El teatro que triunfa
Bajo este epígrafe podemos distinguir:
- a) Teatro en verso: Tradicional, conservador, heredero del Modernismo y de Echegaray, que normalmente situaba las acciones en el pasado (F. Villaespesa con Doña María Padilla y E. Marquina con Las hijas del Cid).
- b) Teatro cómico: Cultiva géneros como la comedia costumbrista y el sainete. En este último destacan los hermanos Álvarez Quintero, que recogen la Andalucía tópica (El genio alegre) y Carlos Arniches con sainetes de ambiente madrileño como El santo de la Isidra.
- c) Comedia burguesa: Benavente, Jacinto Benavente, premio Nobel español, se inicia con una obra crítica, El nido ajeno, que analiza la situación de la mujer casada. Si bien la obra fue defendida por los críticos, ante el público fue un auténtico fracaso. El autor se vio en el dilema de elegir entre una obra crítica y otra más suave que gustara a la burguesía. Optó por esa última y comenzó a cultivar la llamada “comedia de salón” en obras como Noche del sábado o Rosas de otoño. En ellas retrata a las clases altas y burguesas, pero sin ahondar demasiado. El mayor logro de Benavente es, sin duda, haber eliminado el drama posromántico y haber elaborado un teatro temáticamente correcto y con gran fluidez de diálogos.
El Teatro que Pretende Innovar
Cronológicamente distinguiremos dos grupos:
- a) Autores del 98 y coetáneos: La mayoría de ellos desembocó en actitudes idealistas, aunque en casos como el de Valle-Inclán se llegó a posturas de serio compromiso. Unamuno, por ejemplo, presentó en el teatro sus propios problemas individuales, transformando las obras en una especie de ensayo psicológico (Fedra, El otro). Azorín elaboró un teatro simbólico muy original en obras como Angelita. Coetáneos a ellos fue Gómez de la Serna, quien fue también fiel a su espíritu vanguardista y realizó un teatro nuevo casi irrepresentable (Los medios seres).
- b) Autores del 27: La Generación del 27 manifiesta intenciones dramáticas diversas. Tal vez su ideología y la virulencia de los movimientos obreros expliquen un teatro que ofrece un fuerte trasfondo social y un intenso sentido de la solidaridad. Sus logros más importantes radican en el deseo de transformar el lenguaje del teatro poético, de incorporar las innovaciones vanguardistas y de acercar el teatro al público. Así, por ejemplo, Lorca fundó “La Barraca”, una compañía teatral con la que recorrió el país representando el teatro clásico. Sin embargo, hay que señalar que la mayoría de los autores del 27 que cultivaron el teatro desarrollaron su obra en el exilio y tras la guerra civil. Es el caso de Salinas, que presta especial atención a la represión (El dictador) o de Alberti con su teatro comprometido (Fermín Gala). Pero de nuevo, una figura sobresale con luz propia: Lorca. El teatro de Lorca, como su poesía, constituye una manifestación literaria de las preocupaciones que obsesionaron al poeta durante su vida. El dolor y el sufrimiento aparecerán constantemente desde los juegos líricos de sus primeras obras (El maleficio de la mariposa) hasta los dramas surrealistas escritos tras su viaje a Nueva York y su fuerte crisis personal (El público, Así que pasen cinco años).
Temas Centrales de la Obra de Lorca
- La frustración por la imposibilidad de desarrollar nuestros deseos, por el contraste que existe entre estos y la realidad.
- Sus personajes protagonistas serán, de nuevo, los marginados, los condenados a la soledad o a la muerte. Aparecerán sobre todo los homosexuales en los dramas surrealistas mencionados anteriormente y las mujeres en sus tragedias. Es el caso de La casa de Bernarda Alba, Yerma y Bodas de sangre.
- El destino trágico del hombre, unión de los dos temas anteriores, será la idea recurrente en su obra.