La Novela Española Contemporánea: Tipologías y Tendencias
La falta de perspectiva histórica, el fuerte desarrollo de la novela, la enorme variedad de la producción de este periodo y la ausencia de elementos comerciales en el proceso de creación dificultan la clasificación de la novela en España en las últimas décadas. En este periodo perviven la vanguardia y novelas que desean recuperar la narración.
Tipologías y Tendencias Narrativas
La Novela Poemática e Intimista
La novela poemática ofrece una prosa cuidada que emula el ritmo de la poesía. En ella, los elementos líricos combinan con los narrativos.
- Julio Llamazares, autor de La lluvia amarilla, lamenta la pérdida del mundo rural y aborda asuntos como el paso del tiempo, la pérdida de lo amado o la muerte.
Relacionada se encuentra la novela intimista o lírica, en la que resulta más relevante la vida interna de los personajes que la trama.
- Carmen Martín Gaite descubre aspectos de la intimidad humana, especialmente de la mujer. Es autora de Entre visillos. Con el tiempo, se simplifica la estructura y la trama de sus novelas. En Nubosidad variable nos presenta el testimonio de unas mujeres que luchan por superar su mundo interno para lograr la independencia.
La Novela Intelectual y Experimental
Eduardo Mendoza en La verdad sobre el caso Savolta muestra los movimientos anarquistas catalanes de principios del siglo XX. Aparte de la narración, integra elementos más dispares y ficticios, como artículos periodísticos, transcripciones mecanografiadas de interrogatorios o declaraciones juradas.
Existe una novela de fuerte carga intelectual.
- Javier Marías, autor de Todas las almas, aúna el descubrimiento de la intimidad, el culturalismo, el gusto por contar historias y la presentación de personajes de gran vida interior.
- En El mal de Montano, Enrique Vila-Matas nos muestra la historia de autoficción, una narración en la que el autor ha usado su biografía como base argumental, pero la adorna con elementos imaginarios.
Cuando la narración intenta penetrar los secretos del novelista y mostrar cómo este realiza su obra, hablamos de una metanovela.
La Novela Histórica
La novela histórica exige que el autor se documente. Su mérito reside en conseguir el equilibrio entre información histórica y calidad literaria. Algunas muestran conflictos atemporales y otras usan el pasado para situar conflictos presentes o para arrojar luz sobre asuntos de la actualidad. Uno de los temas más repetidos es la Guerra Civil y la posguerra.
- Almudena Grande combina un modelo realista tradicional y personajes de gran profundidad psicológica. Es autora de un conjunto de novelas de protagonistas femeninos ambientadas en la posguerra, entre las que se encuentran Inés y la alegría.
- Arturo Pérez-Reverte es el autor más representativo del género. Es autor de una serie de novelas sobre el capitán Alatriste, un soldado del siglo XVII que se ve obligado a malvivir en el Imperio español; en estas novelas predomina el género de aventura.
La Novela Cervantina y Negra
La novela de tintes cervantinos aborda temas de alcance universal con una profunda empatía hacia el ser humano y el afán que le lleva a emprender hazañas imposibles.
La novela negra no presenta solo la resolución de un caso criminal, también persigue realizar un retrato profundo de las problemáticas sociales. Es un género tan popular que ha sido designado como la novela de caballería del siglo XX.
- Lorenzo Silva nos presenta en muchas obras el fracaso de la persona que ha llegado al éxito económico, pero se siente vacío.
- Antonio Muñoz Molina recurre en muchas novelas al género negro y consigue dar una enorme profundidad intelectual en El invierno en Lisboa.
Otras Tendencias: Generación X, Fantástico y Autobiografía
- En los años 90, apareció un grupo de autores jóvenes nacidos apenas dos décadas antes, que escribían realismo sucio y que fueron etiquetados como Generación X.
- La literatura fantástica conoce un cierto auge. Ana María Matute escribe Olvidado rey Gudú. El éxito de la novela infantil y juvenil da pie a que el género fantástico se desarrolle más.
- Desde los años ochenta, los escritores avanzaron en el uso de materiales personales que impulsan los contenidos autobiográficos, correspondencias o memorias. Aparecen obras como Memoria de la melancolía o Los diarios de Rosa Chacel, donde podemos encontrar autoficción.
Análisis de Fragmentos Literarios
Análisis 1: El árbol de la ciencia (Pío Baroja)
Ideas y estructura
Este fragmento pertenece a la obra El árbol de la ciencia, escrita en 1911 por Pío Baroja, autor de la conocida Generación del 98. Contiene todas las características propias de un texto dialogado, en el que [X] interlocutores realizan [X] intervenciones en total. Pese a eso, es posible organizar las ideas en [X] (2 o 3) intercambios:
- Primer intercambio: [X]
- (Tesis)
- [X]
- [X]
- Segundo intercambio: [X]
- [X]
El texto sigue un modelo organizativo de tipo deductivo, ya que se parte de la tesis o idea principal: [X]
Intención y cohesión
La intención del autor en este fragmento es [X]. Para ello, nos muestra una conversación entre Andrés Hurtado y su tío Iturrioz, donde utilizan un pasaje de la Biblia para comparar esta idea.
En el presente texto hallamos [X] mecanismos de cohesión que refuerzan claramente la coherencia textual del mismo. En primer lugar, encontramos una repetición léxica, es decir, la reiteración total o parcial de la palabra “vivir” (líneas 1, 8, 9 y 10), que además es clave para determinar de qué trata el texto y para desarrollarlo a través de una de sus ideas principales. En este caso, la tesis gira en torno a la idea de que el hombre, si quiere vivir, debe hacerlo desde el desconocimiento.
Por otro lado, destacamos el conector lógico de causa “porque” (línea 14), que se encarga de justificar la risa de Andrés, provocada por el ejemplo que su tío le ha expuesto de la Biblia.
Análisis 2: El árbol de la ciencia (Pío Baroja)
Ideas y estructura
Este fragmento pertenece a la obra El árbol de la ciencia, escrita en 1911 por Pío Baroja, autor de la conocida Generación del 98. Está constituido, en su estructura externa, por [X] párrafos; internamente cuenta con secuencias dialogadas y podemos presentar las siguientes ideas:
- Planteamiento: confianza en los medios de comunicación.
- Los periódicos españoles, triunfalistas, transmiten la idea de que España es superior a EEUU en la contienda por las colonias de Cuba y Filipinas.
- Difunden un falso optimismo que es creído y compartido por la mayoría de españoles.
- Los periódicos españoles, triunfalistas, transmiten la idea de que España es superior a EEUU en la contienda por las colonias de Cuba y Filipinas.
- Nudo: discusión entre Andrés e Iturrioz.
- Iturrioz presagia la derrota e intenta convencer a Andrés de ello.
- Incredulidad de Andrés.
- Iturrioz argumenta que la flota española en Cuba y Filipinas es ridícula en comparación con la americana.
- Iturrioz presagia la derrota e intenta convencer a Andrés de ello.
- Desenlace: indignación final de Andrés.
- Andrés observa indignado cómo la gente, despreocupada, asiste a los toros y al teatro.
- El pueblo español se muestra indiferente tras la derrota de Cuba y Filipinas.
- Andrés observa indignado cómo la gente, despreocupada, asiste a los toros y al teatro.
En este fragmento narrativo, encontramos una estructura cronológica, pues los hechos se presentan en el orden en el que ocurren. Puede observarse, además, que es inductiva, pues la idea principal está al final del texto, donde se aprecia el enfado de Andrés ante el falso patriotismo de los españoles que, con absoluta indiferencia, hacen vida normal tras la derrota.
Análisis 3: Historia de una escalera (Antonio Buero Vallejo)
Este fragmento pertenece a la obra Historia de una escalera, estrenada en 1949 por Antonio Buero Vallejo, autor conocido del teatro social de los años 50. Al tratarse de un texto dialogado, la estructura externa consta de [X] intervenciones, donde [X] son de tal personaje y [X] de tal personaje; con algunas acotaciones.
En cuanto a la estructura interna, podemos dividir las intervenciones en [X] intercambios bien diferenciados:
[Instrucción para completar el análisis]: Enumerar los intercambios (apuntando el número de intervenciones entre paréntesis), como se ha hecho hasta el momento, enunciándolos con sus diferentes ideas y después redactar su tipo de estructura, teniendo en cuenta dónde aparece la idea principal y, según esto último, si es inductiva, deductiva o encuadrada.