Movimientos Literarios del Siglo XIX
Realismo
El Realismo es un movimiento literario que se produjo, sobre todo, en la narrativa de la última parte del siglo XIX. En él van a influir factores ideológicos, políticos y sociales de este final de siglo, y la narrativa realista europea, especialmente la francesa.
Naturalismo
El Naturalismo es un movimiento literario derivado del Realismo, cuyas concepciones lleva al extremo. Los naturalistas utilizaron para ello las teorías sociológicas, filosóficas y científicas de la época y, así, incorporaron a la novela una visión determinista del ser humano. El determinismo consideraba que el ambiente y la herencia biológica condicionaban el comportamiento de las personas, de manera que no podían escapar a su destino.
La Poesía Romántica
La lírica romántica española renueva la estética y la temática de la poesía del siglo XVIII y se caracteriza por:
- Mayor subjetivismo: el poeta expresa en sus versos sus sentimientos y emociones.
- Paisajes y escenarios oscuros y tristes, acordes con el alma del poeta; como los cementerios o las ruinas.
- Mayor variedad e innovación en la métrica, la sonoridad y los efectos rítmicos.
Autores Destacados
José de Espronceda
Es por su vida y por su obra, un hombre típicamente romántico que expresó en sus poemas su rebeldía y su protesta contra la sociedad. Escribió:
- Poesías breves, en las que cantó a personas que estaban al margen de la sociedad y deseosas de libertad. Ejemplo: «Canción del pirata».
- Dos poemas mayores: «El estudiante de Salamanca», largo poema narrativo, protagonizado por un joven seductor y libertino; y «El diablo mundo», poema inacabado de carácter filosófico.
- Características de su poesía: se caracteriza por su gran imaginación y espíritu arrebatado; el dominio del verso y un lenguaje, a menudo, retórico.
Gustavo Adolfo Bécquer
Escribió setenta y nueve Rimas que fueron publicadas poco después de su muerte. En ellas, trata temas como el genio lírico y la inspiración, el amor esperanzado y gozoso, el fracaso amoroso y la soledad y el vacío producidos por la falta de amor. La poesía lírica de Bécquer es más intimista y llena de emoción que la de la primera mitad de siglo. También más sencilla y menos retórica. Suele ser una poesía de suave musicalidad. En las Rimas se ha visto a menudo el inicio de la poesía moderna.
José Zorrilla
Plantea bien las situaciones y crea personajes que encarnan el misterio o la rebeldía del héroe romántico.
Don Juan Tenorio
Es su obra más famosa. Zorrilla retomó la figura del protagonista de la obra de Tirso de Molina, «El burlador de Sevilla», le añadió rasgos románticos (un protagonista rebelde, libertino, impetuoso), y creó el personaje literario que encarna por excelencia este mito español. A diferencia de la obra de Tirso de Molina, en la que el protagonista se condena y acaba en los infiernos, en la obra de Zorrilla, don Juan se salva por el amor de doña Inés.
Mariano José de Larra
La obra más conocida es «Artículos de costumbres». No describió costumbres populares, como Mesoneros Romanos o Estébanez Calderón, sino que hizo una crítica pesimista y amarga de la atrasada sociedad española y de los males del país. Entre otras cosas criticó la falta de diligencia de los funcionarios públicos, la mala educación, el matrimonio inadecuado, y la construcción de viviendas malas y pequeñas.
- Características de su lenguaje: suele ser muy directo, lleno, a veces, de ironía y de una visión humorística.
Emilia Pardo Bazán
Fue una intelectual gallega de hondas raíces cristianas. Se interesó por el Naturalismo de la narrativa francesa y sus primeras y mejores novelas fueron de corte naturalista, suavizado por sus creencias religiosas, que negaban las teorías del determinismo y consideraban que Dios había creado al hombre libre para ser responsable de sus propias acciones.
Los pazos de Ulloa
Reflejó la fuerza de la naturaleza y de los instintos más degradados del ser humano.
Vicente Blasco Ibáñez
Fue un autor valenciano de éxito internacional. La mayor parte de su obra la escribió en las primeras décadas del siglo XX. Sus novelas más representativas fueron, quizá, las primeras, de ambiente valenciano y tono naturalista. Se publicaron a finales del siglo XIX y primeros años del XX.
- Obras destacadas: «Arroz y tartana», sobre la caída de la pequeña burguesía valenciana; «Cañas y barro», centrada en la vida de la Albufera y en la pasión amorosa.
Benito Pérez Galdós
Su abundante creación literaria le permite usar diferentes modos narrativos. En sus novelas podía hacer uso de un narrador omnisciente en tercera persona, que conoce y juzga todo lo que ocurre en su relato, incluso lo que piensan sus personajes, o plantear una narración autobiográfica en la que el narrador se expresa en primera persona. En todas ellas refleja retratos humanos y sociales de la España de su tiempo, utiliza diversos registros lingüísticos (formal, coloquial) y gran cantidad de expresiones populares con las que representa el habla de la calle. Su estilo es, generalmente, ágil, vivo y espontáneo.
- Clasificación de sus obras:
Los episodios nacionales
Es una historia novelada de la España del siglo XIX, desde la Guerra de la Independencia hasta algo más de mediados del siglo. Están compuestos por cuatro series de diez episodios cada una y una quinta incompleta.
Las novelas de la primera época
En las que predominan las obras de intención social, como «Doña Perfecta», que trata el problema de la intolerancia política y religiosa.
Las novelas españolas contemporáneas
En ellas Galdós nos muestra la sociedad madrileña y española de la época. Su mejor obra, «Fortunata y Jacinta», correspondió a este momento. Esta obra aborda el tema de dos mujeres que son, respectivamente, la amante y la esposa de un señorito, Juanito Santa Cruz.
Leopoldo Alas, Clarín
Su obra narrativa no es muy extensa. Escribió: Cuentos y relatos cortos, y dos novelas.
Estructura de «La Regenta»
La novela se estructura en dos partes:
- Primera parte: se novelan los sucesos ocurridos durante tres días. El ritmo es lento y abundan las descripciones y las reflexiones de los personajes.
- Segunda parte: el relato abarca tres años. En esta parte, predominan la acción y se desarrolla la trama.
- Características de La Regenta: Clarín nos presenta todo un cuadro humano y social que agoniza en la vida rutinaria e hipócrita de una ciudad de provincias, Vetusta. Esta obra se caracteriza por la magnífica prosa, el humor y la ironía, las minuciosas descripciones de los personajes y de la ciudad, y la riqueza de los diálogos.
La Poesía hasta los años 50
La Poesía Arraigada
A causa de la Guerra Civil algunos poetas necesitaron ‘refugiarse’ en una poesía preocupada, sobre todo, por la perfección del verso y la belleza. Su lenguaje era sereno y clásico, y su estrofa preferida fue el soneto. Estos poetas trataron temas tradicionales como el sentimiento religioso o el amor, y evitaron expresar el dolor del momento y la angustia que acechaba al ser humano.
La Poesía Desarraigada
Estos poetas eran conocidos como ‘desarraigados’. Sus versos expresaban el dolor provocado por las circunstancias del momento.
La Poesía Social
Esta poesía denunciaba las injusticias sociales y la triste realidad del ser humano. Para que el lector tomara conciencia, los poetas se dirigían a ‘la inmensa mayoría’ y preferían un lenguaje sencillo, directo y comprensible. Son poetas sociales: Gabriel Celaya y Blas de Otero.
La Generación de los 50
Los poetas de esta generación critican la realidad social, pero con un tono menos dramático que el de la poesía social. Quieren lograr un estilo propio, buscan depurar el lenguaje coloquial o se preocupan por un lenguaje más cuidado, aunque generalmente sobrio.
Ángel González
En sus versos, junto al espíritu crítico y social, caben también el amor, los sentimientos, el paso del tiempo y el sentido de la vida. Su estilo, cuidado, tiende a la sencillez. Su lenguaje puede adquirir tonos coloquiales o irónicos.
Jaime Gil de Biedma
Es uno de los poetas más representativos de este grupo. Ofreció en sus poemas una versión desencantada, escéptica y crítica del mundo, especialmente de su mundo burgués. La infancia, el amor y el erotismo fueron sus temas más frecuentes. Su estilo era sincero y de palabra sencilla y expresiva.