El Modernismo: Definición y Características Clave
El Modernismo es un movimiento artístico y cultural que se desarrolló entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Representó una ruptura con la tradición anterior, especialmente con el Realismo y el Naturalismo, volviendo a postulados románticos. Surgió en Hispanoamérica, impulsado por figuras como Rubén Darío, y desde allí se extendió a Europa.
Tipos de Modernismo
- Parnasiano: Su lema es “el arte por el arte”, buscando la belleza y la perfección formal.
- Simbolista: Caracterizado por el uso del símbolo y la importancia del significado.
Principales Características del Modernismo
- Búsqueda de la belleza y la perfección formal.
- Importancia del YO (individualismo).
- Evasión espacial (gusto por lugares exóticos, por ejemplo, Oriente) y temporal (hacia el pasado, como la Edad Media).
- Cosmopolitismo.
- Reflejo de los sentimientos a través del paisaje.
- Musicalidad: renovación de metros y estrofas.
- Léxico sensorial.
- Tema preferido: el amor (a menudo, sufrido).
El Novecentismo o Generación del 14: Racionalismo y Arte Puro
Este movimiento cultural español es característico de la segunda década del siglo XX. La decadencia del Modernismo y la influencia de las vanguardias europeas propiciaron el surgimiento de una nueva generación de intelectuales, formados en universidades y con una clara vocación europeísta, conocidos como novecentistas o Generación del 14.
Rasgos Estéticos del Novecentismo
- Racionalismo: Se concede gran importancia al rigor intelectual y a la claridad expositiva.
- Antirromanticismo: Se rechaza lo sentimental y lo pasional, prefiriendo lo clásico y las actitudes equilibradas y serenas.
- Defensa del “arte puro”: Se considera que el arte solo debe proporcionar placer estético, sin ser vehículo de preocupaciones religiosas o políticas.
- Aristocratismo intelectual: El arte y, en consecuencia, la literatura, son concebidos para minorías selectas (para la “inmensa minoría”, en expresión de Juan Ramón Jiménez).
Juan Ramón Jiménez: Figura Central del Novecentismo
Juan Ramón Jiménez (1881-1958), premio Nobel en 1956, es el máximo representante de la lírica en esta etapa. Su poesía es, en palabras del propio poeta, “una poesía en sucesión, una obra en marcha”. Él mismo estableció, en sus últimos años, tres etapas en su producción:
- Etapa sensitiva (hasta 1916): Marcada por la influencia de Bécquer, el Simbolismo y el Modernismo. Se trata de una poesía emotiva y sentimental. Obras destacadas incluyen Arias tristes, Jardines lejanos, Platero y yo (prosa poética, 1914) y Estío, entre otros.
- Etapa intelectual (1916-1936): Expresión de la experiencia sin ropajes retóricos (poesía pura, desnuda). Esta etapa está marcada por la publicación en 1916 de Diario de un poeta recién casado, obra que rompe definitivamente con el Modernismo y abre la poesía española a las innovaciones vanguardistas.
- Etapa suficiente o verdadera (1937-1958): Agrupa todo lo escrito durante su exilio americano. Continúa la búsqueda de la belleza y la perfección. Es su poesía más compleja. Su ansia por la trascendencia lo lleva a identificarse con Dios, como deja patente en En el otro costado y Dios deseado y deseante.
La Generación del 27: Poetas y Evolución
Principales Autores de la Generación del 27
- Pedro Salinas: Reconocido como “el poeta del amor”, ya que en su obra predomina el tema amoroso en todas sus vertientes. Escribió la trilogía amorosa formada por La voz a ti debida, Razón de amor y Largo lamento. Sufrió exilio.
- Jorge Guillén: Su poesía es una de las más complejas de la Generación del 27 debido a la influencia de la “poesía pura” de Juan Ramón Jiménez. El optimismo y un léxico muy cuidado caracterizan su obra. Destacan Cántico y Clamor. También sufrió exilio.
- Gerardo Diego: Fue el gran representante del creacionismo, pero en su obra conviven tradición y vanguardismo por igual. Publicó una Antología de la Poesía española (1915-1931) en la que reunió, entre otros, a los principales miembros de la Generación del 27.
Características y Etapas de la Generación del 27
En cuanto a los rasgos estéticos del Grupo del 27, pueden señalarse algunas características comunes a todos:
- Sentido trascendente de la poesía.
- Depuración del sentimiento.
- Intelectualismo.
- Poesía de contrastes.
- Recuperación de las formas métricas clásicas.
- Desarrollo del verso libre.
En la evolución conjunta del grupo, se pueden distinguir tres grandes etapas, aunque no todos los poetas las cumplen con la misma intensidad ni al mismo tiempo:
- Poesía deshumanizada (hasta 1927): Es la etapa eminentemente vanguardista, de poesía pura, hermética e intelectual, basada en la metáfora y en la creación de un lenguaje poético depurado y elaborado, bajo el modelo de Góngora. No obstante, en esta etapa ya aparecen las primeras muestras del futuro interés por la lírica popular, conocido como “neopopularismo”.
- Poesía rehumanizada (desde 1927 hasta la Guerra Civil): Es la etapa de influjo del surrealismo. Lo humano vuelve a tener cabida en la poesía: primero en forma de expresión de los sentimientos, identificado con el neorromanticismo, y luego derivando incluso hacia una poesía política y hasta revolucionaria, acentuada por los acontecimientos históricos.
- Poesía tras la Guerra Civil: El grupo se dispersa (Lorca ha muerto, algunos se exilian y otros permanecen en España). Los poetas que permanecen sufren las dificultades de la posguerra, pero son capaces de marcar el camino a las nuevas generaciones con una poesía existencial o solidaria; mientras que entre los exiliados predomina el sentimiento de nostalgia y desarraigo.