinaciones abiertas que pueden constar de más de dos miembros. El nexo suele situarse entre los dos últimos términos de la coordinación:
- podéis venir con un hermano, un familiar o un amigo.
Normalmente las oraciones disyuntivas presentan entidades, propiedades o procesos que no pueden ocurrir de forma simultánea. La repetición de la conjunción aporta mayor realce a este carácter alternativo. Si los términos son dos, el significado es excluyente y se acerca al dilema:
- o vienes o te quedas
- o estás conmigo o estás contra mí.
La conjunción o asume en diferentes contextos sentidos variables:
- aproximación (un color pardo o rojizo; estábamos allí 10 o 12 amigos)
- equivalencia (el almanaque o calendario; don Álvaro o la fuerza del sino).
La conjunción o se une a otros elementos para formar locuciones conjuntivas:
- o sea aporta un valor explicativo (Jorge, o sea, mi vecino).
- o bien acentúa el carácter disyuntivo (o salgo al cine o bien me quedo en casa)
Coordinaciones Distributivas
Vienen introducidas por correlaciones conjuntivas formadas normalmente por segmentos idénticos, generalmente de origen adverbial (bien… bien, ya… ya, sea… sea):
- te puedo recibir bien en mi casa, bien en el despacho
- ya decidas quedarte, ya optes por marcharte, sé consecuente.
Se ha de advertir que el sentido distributivo que aparece en construcciones del tipo unos… unos, aquí… allí, antes… ahora, ayer… hoy, etc. no se realiza mediante conjunciones, sino a través de correlaciones de carácter léxico. Se trata de construcciones coordinadas por yuxtaposición en las que los términos unos, aquí, antes… realizan una función sintáctica:
- antes lloraban, ahora piden, después exigirán
- unos suben, otros bajan.
Estas construcciones admiten la inclusión de una conjunción copulativa (unos suben y otros bajan), hecho que no es posible en las distributivas construidas con nexos formales (*sale bien con amigos y bien con colegas).
Tipos de Coordinación (II)
Coordinaciones Adversativas
Las adversativas son estructuras que coordinan dos enunciados en los que el segundo introduce algún género de oposición o de exclusión a lo que se afirma o se implica en el primero. Se distinguen dos tipos:
- las restrictivas, cuya conjunción más común es pero
- las correctivas que se unen mediante el conector sino.
Adversativas Restrictivas
Son estructuras coordinadas bimembres en las que el segundo segmento niega lo que implica el primero: Luis es alto, pero no juega al baloncesto.
Las adversativas restrictivas realizan dos actos del habla expresados en dos segmentos:
- el primero (Luis es alto) implica un enunciado no expreso (Luis juega al baloncesto)
- el segundo de la coordinación refuta dicha información implícita (Luis no juega al baloncesto).
Existen conectores de discurso que tienen la propiedad de indicar el mismo tipo de relación semántica que pero. Son: sin embargo, no obstante, en cambio, con todo, a pesar de todo, etc. Cuando los conectores adversativos no coexisten con una conjunción (pero, y) los dos segmentos siguen formando una estructura coordinada, pero en este caso por yuxtaposición. El sentido adversativo es manifestado por los conectores: es bajo, sin embargo no tiene complejos.
Adversativas Correctivas
Estas estructuras implican la ejecución de dos actos de habla. Por un lado, refutan la opinión (expresa o tácita) de algún emisor, y por otro corrigen y aportan la solución correcta: A.- Pepe es inteligente; B.- Pepe no es inteligente, sino avispado.
Las adversativas correctivas presentan los siguientes rasgos formales:
- son estructuras coordinadas bimembres
- el conector sino implica la presencia previa de una negación
- la corrección puede efectuarse sobre sintagmas nominales, adjetivos, adverbiales.
- aunque la negación se sitúa normalmente junto al verbo, afecta al término que se corrige.
- la corrección efectuada por sino puede verse apoyada por la presencia de marcadores de discurso que efectúan una corrección. Aunque aportan el mismo valor semántico correctivo no son conjunciones.
Subordinación y Oraciones Subordinadas
Subordinación
Existe subordinación entre dos funciones sintácticas cuando una de ellas (función subordinada) presenta relación de dependencia respecto de otra (función nuclear o núcleo). Por ejemplo, el CD, el CI y el suplemento son funciones subordinadas al núcleo del predicado o núcleo oracional. Por extensión se aplica este concepto al sintagma que contrae una función subordinada. Así, en la oración “sabe la noticia” decimos que “la noticia” es un sintagma subordinado o dependiente de “sabe”.
Cuando la que contrae una función subordinada es una oración, hablamos de oración subordinada. Por consiguiente, denominamos oración subordinada a la oración que desempeña una función que es dependiente de otra función. Por ejemplo, la de CD: sabe (núcleo oracional) que llegaron sus padres (CD).
Funciones Subordinada y Categórica
En el ámbito de la oración existe una relación entre funciones y categorías sintácticas. No toda categoría puede desempeñar cualquier función sintáctica:
- Sujeto, CD, CI, suplemento: sintagma nominal
- Atributo: sintagma nominal o adjetivo
- CC: sintagma nominal con preposición o adverbio
- CN: sintagma adjetivo o adjetivado.
Oraciones Subordinadas y Transposición
Cuando deseamos que un sintagma desempeñe una función que no es propia de su categoría, ha de ser transpuesto. La función sujeto no es propia de los adjetivos. Para que generosos, por ejemplo, pueda ser sujeto de “recibirán recompensa” ha de ser sustantivado por medio del artículo: los generosos recibirán recompensa.
Para que un sintagma nominal como Pedro pueda ser complemento nominal de “el reloj”, ha de ser adjetivado por medio de la preposición: el reloj de Pedro.
Del mismo modo, para que una oración tenga la posibilidad de desempeñar una función subordinada ha de sufrir un proceso de transposición. Tenemos entonces 3 clases de oraciones subordinadas:
- Oraciones sustantivas o sustantivadas. Oraciones que una vez transpuestas a la categoría sintagma nominal, pueden realizar funciones como sujeto, CD, CI, suplemento, etc.
- Oraciones adjetivas o adjetivadas. Oraciones que tras un proceso de adjetivación están capacitadas para contraer funciones adjetivas (CN). Los transpositores más habituales de la adjetivación son los relativos.
- Oraciones adverbiales. Oraciones que se comportan como adverbios.
Oraciones Sustantivas
Características
Se conocen como sustantivas o sustantivadas las oraciones transpuestas que están capacitadas para realizar una función propia de los sintagmas nominales (sujeto, CD, CI…). Toda oración sustantiva consta de 2 partes: el transpositor (generalmente una conjunción) y la base (la oración).
En resumen:
- oración sustantiva equivale a oración que ha sido sustantivada
- toda la oración sustantiva consta de dos componentes: transpositor y oración base
- la oración base es una frase verbal, por el contrario, la oración sustantiva se comporta en conjunto como un sintagma nominal.
Sustantivaciones con la Conjunción «que»
El transpositor más común y usual que tiene la lengua para convertir antiguas oraciones en sintagmas nominales es la conjunción que.
Las oraciones sustantivadas por esta conjunción pueden desempeñar cualquier función nominal:
- Sujeto (no me importa que sean tan jóvenes)
- CD (Pepe sostiene que la vacuna será eficaz)
- CI (no presta mucha atención a que le critiquen)
- Suplemento (se queja de que no le ayudaron)
- CC final (toca el piano para que sus dedos estén ágiles)
- CC de causa (canta tangos porque le salen del alma)
- CC modo (siempre leyó sin que le obligáramos)
- CC tiempo (no le veo desde que íbamos a la escuela)
- Atributo (la condición es que no puedes hablar durante el juego)
- Base de construcciones atributivas bimembres (Demostrado que era inocente, lo liberaron)
Oraciones Sustantivas con «si»
La conjunción si se une a sintagmas verbales para formar oraciones sustantivadas. Introducen valores de incertidumbre o de interrogación.
Las oraciones introducidas por si aparecen fundamentalmente como CD, pero pueden contraer otras funciones nominales:
- CD (ignora si vendrán estas vacaciones)
- Sujeto (no se sabe si transmitirán el partido)
- Suplemento (no se acuerda de si han llamado mis primos).
Interrogativas y Exclamativas Indirectas
Relativos Tónicos
Todas las oraciones interrogativas y exclamativas parciales vienen introducidas por uno de los relativos tónicos, que pueden introducir oraciones independientes o subordinadas. En este último caso, poseen dos funciones: son transpositores y realizan una función dentro de la oración que transponen.
Interrogativas y Exclamativas Indirectas
Son oraciones sustantivas que realizan funciones nominales y se sustituyen y coordinan con nombres y pronombres. La transposición corre a cargo de las conjunciones que, si o de los relativos tónicos: no sé qué me dijo.
Existen interrogativas truncadas por la elipsis de sus segmentos finales. Esto ocurre cuando hay repeticiones: perdí el libro pero no sé dónde.
Las oraciones interrogativas y exclamativas indirectas pueden ser: propias o impropias.
- Propias: aplicamos esta denominación a las secuencias de estilo indirecto que tienen correspondencia con una estructura interrogativa o exclamativa de estilo directo. El transpositor “que” suele venir acompañado de la conjunción si o de un relativo tónico: “dijo: ¿hace sol?” / “dijo que si hacía sol”.
- Impropias: aplicamos esta denominación a las secuencias de estilo indirecto que no tienen correspondencia con una estructura interrogativa o exclamativa de estilo directo. Se diferencian de las indirectas propias por el hecho de que aquí no aparece que ante la conjunción si o los relativos tónicos: “ignora: ¿hace sol?” / “ignora si hace sol”.
Los Relativos
Características Generales de los Relativos
Los relativos son signos de la lengua caracterizados por realizar varias funciones en una oración.
- Son transpositores: contribuyen a la adjetivación de las oraciones.
- Poseen función anafórica, hacen referencia a una expresión previa, su antecedente: en “el coche que compramos”, el coche es antecedente del relativo que. Existen oraciones de relativo sin antecedente expreso: quien bien te quiere te hará llorar.
- Se comportan como sintagmas dentro de la oración que introducen.
Los relativos contraen en la oración subordinada la misma función que desempeñaría su antecedente si se estuviera en su lugar. Así, en “el ordenador que me gusta” el relativo que funciona como sujeto de “me gusta”.
Los relativos presentan entre sí diferencias categoriales, funcionales y semánticas.
- que. Es el relativo más genérico. Es invariable en su forma. Puede venir acompañado por el artículo (el, la, lo, los, las). Sustituye a cualquier sintagma nominal. También está capacitado para funcionar como adjetivo o como adverbio cuando tiene como antecedente a un elemento de dichas categorías.
- cuanto. Indica una cantidad que se corresponde con la expresada por su antecedente (explícito o implícito). Es invariable cuando funciona como adverbio (cuanto sufre). Presenta variación de género y número (cuanto, -a, -os, -as) en sus usos nominales o adjetivos. En cualquiera de sus apariciones es sustituible por artículo + que.
- quien. Sustituye a sustantivos animados. Puede contraer cualquier función nominal. Ofrece variación de número: quién/quienes. Admite ser sustituido por la secuencia artículo + que, lo que explica que muchas relativas con quien se comporten como oraciones sustantivas: quienes (=los que) van a morir te saludan.
- cual. Está capacitado para sustituir a cualquier sintagma nominal. Varía solo en número, pero muestra su concordancia también por medio del artículo que siempre le acompaña.
- donde, cuando, como. Tienen como antecedente a sustantivos que indican, respectivamente, lugar, tiempo o modo. Son invariables y funcionan como CC de la oración que introducen. Cuando carecen de antecedente, encabezan oraciones equivalentes a adverbios. “como” puede sustituir a un antecedente adjetivo: buenos como son.
- cuyo. Presenta variación de género y número. Es un relativo que funciona como determinante posesivo, por lo cual no concuerda con el antecedente, sino con el término o núcleo que modifica: aquellos niños (antecedente), de cuyos padres (núcleo) hablábamos. Es de escaso uso en el lenguaje coloquial.
Construcciones de Relativo
Oraciones Relativas con Antecedente
Toda oración de relativo que tenga como antecedente un sintagma nominal se comporta como una oración adjetiva, es decir, como un sintagma adjetivo que complementa a dicho antecedente: Los muchachos (SN) de quienes habla (SAdj.). Prueba de esta transposición es que los sintagmas adjetivos son conmutables por adjetivos o determinantes: Esos muchachos.
Oraciones de Relativo sin Antecedente
Cuando carecen de antecedente los relativos no adjetivan.
- Donde y cuando introducen oraciones tradicionalmente consideradas adverbiales (son un tipo de sintagma nominal): Siempre va hacia donde nació.
- Como, encabeza oraciones adverbiales de modo: Vive en el siglo XXI como vivían los esclavos.
- Quien y cuanto sin antecedente introducen oraciones sustantivas: Quien lo probó lo sabe.
Relativas Sustantivas
El artículo es un sustantivador no solo de adjetivos, sino también de segmentos que han sufrido una adjetivación previa. Por consiguiente, también está capacitado para sustantivar construcciones de relativo: Las amargas, Las de la amargura, Las que amargan.
Los Relativos «quien» y «cuanto»
- Quien. En todos sus usos es conmutable por la secuencia artículo + que: Sale con quienes quiere / Sale con los que quiere. En tales contextos, quien realiza una doble transposición: la correspondiente al relativo que y la correspondiente al artículo que incorpora. De ahí, cuando no hay antecedente, todas las oraciones introducidas por quien sean sintagmas nominales: El que bien te quiere / Quien bien te quiere.
- Cuanto. Este transpositor incorpora también los valores artículo + que relativo. Cuando no tiene antecedente, realiza asimismo una doble transposición. Por eso el resultado es un sintagma nominal: Le molesta lo que le dices / Le molesta cuanto le dices.
Oraciones Comparativas
Características
Son construcciones sintácticas mediante las cuales expresamos el resultado de cotejar dos magnitudes desde el punto de vista de la cantidad, de la cualidad o del modo. Distinguimos dos tipos:
- Comparativas propias (hace más calor que ayer).
- Comparativas relativas (sabe menos de lo que aparenta).
Si atendemos al número de grados posibles en la cuantificación, se dividen en:
- comparativas de superioridad, utilizan el cuantificador más;
- comparativas de inferioridad, utilizan el menos;
- comparativas de igualdad, emplean tan, igual o artículo + mismo.
Comparativas Propias
Adoptan el patrón formal más que, menos que, tanto como, igual que, artículo + mismo que. En español tenemos herederos de los adjetivos comparativos latinos en -ior, pero solo cuatro conservan la posibilidad de formar construcciones comparativas: mayor, menor, mejor y peor.
Comparativas Relativas
La intensificación que efectúan las relativas enfáticas del tipo ¡lo fuertes que eran! las hace aptas para formar parte también de estructuras comparativas. Imaginemos dos pares de secuencias como las siguientes: Roberto es listo / Lo listo que era Miguel. Entre ambas podemos establecer una valoración comparativa que daría resultados como los siguientes: Roberto es más listo de lo que era Miguel / Roberto es tan listo como lo que era Miguel.
Las estructuras comparativas relativas presentan las siguientes características:
- forman su segundo segmento a partir de estructuras relativas enfáticas del tipo Lo fuertes que eran; por eso se denominan comparativas relativas;
- el relativo tiene como antecedente el término intensificado;
- el relativo ejerce una de las funciones del segundo segmento de la comparación; nunca se elide;
- el verbo de la oración relativa tampoco se suele elidir.
Adverbiales de Lugar
Oraciones Subordinadas de Lugar
El relativo donde introduce oraciones con significado locativo.
- Si posee un antecedente nominal, el resultado es una oración adjetiva o de relativo: La casa donde nació / La casa natal.
- Si carece de antecedente, el resultado es una oración que funciona como los adverbios de lugar. Son llamadas adverbiales de lugar: Dado que los adverbios locativos son un tipo de sintagmas nominales, las adverbiales de lugar son un subconjunto de las oraciones sustantivas: Cerca de donde nací (de mi casa).
Subordinadas de Tiempo
Oraciones Temporales
Las oraciones temporales son las introducidas por el relativo cuando. Lo hallamos en dos contextos:
- con antecedente; transpone a la oración a categoría adjetiva;
- sin antecedente; el resultado es una oración adverbial de tiempo.
Encontramos oraciones temporales con cuando no solo como complemento circunstancial, sino también como suplemento, complemento nominal, complemento adjetivo y como complemento adverbial.
Aparte de las oraciones con cuando hay otros tipos, se clasifican en:
- de simultaneidad introducidas por los transpositores mientras, conforme, según y la locución conjuntiva a medida que;
- de anterioridad introducidas por el transpositor apenas o las locuciones conjuntivas tan pronto como, una vez, no bien;
- de sucesión inmediata que utiliza la locución en cuanto.
Adverbiales de Modo
Oraciones de Modo
Las oraciones adverbiales más comunes y conocidas son las introducidas por el relativo como. Lo hallamos en varios contextos:
- con antecedente nominal da el resultado de una oración adjetiva, la manera cómo pasa el balón;
- con antecedente adverbial, resulta una oración adverbial, Hazlo así como te he dicho;
- sin antecedente el resultado es una oración adverbial, vive como un millonario.
El relativo cual puede encabezar también oraciones modales, bien con el antecedente tal, bien de forma autónoma. Si el verbo se repite puede elidirse. Otros transpositores modales son conforme, según, según como, tal y como.
Oraciones de Causalidad
Causa y Oraciones de Causalidad
En filosofía se entiende como causa todo aquello que ha producido o es capaz de producir un efecto. En lengua no es así: puede ser entendida como causa, razón, justificación, explicación, etc.
Distinguimos varios tipos de oraciones subordinadas de causalidad:
- Causales. La oración subordinada expresa la causa, razón… del acontecimiento que manifiesta la oración principal. No voy porque tengo que estudiar.
- Consecutivas. La oración principal contiene la causa que conduce a una consecuencia expresa en la oración subordinada. Duerme tanto que llega tarde.
- Condicionales. La oración subordinada expresa un acontecimiento que se presenta como la causa condicionada de lo que manifiesta la oración principal. Si tuviera dinero me iría a Venecia.
- Concesivas. La oración subordinada expresa una causa que no llega a producir el efecto significado por la oración principal. Aunque me gusta el mar, no iremos de vacaciones a la costa.
Tipos de Oraciones de Causalidad
Según el elemento del que dependen, diferenciamos varios tipos de oraciones subordinadas de causalidad:
- Complementos circunstanciales. Van pospuestas al verbo sin pausa. Vendrá si termina pronto.
- Tópicos. Aparecen en posición inicial separados por pausa. Si tienes sueño, duerme.
- De verbo enunciativo. Dependen de un verbo implícito, decir. Si lo sabes, ¿dónde está? / Si lo sabes dime: ¿dónde está?
- Explicativas o de enunciado precedente. Algunas oraciones causales, condicionales, concesivas y consecutivas pueden afectar a todo el enunciado anterior. Hazlo, aunque no conseguirás nada.
Las oraciones consecutivas a diferencia del resto de las oraciones de causalidad siempre van pospuestas: Llovió tanto que se inundó el río.
Análisis de las Oraciones Causales
Causales con Función de Complemento Circunstancial
Adoptan la forma del sintagma nominal precedido de la preposición por. En situaciones más restringidas hallamos asimismo la preposición de: Murió de una pulmonía.
El sintagma nominal de causa puede venir representado por un infinitivo y por una oración sustantiva: Dimitió por cansancio / Dimitió porque estaba cansado / Dimitió por estar cansado.
No son infrecuentes las locuciones que se han especializado en la expresión de la causalidad:
- a causa de + SN;
- con motivo de + SN, por razón de + SN,
- en vista de + SN;
- gracias a + SN;
- debido a + SN.
Causales en Posición de Tópico
Sabemos que la topicalización de un segmento circunstancial nos permite asignarle un valor suplementario de causa, de condición o de concesión: Estudia en Madrid / En Madrid, estudia.
Como consecuencia de este proceso, han aparecido construcciones causales que solo funcionan como tópicos.
- Causales de como en indicativo: como es sábado, descansamos.
- Construcciones absolutas: puestas estas condiciones, no firmo. Las construcciones absolutas abreviadas pueden manifestar causa, cansado me acosté pronto.
- Construcciones del tipo lo fuertes que eran. La topicalización en estructuras de énfasis puede generar sentidos causales cuando el verbo aparece en indicativo y les preceden las preposiciones de o por: De lo mucho que leía, se le secó el cerebro.
- Infinitivos con preposición: De tanto conducir, me duelen los ojos.
Otras Oraciones Causales
Causales de Verbo Enunciativo
Las causales de verbo enunciativo se diferencian de las de verbo de enunciado en que:
- vienen separadas por una pausa,
- necesitan restituir en las preguntas el verbo decir implícito.
Causales Explicativas
Existen oraciones causales que no afectan a un verbo, sino a un enunciado precedente. Introducen una explicación o una justificación a una orden, a una pregunta, a una petición, a un consejo… anterior: ¡Cállate! Que me molestas. Son las causales explicativas.
A diferencia de las otras no unen sintagmas ni oraciones, sino enunciados, auténticos actos del habla. Si observamos el ejemplo advertimos que está formado por dos enunciados y el segundo enunciado del ejemplo presenta una estructura causal.
Existen rasgos que diferencian las causales explicativas del resto de las causales:
- al construir la explicación de por qué se ha realizado un enunciado, han de venir pospuestas;
- el enunciado previo que se justifica queda totalmente cerrado; la explicación se inicia tras una pausa larga;
- las causales explicativas pueden afectar a enunciados sin verbo.
Además de porque y puesto que existen conjunciones y conectores que son exclusivos de las causales explicativas. Es el caso de pues, que, es que. Las conjunciones pueden variar de acuerdo con el acto del habla que se justifica: afirmaciones, preguntas, decisiones, insultos, órdenes, cumplidos.
Estructuras Condicionales
Concepto y Características
Las estructuras condicionales expresan una causa que, caso de producirse, daría lugar al efecto señalado por la oración principal.
Características:
- Conectores. El conector más habitual de la condicionalidad es la conjunción si. Existen otros conectores como cuando… y locuciones conjuntivas siempre que, a condición de…
- Selección formal. La conjunción si impone una restricción en las formas verbales con las que se combina. Solo es compatible con el presente, pretérito perfecto simple y pretérito imperfecto de subjuntivo y de indicativo, así como con las formas compuestas correspondientes: si amo, si amó, si amaba…
- Tipos. Según el grado de probabilidad se clasifican en tres tipos: reales o probables, si me toca la lotería, me retiro; potenciales, si fuera rico, te compraría una casa; o improbables o irreales, si hubiera ganado, habría llamado.
Estructuras Consecutivas
Concepto
Las construcciones consecutivas son estructuras sintácticas bimembres cuyo segmento expresa la consecuencia o el resultado de la acción significada por el primero. Las oraciones consecutivas son estructuras de causalidad. El primer segmento manifiesta causa real, mientras el segundo expresa la consecuencia.
Consecutivas de Intensidad o Consecutivas con «que»
El primer término aporta intensificación que desencadena la consecuencia expresada en el segundo: es tan torpe que todo lo rompe. Diferenciamos dos tipos:
- Consecutivas de intensidad con cuantificador.
Los cuantificadores tanto y tal dotan al primer enunciado de una intensidad capaz de producir una consecuencia. Tanto puede afectar a verbos, a nombres (se comporta como adjetivo o pronombre), a adjetivos y adverbios (adopta la forma acoplada tan).
El cuantificador tal se comporta como un adjetivo. La cuantificación que introduce afecta a la escala de la cualidad: Su minuciosidad es tal que no se le escapa detalle. La oración consecutiva depende sintácticamente del cuantificador. La intensificación puede expresarse también por cada y un: lleva una ropa que da asco.
- Consecutivas de intensidad sin cuantificador.
La lengua puede conseguir la intensificación del primer segmento por otros medios.
- estructuras del tipo ¡lo fuertes que eran!;
- secuencias de intensidad con si, ¡si seré torpe que me he cortado!;
- oraciones exclamativas, los enunciados exclamativos poseen una cuantificación intrínseca que los hace aptos para introducir consecuencias, ¡qué les habrá contado que ni me hablan!
Consecutivas No Intensivas
En estas construcciones no existe intensificación en el primer segmento. La segunda parte se presenta como una continuación o consecuencia del proceso expresado en la primera. Desde un punto de vista formal, los dos términos de la construcción son enunciados, con entonación autónoma. De ahí que vengan separados por pausas largas. Muchos gramáticos las incluyen dentro del grupo de las oraciones coordinadas. Diferenciamos dos grupos:
- Coordinadas por yuxtaposición. El valor consecutivo se deduce por inferencias contextuales; ya terminó el plazo de reclamaciones, no podemos hacer nada. La lengua dispone de marcadores semánticos o discursivos que apoyan la interpretación consecutiva: por lo tanto, por eso, en consecuencia, consecuentemente, entonces, así pues, de este modo.
- Coordinadas con conector. Vienen introducidas por las conjunciones con que, luego y por locuciones conjuntivas: así que, de (modo, manera, forma) que. El primer enunciado tiene una entonación descendente y viene seguido de una pausa larga. El segundo se inicia con una de las conjunciones señaladas; pienso, luego existo.
Estructuras Concesivas
Concepto
En las estructuras concesivas la oración principal niega los supuestos a los que puede conducir la oración subordinada. Esta se presenta, pues, como una causa que resulta ineficiente. La estructura semántica de las concesivas es muy semejante a la de las adversativas con pero. Analizamos el siguiente diálogo: A.- Luis es alto; B.- Aunque Luis es alto, no juega al baloncesto.
- Concesión. El interlocutor B admite la opinión de A.
- Implicación. Esta afirmación se puede convertir en la causa que conduce a una conclusión implícita.
- Refutación. El segundo enunciado niega o refuta tal afirmación implícita.
Concesivas como Complemento Circunstancial
Adoptan características propias de esta función: complementan directamente al verbo, al que van pospuestas sin pausa. A diferencia de otras posiciones, las concesivas de aunque en función de complemento circunstancial vienen siempre en subjuntivo: Diré la verdad aunque me cueste el cargo.
La secuencia a pesar de muestra el carácter negativo de una circunstancia. Cuando el hablante desea comunicar que este carácter negativo no impide la realización de lo enunciado por el verbo principal, se genera un valor concesivo: Sigue arbitrando a pesar de las críticas.
Las secuencias temporales con cuando y las condicionales con si asumen valor concesivo al recibir el apoyo de un adverbio. Se construyen con indicativo: no bebe vino ni siquiera cuando le invitan.
El adverbio así puede convertirse en conjunción concesiva cuando se une a un verbo en subjuntivo: No renunciaré así me amenacen con un castigo.
Un valor semejante al del adverbio aun, ante oración sustantiva con que, lo hallamos con el adverbio mal. Su uso es restringido: eso es así mal que te pese.
Concesivas Explicativas
En posición final tras pausa larga, también hallamos secuencias con valor concesivo. Al igual que las causales y las condicionales que aparecen en esta posición, aportan un matiz de corrección, puntualización o explicación que afecta al enunciado precedente: El matrimonio es un estado ideal, si bien no todo es un camino de rosas.
Las concesivas pospuestas afectan a veces a enunciados interrogativos o imperativos: ¿Dónde habéis puesto las tijeras?, aunque no sé para qué lo pregunto.