Sorpresas te da la toga irene lozano

Este texto pertenece al nivel periodístico, concretamente de opinión, y fue publicado el 20 de junio de 2004 por Irene Lozano en el periódico nacional El Mundo
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El artículo va dirigido a toda la sociedad, pues tanto la justicia como la violencia sobre las mujeres son aspectos que nos incumben a todos. Por ello, la autora usa un lenguaje bastante correcto, libre de coloquialismos y con la presencia de algún tecnicismo (Consejo General del Poder Judicial, proyecto de ley… que no impiden el entendimiento del texto en ningún momento). Se deduce que las principales funciones del lenguaje son: la representativa, dado que la autora expone en todo momento la situación actual de la justicia en nuestro país de una manera objetiva; la apelativa, pues trata de atraer continuamente la atención del lector, utilizando incluso en reiteradas ocasiones una marcada ironía; y por último, la expresiva, pues Lozano expone en el texto su opinión sobre posición que los jueces han mantenido hacia la ley que protege a las mujeres ante la violencia de género.
El tema con el que nos encontramos aborda la problemática ante la nueva ley con respecto a la violencia de género.
Irene Lozano expone en el texto su disconformidad con la manifestación de los jueces de que la ley es sexista. Pide aquellos que aplican la ley que evolucionen y comprendan que esta nueva medida no hará a los agresores desistir de seguir atacando a sus parejas, pues lo realmente necesario es protegerlas para que se sientan seguras en la lucha por su libertad. Aunque reconoce que la ley no trata por igual a ambos sexos, concluye afirmando que solo recoge una realidad social en la que la mujer lleva la peor parte ante la violencia en el hogar, por ello se trata de una necesidad.
En cuanto a la tesis, o idea principal que quiere transmitir la autora, es su disconformidad ante la actitud de los jueces frente a la nueva ley, que rechazan por considerarla sexista.
Con respecto a la organización interna, vemos que el texto está estructurado en 3 partes:
-Exposición de la tesis: en los dos primeros párrafos se realiza una breve introducción y planteamiento de la tesis.
-Desarrollo argumentativo: se exponen las ideas en las que la autora apoya su tesis.
-Conclusión: el texto finaliza con una oración tajante (Los jueces pueden consolarse sabiendo que las maltratadas desearían no necesitar nunca los privilegios que les otorga la ley).
Por presentar primero la tesis y terminar planteando los argumentos, hablamos de una estructura deductiva.
Para convencernos de la tesis, la autora usa varios argumentos, o razones con las que respaldar su opinión. Entre ellos cabe destacar los siguientes:
-Ejemplos, al nombrarse diversas situaciones de la actualidad en las que se refleja una actitud machista.
-Cifras, cuando se habla del número de miembros del CGPJ.
-Evidencia, al afirmar que las muertes de los hombres a manos de sus mujeres son igualmente penosas.
– Autoridad, cuando se apoya en lo expresado en 1989 por el Senado para manifestar la poca sensibilidad de la judicatura ante los cambios sociales.
En lo que se refierea los rasgos de estilo distinguimos:
-Dentro del nivel léxico-semántico, vemos que la autora usa diversas palabras referentes al campo semántico de la justicia (CGPJ, proyecto de ley, jueces, órgano de poder, sentencia…) y al de la violencia (discriminación, violencia, amenazas…), tratando con ello de demostrar sus conocimientos sobre el tema.
Además, para dar agilidad y cohesión al texto, Lozano hace uso de diversos sinónimos textuales para referirse a los jueces (atildados varones, judicatura, magistrados…)


-Dentro del nivel morfosintáctico, se puede apreciar un bajo contenido en adjetivos, entre los que abundan los de tipo especificativo, mediante los cuales la autora da objetividad al texto (discriminación sexual, crimen pasional, juzgados específicos…). También podemos ver algún adjetivo explicativo con el que Irene Lozano otorga algo de subjetividad (atildados varones). En cuanto a los verbos vemos que abunda la tercera persona (tanto en plural como en singular), tratando de este modo de dar objetividad a su opinión (beneficia, pueden consolarse, son…), aunque también podemos encontrarnos con verbos en primera persona (recuerdo…), logrando con ello, como ya se dijo anteriormente, incluirse en el texto y otorgando cierta subjetividad. De acuerdo de nuevo con la ya mencionada objetividad, podemos observar que el tiempo más utilizado es el presente, debido a su carácter atemporal. En cuanto al modo, vemos que el más usado es el indicativo, cuyo único objetivo es de nuevo la objetividad. En cuanto a las oraciones, vemos que son sencillas y de tipo enunciativas.
-Dentro del nivel textual, la autora usa diversos marcadores, elementos lingüísticos con los que da fluidez y cohesión al texto. Entre ellos encontramos los de tipo adversativo (pero), los de adición (tampoco) o los de causa (por eso).
ACTUALIDAD DEL TEMAEs una evidencia que en la actualizadla violencia de género se ha convertido en una de las principales lacras de nuestra sociedad. No resulta raro ver cómo a diario se nos bombardea con campañas sobre la necesidad de la erradicación de estas situaciones de maltrato, o como día a día aumenta el número de mujeres asesinadas a manos de sus maridos. Y lo triste es que esto se produce por el simple hecho de que los hombres piensan que sus parejas son algo de su propiedad, un bonito coche que nadie puede siquiera mirar más que ellos mismos.

OPINIÓN PERSONAL


La justicia española tiene que cambiar en este aspecto. Muchas de las mujeres que denuncian a sus maridos por amenazas o malos tratos, creen estar respaldadas por la ley, pero lo cierto es que se trata de una ley que realmente condena a sus agresores a penas de cárcel para partirse de risa. Además, cuando los maltratadores quedan libres, estas mujeres sufren depresiones o crisis de ansiedad pensando que ellas, e incluso sus propios hijos, pueden sufrir la venganza de ese hombre cuyo ego machista solo le permite pensar que si esa mujer no puede ser suya, tampoco será de otro. La sociedad entera, cada uno dentro del papel que le corresponda, debe poner fin ya a esta horrible situación, a la muerte de mujeres cuya única esperanza en la vida es librarse de esa mano opresora, destructora de sus sueños, de esa persona que dice amarla.

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