Teatro Español del Siglo XX: Lorca, Valle-Inclán y La Casa de Bernarda Alba

Teatro Español del Siglo XX: Autores y Corrientes

Teatro Comercial y de Éxito

  • Jacinto Benavente: Alcanza el éxito con obras de crítica leve y repite la fórmula.
    • Obras con problemas poco conflictivos y diálogos elegantes e ingeniosos.
    • Obras destacadas: Señora ama, La malquerida, Los intereses creados. Fue Premio Nobel.
  • Comedia Costumbrista: Mezcla aspectos de la zarzuela y del género chico, alternando el diálogo con partes musicales. Ambiente pintoresco, personajes típicos, lenguaje vulgarizado y humorístico, y conservadurismo ideológico.
    • Cultivada por Carlos Arniches, autor de sainetes (La señorita de Trevélez), los hermanos Álvarez Quintero (ambientan sus obras en Andalucía) y Pedro Muñoz Seca, que, con el astracán, busca la comicidad a toda costa (La venganza de don Mendo).
  • Teatro Poético en Verso: De asunto histórico y conservadurismo ideológico.
    • Cultivado por Eduardo Marquina, Francisco Villaespesa, José María Pemán

Teatro Renovador y Marginado

  • Teatro del 98:
    • Unamuno utiliza el drama para reflejar los problemas que le obsesionan.
    • Azorín es crítico y autor teatral, con obras muy estáticas.
  • El Grupo del 27: Depura el teatro poético, incorpora formas de vanguardia y acerca el teatro al pueblo.
    • Salinas escribe casi todo su teatro en el exilio.
    • Alberti escribe teatro vanguardista antes de la guerra (El hombre deshabitado) pero su obra más importante es en el exilio (El adefesio, Noche de guerra en el Museo del Prado).
    • Por su innovación, Miguel Hernández escribe un auto sacramental (Quién te ha visto y quién te ve) y teatro social en verso a la manera de Lope (El labrador de más aire) y no goza del favor del público.
  • Alejandro Casona: Dramaturgo que desarrolla su teatro en España (La sirena varada) y en el exilio (La dama del alba), en el que combina humor y lirismo. Algunas de sus obras no fueron estrenadas en España hasta tiempo después.
  • Max Aub: Novelista y dramaturgo muy renovador, que desarrolla su mejor obra dramática en el exilio sobre el nazismo o la guerra (San Juan, No).

La Obra de Valle-Inclán

  • 1ª etapa: Teatro Modernista, al estilo de sus novelas.
  • 2ª etapa: Ciclo Mítico con las Comedias bárbaras (Águila de blasón, Romance de lobos y Cara de plata).
    • Ambientadas en una Galicia rural y mítica, dominada por las pasiones.
    • Con acotaciones casi narrativas, ambiente tétrico, crítica religiosa y técnicas como la animalización.
    • Obra más importante de esta etapa: Divinas palabras.
  • 3ª etapa: Esperpento.
    • Incluye las farsas (personajes grotescos y caricaturescos con los que se critica la situación de la España isabelina): Farsa italiana de la enamorada del rey, Farsa y licencia de la reina castiza.
    • El primer esperpento es Luces de bohemia, con el que critica la situación de la sociedad española a través de la deformación de la realidad y de los numerosos personajes, el empleo del humor, la riqueza del lenguaje, el diálogo ágil, las acotaciones literarias y los continuos cambios de espacio.
    • Otras obras esperpénticas se agrupan en Martes de carnaval (Los cuernos de don Friolera, La hija del capitán y Las galas del difunto).

El Teatro de García Lorca

  • Inicios: Piezas menores y teatro para guiñol.
    • Primer éxito con Mariana Pineda.
    • Después, dos pequeñas piezas maestras: La zapatera prodigiosa y El amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín.
    • Temas de la insatisfacción y el amor desigual.
  • Teatro Vanguardista: Coincide con su crisis personal y estética tras su viaje a Nueva York.
    • Crea las «Comedias imposibles»: El público, Así que pasen cinco años, con estética surrealista y técnicas audaces.
    • Tardaron mucho en subir a la escena.
  • Plenitud: Lorca aúna el rigor estético y el acercamiento al público.
    • Trilogía rural: Bodas de sangre, Yerma, La casa de Bernarda Alba.
    • Rasgos comunes: mujer protagonista, ambientación en el campo andaluz, problemas de índole sexual, final trágico, clima denso y dramático, unión de verso y prosa y de realismo y poesía. Obras maestras.
    • Además, compone Doña Rosita la soltera (sobre la espera inútil del amor) y Comedia sin título (inacabada, de carácter revolucionario).

Resumen por Actos de La Casa de Bernarda Alba

Primer Acto

La acción comienza con el funeral del segundo esposo de Bernarda. Típico velatorio en la propia casa del difunto. Debido a esto, la casa está llena de mujeres del pueblo que han venido a acompañar a la familia en el duelo. En este ambiente de luto, Bernarda impone un severo régimen de silencio y aislamiento a sus cinco hijas: Angustias, Magdalena, Amelia, Martirio y Adela, decretando un periodo de luto de ocho años en el que deberán permanecer encerradas en la casa. María Josefa, madre de Bernarda, a quien mantiene encerrada por su aparente locura, también está presente. Bernarda, una figura autoritaria y rígida, controla estrictamente a sus hijas y sirvientas. Las hijas reaccionan de forma diferente ante la medida. La única que parece librarse es Angustias, la hija mayor, que ha heredado una fortuna considerable del primer marido de Bernarda. Es la única de las hermanas con posibilidades de casarse. Se menciona que Pepe el Romano, un joven del pueblo, ha comenzado a cortejarla. Esto genera envidia entre las hermanas, especialmente en las más jóvenes y rebeldes. Las criadas, especialmente la Poncia, critican a Bernarda, revelando el ambiente de tensión que existe en la casa. Hacia el final del acto, se hace clara la imposición de voluntad de Bernarda, que sigue dictando las normas de luto. Las hijas permanecen sumisas, aunque Adela comienza a mostrar señales de descontento.

El acto concluye con María Josefa, escapando de su encierro, gritando que quiere casarse y ser libre antes de ser nuevamente confinada por orden de Bernarda.

Segundo Acto

El conflicto en la casa se intensifica, especialmente en torno a Pepe el Romano y las tensiones internas entre las hermanas. La acción comienza con las hijas que están cosiendo el ajuar de Angustias en un ambiente cargado de tensión emocional. El cortejo de Pepe el Romano a Angustias sigue siendo el tema central, incluso se menciona que ha estado visitándolas hasta altas horas de la noche. Las otras hermanas muestran diversos grados de incomodidad y envidia por esta situación. Adela mantiene encuentros secretos con Pepe, lo cual genera conflictos con sus hermanas, especialmente con Martirio. Adela muestra una actitud desafiante y rebelde. Se pone un vestido verde, símbolo de su libertad y su rechazo a las normas impuestas por Bernarda.

Está dispuesta a desafiar el luto y a seguir sus propios deseos, incluso si eso se pone en conflicto con su madre y hermanas. Martirio, la hermana más sombría y resentida, empieza a mostrar signos de que también siente algo por Pepe. Esto aumenta la tensión entre las hermanas, especialmente entre Martirio y Adela, que empiezan a enfrentarse de manera más abierta sin que Bernarda se dé cuenta de todo. La Poncia, la criada de confianza, advierte a Bernarda sobre la situación, pero esta se niega a ver la realidad. Adela se rebela cada vez más contra las normas impuestas por su madre. Un incidente clave es el robo de una fotografía de Pepe el Romano que Angustias tenía. La fotografía aparece rascada y Angustias increpa a sus hermanas. Bernarda interviene para imponer su autoridad, exigiendo saber qué ha sucedido, pero las hijas mantienen su secreto. Es evidente que los conflictos entre hermanas, especialmente en torno a Pepe el Romano, están llegando a su punto de ebullición. El acto concluye con claros visos de que el conflicto entre Adela y Martirio por Pepe se intensifica. Bernarda sigue ignorando o subestimando la gravedad de lo que sucede en su casa, manteniendo su enfoque en la reputación y el control absoluto sobre sus hijas.

Tercer Acto

La progresiva escalada del conflicto familiar y emocional llega a su punto culminante. Comienza con una cena en la casa donde las hijas y la Poncia están presentes. El ambiente es tenso y sombrío; algo va a ocurrir. Bernarda intenta imponer control y mantener las apariencias mientras sus hijas, especialmente Adela, se encuentra cada vez más agobiada por la represión y la falta de libertad. La Poncia advierte nuevamente a Bernarda. La Poncia intuye que Adela está involucrada sentimentalmente con Pepe, a pesar de que él está comprometido con Angustias. Bernarda se niega a escuchar estas advertencias y sigue confiando en que su autoridad será suficiente. Adela, incapaz de reprimir más sus sentimientos, confiesa abiertamente su amor por Pepe el Romano. Martirio revela que también está enamorada de Pepe y acusa a Adela de haber estado viéndolo a escondidas. Esto desencadena una fuerte pelea entre las dos hermanas, en la que Martirio finalmente delata a Adela frente a su madre. Bernarda se dirige furiosa hacia Adela, que rompe el bastón de su madre, diciendo que sobre ella no manda nadie más que Pepe.

Bernarda, indignada con la supuesta deshonra, agarra un arma y dispara hacia Pepe el Romano, que se encontraba en el corral de la casa, aunque el disparo no le alcanza. Adela, creyendo que Pepe ha sido asesinado, entra en un estado de desesperación total. Corre hacia otra habitación y se suicida, incapaz de soportar la presión social y familiar, así como la imposibilidad de vivir su amor libremente. Cuando los demás descubren lo sucedido, Bernarda queda consternada. El acto finaliza con Bernarda imponiendo una vez más su control, insistiendo en que la muerte de Adela se declare como una muerte honorable para proteger la reputación de la familia. Exige que todo se mantenga en secreto, diciendo que ha muerto virgen, reforzando el tema del honor y la reputación que ha sido tema central en la obra.

Temas Principales de La Casa de Bernarda Alba

  • La Represión: Es el tema central de la obra, que afecta especialmente a las hijas de Bernarda, quienes viven bajo un control absoluto e imposibilitadas de expresar sus deseos. La represión se simboliza en el luto.
    • Bernarda como figura autoritaria: Representa la autoridad incuestionable que ejerce la represión. Sus órdenes no se pueden contradecir. Su dominio se basa en una rígida disciplina, prohibiendo cualquier manifestación de independencia.
    • Consecuencias de la represión: Afecta destructivamente a los personajes, en especial a Adela, que simboliza el deseo de libertad y resistencia ante la opresión materna.
  • El Poder y la Autoridad:
    • Bernarda, símbolo de autoridad despótica: El poder de Bernarda proviene también de la sociedad patriarcal. Como viuda y madre de cinco hijas, Bernarda encarna y hace cumplir las normas y valores conservadores de su comunidad.
    • Control absoluto: Bernarda ejerce el dominio total sobre las acciones y decisiones de sus hijas. Niega el derecho a expresar emociones humanas.
    • El mandato del silencio: Uso reiterado del silencio.
    • La casa como cárcel: La autoridad de Bernarda convierte la casa en una cárcel, donde sus hijas viven encerradas en un constante estado de sumisión.
  • El Deseo y la Frustración:
    • Contraste con la represión: El deseo es un tema central, especialmente a través de Adela y la figura de Pepe el Romano, que tiene un rol clave en el desarrollo del conflicto. El deseo reprimido termina estallando trágicamente.
    • La frustración como motor de tragedia: Adela se convierte en una víctima de un sistema que no permite la libre expresión del deseo, lo que desencadena la tragedia final.
  • La Libertad y el Confinamiento:
    • La casa como símbolo de opresión: La obra está representada con un espacio cerrado y claustrofóbico donde las hijas están confinadas físicamente. Las ventanas cerradas y las puertas bloqueadas refuerzan la sensación de opresión y simbolizan la falta de libertad.
    • Libertad psicológica restringida: Las hijas están atrapadas por las convenciones sociales tradicionales y por la autoridad de Bernarda. Esto les impide llevar una vida autónoma.
    • El calor y la oscuridad como símbolos de opresión: La constante referencia al calor asfixiante del verano añade un plus de sofoco a la atmósfera de opresión dentro de la casa.
    • Adela y su búsqueda de libertad: Adela representa el deseo de vivir libremente y expresar su anhelo. A diferencia de sus hermanas, quienes parecen resignarse a la opresión materna, Adela desafía las normas establecidas y lucha por su relación con Pepe el Romano, a pesar de que esté prometido a su hermana mayor, Angustias. Esto la convierte en una figura de rebelión contra el sistema restrictivo en el que vive.
    • Paradoja de Adela: Busca escapar de la dominación materna, solo para caer bajo la influencia de su amante, reflejando así otra forma de subordinación.
    • Ruptura del bastón de mando: Adela lo rompe, un símbolo de autoridad, en un intento desesperado por liberarse de la opresión.
  • El Honor y la Hipocresía Social:
    • El honor, como valor supremo: Para Bernarda, el honor familiar es el valor principal que guía su vida, influyendo en sus decisiones y subordinando a sus hijas.
    • Crítica a la presión social: Pepe el Romano disfruta de mayor libertad y se permite jugar con los sentimientos de las hermanas, mientras que ellas están sujetas a normas de conducta muy rígidas.
    • Bernarda y el doble rasero: Bernarda, personaje que asume sin cuestionamientos el doble rasero moral, aplicando con dureza las normas para sus hijas.

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